Cuando el verano termina y llega el frío, la gran mayoría de plantas empiezan a entrar en un estado de poso o hibernación; sin embargo, hay otras que, por el contrario, se preparan para florecer. Muchas de ellas son arbustos, generalmente de hoja caduca, que abrirán sus flores en invierno o durante la primera temprana. ¿Te gustaría conocer sus nombres?
Si te apetece que tu jardín o tu patio tenga algo de color durante los meses más fríos, a continuación te voy a hablar de diez arbustos que florecen en invierno.
Abeliophyllum distichum
Imagen – Wikimedia/阿橋 HQ
El Abeliophyllum distichum es un arbusto caduco que alcanza unos 2 metros de altura. Es endémico de Corea, donde se encuentra en peligro de extinción. Sus flores son blancas, y miden aproximadamente un centímetro de diámetro. Estas son fragantes, y brotan poco antes de que empiece la primavera. Pero además de sus preciosas flores, has de saber que en otoño las hojas pasan a ser rojizas, por lo que es una planta que se ve bonita durante gran parte del año.
Camellia oleifera
Imagen – Wikimedia/阿橋 HQ
La Camellia oleifera es un arbusto o arbolito de hoja perenne originario de China que alcanza los 7 metros de altura. Florece en invierno, y lo hace produciendo flores blancas de unos 3 centímetros de diámetro, muy fragantes. Es interesante plantarla en los bordes de los caminos, junto con otros arbustos más bajos, y así crear un efecto natural y armonioso.
Cornus mas
El Cornus mas, o cornejo macho, es un arbusto de hoja caduca nativo de Europa y de Asia que alcanza una altura de unos 5 metros, aunque en algunas ocasiones puede llegar a hacerse un árbol de 10 metros de alto. Florece hacia finales del invierno, y lo hace produciendo flores amarillas que se agrupan en racimos de hasta 25 flores. Luego, maduran los frutos, que son drupas rojas, parecidas a las cerezas, y que como ellas son comestibles.
Daphne odora
Imagen – Wikimedia/Herby
La Daphne odora es un arbusto perennifolio de corta vida (no suele vivir más de diez años) que alcanza una altura de un metro. Es nativo de China y Japón, y es una planta que produce flores muy, muy fragantes, que si bien no miden más de un centímetro de diámetro, se reúnen en racimos de hasta 4-5 centímetros de ancho que huelen de maravilla.
Edgeworthia chrysantha
Imagen – Wikimedia/Thomson200
Este es un arbusto caducifolio que bien podría haberse sacado de un cuento. Se trata de una planta caducifolia nativa de China que alcanza una altura de hasta 1,5 metros. Las flores son amarillas y brotan mucho antes de que termine el invierno; de hecho pueden hacerlo ya en febrero en el hemisferio norte, y además son muy fragantes, de modo que te recomendamos plantarlo por ejemplo en los bordes de los caminos o en las entradas/salidas del jardín o patio.
Erica herbacea
Imagen – Wikimedia/Heinz Staudacher
La Erica herbacea es un arbusto perennifolio pequeño, que no supera los 30 centímetros de altura y que produce flores lilas en invierno. Se trata de una especie originaria de Europa, en particular de los Alpes, por lo que está perfectamente adaptada a vivir en zonas donde se producen nevadas importantes todos los años.
Forsythia
La forsitia es un arbusto de hoja caduca originario de Asia que, dependiendo de la especie, alcanza una altura de 1 a 3 metros. Sus flores son amarillas, miden unos 2 centímetros cuando están abiertas, y brotan muy pronto, a finales del invierno o a comienzos de primavera, antes de que lo hagan las hojas. Asimismo, hay que decir que es una planta muy fácil de cuidar, que soporta bien las heladas.
Hamamelis virginiana
Imagen – Flickr/Kurt Wagner
El Hamamelis virginiana es un arbusto o árbol pequeño de hoja caduca que alcanza una altura de entre 2 y 7 metros. Popularmente se le conoce como avellana de la bruja o escoba de bruja. Es originario de los Estados Unidos, pero es una planta con un valor ornamental tan alto que se puede cultivar en prácticamente cualquier jardín o patio siempre que el clima sea templado. Las hojas pasan a ser rojizas durante el otoño, y las flores, las cuales son amarillas, brotan a finales del invierno.
Jasminum nudiflorum
Imagen – Wikimedia/Hanson59
El Jasminum nudiflorum, también llamado jazmín de invierno, es un arbusto caducifolio originario desde el Tíbet hasta China. Crece hasta los 4 metros de altura, y desarrolla ramas muy largas, motivo por el que se puede usar para cubrir verjas, celosías o arcos por ejemplo. Las flores son amarillas y aparecen a finales del invierno.
Viburnum tinus
Imagen – Flickr/Salomé Bielsa
El Viburnum tinus, o durillo como también se le llama, es un arbusto perennifolio que crece en la región mediterránea. Puede alcanzar una altura de hasta 7 metros, aunque en los jardines se poda para que no crezca más de 2-3 metros. Las flores son blancas, y se reúnen en inflorescencias con forma de umbela las cuales brotan hacia finales del invierno, cuando la primavera está cerca.
Son muchos los arbustos que florecen en invierno. ¿Te han gustado los que te hemos mostrado aquí?