Abedul, el árbol medicinal más completo

Vista de un bosque de abedul

El abedul es uno de los árboles caducifolios más comunes de Europa, y también de los jardines que gozan de un clima templado. La corteza blanquecina de su tronco y su espectacular colorido otoñal, además del poco espacio que necesita para desarrollarse, hacen de él una de esas plantas con las que se puede tener un paraíso nada más salir por la puerta de la casa.

Sus cuidados también son muy interesantes, tanto para los principiantes como para los más avanzados. Así que si quieres saberlo todo sobre él, no te puedes perder este especial.

Origen y características

Abedul, un árbol de jardín precioso

El abedul, cuyo nombre científico es Betula pendula, es un árbol caducifolio originario de Europa, el norte de África y sudoeste de Asia. También crece en el norte de Turquía, el Cáucaso y en Canadá. Popularmente se le conoce como abedul, abedul blanco, abedul común, abedul péndulo, abedul verrucoso, albar, aliso blanco, bédul, beduch, bedul, bieso, biezo, chopa blanca y chopo silvestre.

Se caracteriza por tener un tronco delgado y alto, de 30 metros, con corteza de un blanco puro una vez adulto y parduzco cuando joven. La copa es aovada, densa, con las ramas erguidas. Las hojas miden unos 6cm contando con el pecíolo, y son de color verde que cambia al amarillo en otoño antes de caer.

Florece a finales de invierno. Las flores femeninas aparecen en amentos solitarios de 1’5 a 3cm, y las masculinas miden unos 3-6cm y aparecen en grupos de 2 o 3. El fruto es una sámara bialada.

Cultivo y cuidados

¿Te gustaría tener un ejemplar? De ser así te recomendamos proporcionarle los siguientes cuidados:

Ubicación

Es un árbol que se debe de colocar en el exterior, a pleno sol. Es muy importante plantarlo a una distancia mínima de 6 metros de la pared de la casa, tuberías y demás, ya que aunque no ocupa demasiado espacio su sistema radicular es de los que se extienden bastante.

Suelo

Prefiere suelos frescos, ricos en materia orgánica, y ácidos (pH entre 4 y 6). También puede tenerse en jardines con tierra caliza, pero no ha de ser compacta.

Riego

Muy frecuente. El abedul es un árbol que vive cerca de los cursos de agua, de modo que es muy importante regarlo muy seguido: cada 4-5 días en verano y algo menos el resto del año.

Abonado

Desde comienzos de primavera hasta finales del verano se puede abonar con abonos orgánicos, como el guano (como este de aquí) o el estiércol.

Época de plantación

En primavera, cuando el riesgo de heladas haya pasado.

Poda

La poda del abedul solo se reduce a quitar las ramas secas, enfermas o débiles en otoño al caerse las hojas o a finales de invierno antes de la brotación.

Multiplicación

Las flores del abedul pueden ser femeninas o masculinas

Imagen – Wikimedia/Talen

Semillas

Para multiplicarlo por semillas primero hay que estratificarlas por tres meses en la nevera rellenando un tupperware con vermiculita, luego enterrarlas un poco en el sustrato, regar y colocar el recipiente en el electrodoméstico, en donde se ponen los productos lácteos, embutidos y demás.

Cuando haya pasado ese tiempo, hay que proceder a sembrarlas en un semillero siguiendo este paso a paso:

  1. Lo primero que haremos será rellenar el semillero con sustrato de cultivo universal mezclado con un 30% de perlita.
  2. Después, regamos y echamos las semillas en la superficie.
  3. Luego, las cubrimos con una fina capa de sustrato y espolvoreamos cobre o azufre para prevenir la aparición de hongos.
  4. Por último, pulverizamos con agua y colocamos el semillero en el exterior, a pleno sol.

Si todo va bien germinarán a lo largo de la primavera.

Esquejes

Una manera más rápida de conseguir ejemplares de abedul es por esquejes tomados a finales de invierno. Para eso lo que haremos será cortar una rama de unos 40cm, impregnar su base con hormonas de enraizamiento en polvo (podemos comprarlas aquí) o con enraizantes caseros y luego plantarlo en una maceta con sustrato universal.

Lo colocamos en semisombra, y en 2-3 meses tendremos un nuevo abedul.

