El Arum Maculatum es una planta perenne tuberosa de la familia araceae. Es una especie que se desarrolla mejor a la sombra, en suelos húmedos y drenados, puede alcanzar de 30 a 50 cm de altura, se auto siembra con facilidad en los jardines, pero su erradicación definitiva se torna complicada y su forma bastante sugerente le ha hecho merecedora de múltiples apodos.
Es originaria del Reino Unido, no obstante, se encuentra presente en buena parte de Europa, en territorio asiático de Turquía y países del Cáucaso.
Características
Es una planta perenne de hojas verdes que presentan una forma de flecha, frecuentemente veteadas de color negro, el follaje de esta especie cae a mediados del verano. Sus primeras láminas surgen del suelo y luego son seguidas por unas hojas de matiz verde pálido con forma de vaina llamada espata, dentro del cual se erige un tallo alargado y carnoso.
Su inflorescencia ocurre entre los meses de abril y mayo y se muestra como una espiga o espádice, donde están agrupadas las flores. En su base están un conjunto de flores de un solo pistilo y por encima un cinturón de flores estériles de una sola antera purpúrea. Durante la primavera sus flores emanan un mal olor que atrae a los insectos para su polinización.
Sus rizomas son grandes y de forma alargada, de apariencia parduzca. Sus frutos se hallan dispuestos en tupidos racimos de bayas de color rojo brillante y naranja, que se asemejan a las mazorcas o espigas de maíz. A pesar de su apariencia, estos frutos resultan bastante tóxicos para las personas y mascotas.
Plantación y problemas del Arum maculatum
A pesar de ser una planta que puede provocar ciertas molestias o alergias, hay quienes las cultivan como planta ornamental en jardines y bosques. Los tubérculos se plantan a finales de verano o inicio de otoño, ideal colocarlos 20 a 30 centímetros de distancia y marcar el suelo donde se sembró.
Esta planta suele propagarse de manera rápida a través de auto siembra o mediante la distribución involuntaria de fragmentos de sus raíces alrededor del jardín, como puede ser el caso de un compost casero. En esta especie, los tubérculos se reproducen en múltiples ocasiones durante el año y el proceso de eliminarlos es complicado, por cuanto sus rizomas se regeneran rápidamente.
Lidiar con grandes extensiones infectadas por el Arum Maculatum en una cama bien plantada, es una tarea cuesta arriba. Los intentos de eliminarla por completo requieren de mucho esfuerzo y tiempo, pero sobre todo de mucha paciencia. Una de las recomendaciones, es recuperar los rizomas de la tierra para evitar su propagación. Sin embargo esto no garantiza su erradicación definitiva, debido a que cualquier trozo descuidado, se regenerará rápidamente. Por eso es importante asegurarse que el rizoma sea eliminado en su totalidad.
Otro recurso viable es colocar mantillos opacos en el suelo, para sofocar el crecimiento de la maleza. Los mantillos deben permanecer instalados al menos por dos períodos de crecimiento, se recomienda un mantillo de corteza a unos 15 o 20 centímetros de profundidad.
Usos y aplicaciones
Esta planta y para su uso medicinal debe plantarse en otoño o inicios de la primavera, periodo en sus hojas no se encuentran totalmente desarrolladas. Estas, al depositarse en arena dentro de bodegas, conservan sus propiedades por un año. También pueden secarse a fuego lento para después pulverizarlas y conservarlas en frascos bien tapados. Las raíces frescas, utilizadas como masa para capsulas, conservan las propiedades medicinales.
En un tiempo se utilizó la raíz seca del Arum maculatum como diurético y estimulante. La literatura médica registra un caso de hidropesía que fue tratado con éxito con un medicamento compuesto por Arum y Angélica. En el pasado, el jugo de raíces frescas fue utilizado como depurativo, pero su efecto era fuerte e inseguro.
Toxicidad y síntomas
Es importante tomar precauciones al manipular esta planta, debido a que sus distintas partes pueden generar reacciones alérgicas a las personas, en especial sus bayas que resultan venenosas. La planta contiene pequeños cristales semejantes a las agujas que pueden irritar gravemente la piel.
Su ingesta puede causar inflamación de la garganta, disnea e irritación estomacal. Aunque por su sabor áspero y picante, resulta difícil consumir grandes cantidades de esta planta, que provoca una sensación de cosquilleo que actúa como una advertencia. Por su toxicidad debe evitarse su cultivo en sitios donde residan niños o mascotas.