¿Quién no ha visto en más de una ocasión cómo su bella planta, esa que llevan tiempo cuidando con tanto esmero, de repente, empieza amarillear? Y sin explicación aparente, al menos, sin explicación que nos venga a la cabeza así de pronto, porque lógicamente, explicación sí que hay al respecto. Pese al dramatismo de la situación, es un mal muy frecuente al que se expone cualquiera que cuida plantas de cualquier clase. No hay una sola causa sino muchas detrás de ese fenómeno de volverse amarillas las hojas. Y vamos a analizarlas una por una, para darte así los mejores remedios caseros para las plantas con hojas amarillas.
No te engañaremos, si las hojas de tus plantas se volvieron amarillas, es que algo está fallando en su cuidando. Pero simplemente aprende los motivos y a cuidarlas correctamente para evitar que esto se repita. A fin de cuentas, no olvidemos que estamos ante seres vivos con necesidades varias y delicadas, en su mayoría. Cualquier mínimo descuido o, sencillamente, variación en su hábitat y condiciones de vida, pueden alterar su estructura y hacer que enfermen o muestren síntomas de carencias y estrés.
Hojas amarillas en las plantas, ¿qué ocurre?
Sí, en efecto, cuando las hojas se vuelven amarillas en cualquier planta, debemos encender las alarmas. Algo le está ocurriendo, pues es su manera de comunicarse y de indicarte que tienes que hacer algunos cambios en su cuidado. La buena noticia es que posiblemente habrá remedio y podrás recuperar la planta y hacer que siga tan saludable como siempre, tan solo introduciendo algunos cambios en su cuidado.
Nunca ignores el síntoma de las hojas amarillas, pues si lo haces y vas dejando pasar el tiempo, el problema irá empeorando y cada vez será más difícil resolverlo. De modo que ante una situación como esta en la que veas que las hojas se han vuelto o se están poniendo amarillas, tienes que actuar sin prisa pero sin pausa.
Los motivos de las hojas amarillas en las plantas pueden ser distintos. Estos son los más comunes:
- Problemas con el riego: puedes haber regado tu planta en exceso o, por el contrario, haberte quedado corto en la cantidad de agua que le has proporcionado. Tanto el exceso como la carencia de agua son perjudiciales para una planta. Porque si riegas mucho, las raíces se pudren con el agua acumulada. Mientras que si riegas poco, la falta de agua puede acarrear la pérdida de nutrientes. Por lo tanto, es importante regar en su justa medida, lo cual te lo marcará la especie de planta de que se trate, además del ambiente en el que está cultivada.
- Le falta nutrientes: la carencia de nutrientes puede suceder por falta de agua o porque, sencillamente, carece de nutrientes esenciales como suelen ser el hierro, el magnesio y el hierro. Al igual que nosotros o cualquier organismo vivo, los nutrientes son vitales para gozar de buena salud y buen aspecto. Tendrás que proporcionar abono o vitaminas a tus plantas.
- Poca luz: la falta de luz también puede ser otra de las causas de las hojas amarillas. Porque sin luz, las plantas no son capaces de hacer la fotosíntesis y, por ende, se debilita, manifestándolo a través de sus hojas.
- Plagas y enfermedades: por supuesto, la aparición de plagas y enfermedades también están ahí, amenazando las plantas y, ante cualquier descuido, nos ganan fácilmente la batalla. Pero podemos ponerles freno. Por ejemplo, nuestra planta puede verse amenazada por ácaros, pulgones y otros parásitos que se comen la savia, dejando las hojas decoloridas.
Remedios caseros efectivos para tratar las hojas amarillas en las plantas
Los males que hemos visto se pueden prevenir y curar prestando atención a los síntomas y no postergando su tratamiento. Pero si ya estás mentalizado de que esto sucede, simplemente préstale la atención. Te echamos un cable nosotros. Coge papel y lápiz y ve anotando.
Controla el riego
Si regar de más o de menos es la causa de la mayoría de los problemas en las plantas, lógicamente, controlar el riego será uno de los remedios clave para solucionar el problema de las hojas amarillas o cualquier otro que les afecte.
Claro que, para llevar un control efectivo del riego tienes que saber muy bien identificar cuándo tus plantas necesitan agua. Hay un buen método que consiste en introducir un dedo en la tierra y, si sale seca, sabrás que es el momento de regar pero, si sale el dedo húmedo, todavía es pronto. Para que sea confiable la comprobación, debes introducir el dedo a una profundidad de 2 o 3 centímetros.
El drenaje: otro factor esencial
Tal vez riegas poco pero la tierra no drena bien. En ese caso, el agua se acumula y puede hacer mucho daño a tu planta, porque las raíces quedan en riesgo de pudrirse. Además, la humedad es terreno perfecto para la proliferación de hongos, insectos y parásitos.
Si tu fallo está aquí, busca el modo de mejorar el drenaje de tus plantas. Cambia el sustrato por uno que absorba mejor el agua, etc.
¿Y si le faltan nutrientes a tus plantas?Infusiones de piel de plátano y huevo
Quizás a tus plantas le faltan nutrientes. Si por aquí van los tiros, hay opciones para mejorar su nutrición. Por ejemplo, añadirle al riego una infusión de piel de plátano, que le aportará potasio y fósforo; o de cáscaras de huevo, que le añadirá un plus de calcio. Se preparan sencillamente infusionando la piel del plátano y haciendo lo mismo o triturando la cáscara de huevo.
Añade al riego suero de leche
Otra alternativa interesante es añadir suero de leche con dos partes de agua al riego. Así estarás alimentando tus plantas con un extra de nutrientes, especialmente calcio.
Estos 3 remedios caseros para las plantas con hojas amarillas lograrán solucionar el problema y te ayudarán a tener un terreno de plantas sanas y hermosas. ¿Te gustaron? Si conoces más remedio o ya has puesto en práctica estos que te hemos mostrado en este artículo, te invitamos a dejar tu comentario, para así ayudar a otros usuarios a ampliar sus conocimientos también.