Acer circinatum

Hojas del Acer circinatum

Los arces son árboles preciosos, que poseen unas hojas palmeadas que se tornan de colores anaranjados, amarillentos o rojizos durante el otoño. Pero claro, muchos de ellos son idóneos para jardines medianos o grandes, y no tanto para macetas. Aunque ese no es el caso del Acer circinatum.

Aunque sí que es verdad que puede superar los 10 metros, es una planta que tolera muy bien la poda y que, además, es muy adaptable. ¿Te apetece conocerlo?

Origen y características

Vista de un Acer circinatum

Nuestro protagonista es un árbol caducifolio cuyo nombre científico es Acer circinatum. Es nativo de Norteamérica, concretamente desde la Columbia británica hasta California. Puede alcanzar una altura entre los 5 y los 18 metros, dependiendo de si crece a campo abierto o cerrado. Las hojas son palmeadas y lobuladas con 7-11 lóbulos de 7-14cm de largo y ancho, con los bordes dentados. Estas son de color verde, pero en otoño se tornan de color amarillo brillante hasta naranjas-rojizas antes de caer.

Las flores son pequeñas, con el cáliz rojizo y cinco pétalos amarillo verdosos. El fruto es una disámara.

¿Cuáles son sus cuidados?

Semillas del Acer circinatum

Si quieres tener un ejemplar, te recomendamos proporcionarle los siguientes cuidados:

  • Ubicación: es importante colocar el Acer circinatum en el exterior, en semisombra.
  • Tierra:
    • Maceta: sustrato de cultivo de plantas ácidas mezclado con un 30% de perlita. También se puede mezclar 70% akadama con 30% de kiryuzuna.
    • Jardín: ha de ser ácido (pH de 4 a 6), rico en materia orgánica y con buen drenaje.
  • Riego: cada 2 días en verano y cada 4-5 días el resto del año. Usar agua de lluvia o sin cal.
  • Abonado: desde primavera hasta verano abonar con un abono para plantas ácidas siguiendo las indicaciones especificadas en el envase del producto.
  • Época de plantación o trasplante: en primavera, cuando el riesgo de heladas haya pasado. En caso de tenerlo en maceta, trasplantarlo cada 2 años.
  • Poda: a finales de invierno. Se han de quitar las ramas secas, enfermas o débiles, y se han de recortar aquellas que estén creciendo demasiado.
  • Multiplicación: por semillas en otoño, y por esquejes o acodo aéreo en primavera.
  • Rusticidad: soporta hasta los -15ºC.

¿Qué te ha parecido este árbol?


Sé el primero en comentar

Deja tu comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

*

*

  1. Responsable de los datos: Miguel Ángel Gatón
  2. Finalidad de los datos: Controlar el SPAM, gestión de comentarios.
  3. Legitimación: Tu consentimiento
  4. Comunicación de los datos: No se comunicarán los datos a terceros salvo por obligación legal.
  5. Almacenamiento de los datos: Base de datos alojada en Occentus Networks (UE)
  6. Derechos: En cualquier momento puedes limitar, recuperar y borrar tu información.