Los árboles son plantas que, por lo general, nos son de mucha utilidad: algunos dan una sombra muy agradable, otros dan frutos comestibles, y hay otros que tienen un gran valor ornamental. Pero el que te voy a presentar en este artículo es uno que no recomiendo tener a nadie, ya que si bien es una planta muy decorativa, sus frutos tienen un aspecto que podría llevarnos a cometer un error fatal puesto que pertenecen al árbol más peligroso del mundo.
Sigue leyendo para conocer sus características. Así te será muy fácil identificarlo en caso de que te encuentres con él.
El árbol más peligroso del mundo es una planta conocida como el árbol de la muerte o la manzanilla de la muerte originaria de las regiones costeras desde Florida hasta Colombia. Es muy común en varias islas del mar Caribe, entre ellas la isla de Margarita. Su nombre científico es Hippomane mancinella, y crece hasta alcanzar los 20 metros.
Su tronco normalmente es recto, pero como crece en suelos arenosos podría darse el caso de que se desplomara, creciendo de forma rastrera. Tanto el tronco como las ramas tienen una corteza gruesa y quebrada, de color gris. La copa es redondeada y globosa, y se compone de hojas simples, elípticas y con textura coriácea. Los nervios son de color amarillo y el pecíolo es largo. Es perennifolio, pero durante la temporada seca suele perder parte de su follaje.
Sus flores se agrupan en inflorescencias que son espigas de 7cm de largo. El fruto es un pomo de forma globosa que mide unos 4cm de diámetro, con la piel glauca y brillante. En su interior encontraremos semillas redondeadas de color pardo.
Todas las partes de la planta son tóxicas. Los efectos que causa son los siguientes:
- Al romper hojas, ramas, flores o tronco emanará un látex blanquecino que es muy irritante. Además, puede causar quemaduras, ampollas e inflamación.
Si entra en contacto con los ojos, podría ocasionar ceguera. - Si se ingiere, provocará la muerte.
Por otra parte, el polen es altamente alergénico hasta el punto de que puede desatar reacciones alérgicas severas en personas sensibles.
Así que ya lo sabes: disfruta de su belleza, pero no lo ingieras bajo ningún concepto.