Acodo

Si queremos asegurarnos de que conseguiremos un nuevo abedul, podremos multiplicarlo por acodo aéreo en primavera. La manera de proceder es la siguiente:

  • Lo primero que haremos será cortar un anillo de corteza de 1-2cm de ancho a una rama que se vea sana.
  • Después, la pulverizamos con agua y la impregnamos con hormonas de enraizamiento en polvo.
  • Ahora cogemos una bolsa de plástico de color oscuro, la abrimos por el extremo, y la colocamos sobre la rama atando un lado con una cuerda o alambre.
  • Acto seguido, rellenamos la bolsa con sustrato de cultivo universal previamente humedecido con agua y atamos el otro extremo de la bolsa a la rama para que no se pierda la tierra.
  • Por último, vamos regando con una jeringuilla frecuentemente.

En 2-3 meses emitirá sus propias raíces y, más adelante, podremos separar nuestro nuevo ejemplar de la planta madre.

Rusticidad

Resiste heladas de hasta los -18ºC; en cambio, no puede vivir bien en climas con temperaturas superiores a los 35ºC.

¿Se puede trabajar como bonsái?

Sí, por supuesto. El bonsái de abedul es uno de los, que de hecho, más se puede encontrar a la venta en los viveros. Sus cuidados son los siguientes:

  • Ubicación: exterior, a pleno sol.
  • Riego: frecuente. No resiste la sequía.
  • Sustrato: 100% akadama (puedes adquirirla aquí).
  • Abonado: desde primavera hasta finales del verano con un abono líquido para bonsáis (como este de aquí)Flower 10724 - Abono líquido bonsáis, 300 ml siguiendo las indicaciones especificadas en el envase.
  • Estilos: se adapta sin problemas casi todos: bosque, vertical formal, vertical informal.
  • Poda: se le debe dar forma cuando aún es joven, quitando aquellas ramas que se sobresalgan del estilo.
  • Trasplante: cada 2-3 años.

¿Qué usos tiene?

El abedul durante el otoño se vuelve amarillo

Ornamental

Es un árbol con un alto valor ornamental. Queda de maravilla en los jardines, ya sea como ejemplar solitario o en grupos. Aunque no da mucha sombra, es perfecto para, por ejemplo, tener como pantalla natural.

Propiedades del abedul

Es una planta medicinal muy completa, cuyas propiedades son: antisépticas, antifúngicas, depurativas, antiinflamatorias, febrífugas, astringentes, antihemorrágicas, cicatrizantes y analgésicas. Esto significa que se usa para:

  • aliviar el dolor de cabeza
  • retención de líquidos
  • retrasar o evitar la caída del cabello
  • fiebre
  • tratar las infecciones del tracto urinario
  • cuidar la piel
  • gota
  • tratar la artritis, reuma y la artrosis
  • depurativo
  • aliviar los dolores

La dosis es:

  • Uso interno: preparar una infusión con una cucharada pequeña de hojas secas de abedul por cada 200ml de agua. Se deja reposar 3 minutos, se cuela y finalmente se bebe.
  • Uso externo: el aceite esencial que se extrae de la savia está muy concentrado, por lo que su uso se recomienda bajo supervisión de un profesional.

Contraindicaciones

El abedul es una planta muy interesante, pero es importante no tomar infusión durante más de dos semanas seguidas. Además, si ya estamos tomando medicamentos con acción anticoagulante, tenemos el síndrome de intestino irritable o colitis no podremos tomarlo.

Vista del tronco joven de un abedul

Imagen – Flickr/Peter O’Connor

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  1.   Jc dijo

    Me parece un árbol maravilloso, no sólo por su belleza también por lo fuerte que son y su capacidad de reproducción.

    1.    Mónica Sánchez dijo

      Coincido contigo Jc. Es un árbol espléndido, siempre que se plante en el sitio adecuado claro 🙂

      Saludos!

  2.   Carlos dijo

    Un uso del abedul (birch, en inglés) que no está mencionado aquí es para la fabricación de baterías musicales. Se lamina la madera de abedul y con esa chapa se arman los cascos de los tambores (de entre 4 y 8 mm de espesor)
    El sonido que se logra es de los mejores, muy cálido, con armónicos muy acotados, dando un sonido compacto y profundo a la vez.

    1.    Mónica Sánchez dijo

      Interesante dato, Carlos. Gracias!