Uno de los jardines que más éxito han ido teniendo durante los últimos años, son los jardines japoneses. La principal característica de estos jardines, es que son jardines cerrados, muy aislados del exterior, por ende de la calle, para que puedan tener ese aire tranquilo que los hace tan peculiares. Es importante destacar, que en las casas japonesas, estos jardines suelen estar ubicados en el medio, tratando de semejar un mundo totalmente aparte.
Existen algunos elementos que son imprescindibles para tener en este tipo de jardines, como por ejemplo las rocas, que son una de las bases de estos lugares. Las rocas, además, se suelen utilizar aquellas de origen volcánico, de diferentes tamaños y formas, para que le den al jardín un aspecto más natural y original al mismo tiempo. Para obtener más información sobre cómo diseñar este tipo de espacios, puedes visitar el artículo sobre jardines japoneses en casa.
De igual forma, si quieres diseñar un jardín con las características de un jardín japonés, deberás seguir algunas normas y utilizar algunos elementos para conseguir un lugar perfecto. Por ejemplo, el Iwakura es el lugar donde irán las rocas, que se atan con cuerdas para delimitar el espacio que están ocupando, y deben ser colocadas de forma natural para que parezca que están ahí como naturalmente estarían ubicadas.
Para delimitar el espacio del jardín, debes utilizar láminas de brezo o de bambú, setos o cualquier otro material natural. Recuerda que el jardín japonés quedará como si fuera una isla en medio del espacio, si queda muy bien delimitado, y te permitirá utilizar el resto del espacio para crear otros tipos de jardines. Otro aspecto muy importante es la grava, que deberá ser de color blanco y deberá ser rastrillada para que se formen ondulaciones como si fuera una especie de camino.
En cuanto a las plantas, las que más se utilizan en este tipo de jardines son el bambú, la azalea, el arce japonés, los helechos, los lirios, entre otros. De igual manera, puedes utilizar musgo, sobretodo en aquellas áreas muy húmedas para que se mantenga en muy buen estado. Para un conocimiento más profundo sobre las plantas para un jardín japonés, puede ser de gran ayuda.
Además, es relevante mencionar que la disposición de estos elementos debe llevarse a cabo con cuidado y atención, ya que un buen diseño puede realzar las características únicas de un jardín japonés. Incluir elementos como pequeños estanques, puentes de madera y caminos de grava puede añadir un toque de autenticidad. Una excelente opción para saber más sobre elementos y sus usos se encuentra en el artículo sobre ikebana, que explora el arte floral japonés y su conexión con la naturaleza.
La armonía es fundamental en cualquier jardín japonés, y esto incluye la elección de las plantas y su ubicación. Es esencial que el diseño y la elección de plantas se realicen teniendo en cuenta lo que se desea representar en el jardín. Si deseas obtener más ideas sobre cómo asociar diferentes especies, el artículo que habla sobre la Daphne y Camelia ofrece un enfoque interesante.
El mantenimiento de un jardín japonés también implica prestar atención a la estética en todo momento. El uso de técnicas de poda y cuidado de las plantas es crucial para mantener el jardín en su forma óptima. Hay diversas prácticas que se pueden llevar a cabo para asegurarse de que todas las plantas prosperen y mantengan su belleza. Por ejemplo, si quieres obtener más información sobre arbustos, puedes consultar el artículo sobre la selección de arbustos japoneses que se adaptan perfectamente a este tipo de jardines.
En el diseño de un jardín japonés, es importante también considerar la historia y el simbolismo detrás de cada elemento. Cada roca, planta o estanque puede tener un significado especial que enriquece el espacio. Para profundizar más en este aspecto, es recomendable leer sobre la historia de los jardines japoneses y cómo han evolucionado a lo largo del tiempo.
Finalmente, la creación de un jardín japonés es un proceso que requiere tiempo y dedicación. Cada detalle cuenta y la atención al diseño es fundamental para lograr un espacio que inspire tranquilidad y armonía. Para aquellos que tienen espacios reducidos, el jardín japonés pequeño puede ser una opción viable, permitiendo que incluso los entornos más compactos puedan disfrutar de la belleza de esta tradición.
A medida que avances en la creación de tu jardín japonés, recuerda siempre el papel que juegan las rocas, grava y plantas en la composición general. La correcta elección y colocación de cada uno de estos elementos puede transformar un espacio ordinario en un lugar de paz y belleza duradera.