Cómo cuidar un bonsái de encina

Cómo cuidar un bonsái de encina

Fuente foto bonsái encina: Clasf

El mundo de los bonsáis es mucho mayor que los que ves en los supermercados de vez en cuando. Esos ejemplares, que se venden como plantas fáciles de cuidar, a veces no lo son. Pero no hay duda de que, si buscas un poco más, encuentras otros que son una belleza. Por ejemplo, el bonsái encina.

Su porte, la forma en que se desarrolla y la presencia que adquiere si lo cuidas bien lo hacen ideal para cualquier hogar. Pero, ¿cómo cuidar un bonsái de encina?

Cómo es la encina

Cómo es la encina

El bonsái encina, de nombre científico Quercus ilex, también es conocido como carrasca. Es un árbol que suele darse a menudo por los países mediterráneos y se caracteriza por cultivarse en climas secos.

En su forma original puede alcanzar fácilmente los 25 metros, aunque lo normal es que no llegue a los 15. Tiene una copa redondeada y da frutos, las bellotas. El tronco empieza siendo liso pero, conforme pasan los años, este se agrieta y adquiere una tonalidad más oscura.

Las hojas de la encina son muy pequeñas, comparadas con la altura que puede tener. Pero además, en las puntas, tienen una especie de pinchos; eso sí, solo en los ejemplares jóvenes, los adultos pierden esta cualidad en sus hojas.

Es una de las plantas más resistente que puedes tener y además germina muy fácilmente, razón por la que se crean bonsáis de encina.

Visualmente te encontrarás con un aspecto robusto y frondoso, razón por la que pueden soportar cualquier tipo de cambio climático, desde el calor extremo al frío más intenso.

Y en el caso del bonsái de encina, debes saber que es uno de los más recomendados para los principiantes porque resiste casi todo, crece de manera equilibrada y además puedes ir dándole forma sin tener que preocuparte por cumplir a rajatabla sus requisitos.

Cuidados del bonsái encina

Cuidados del bonsái encina

Fuente: bonsaime

Hablando de esos cuidados, aquí tienes todos los que necesita. Cuando lo leas, verás que no es un ejemplar que necesite mucho, más bien al contrario. Así que si quieres iniciarte con los bonsáis, no pierdas de vista a este.

Ubicación

Tal y como te hemos dicho antes, el bonsái encina se adapta a cualquier clima, ya sea húmedo, seco… Prefiere el seco, pero en realidad, se adapta a todo. Así que la ubicación de este bonsái puede ser tanto de interior como de exterior.

Ahora bien, si quisiéramos darle los mejores cuidados, deberías situarlo en una zona donde la dé sol directo porque le gusta mucho y además logrará un mejor desarrollo. Solo si ves que es demasiado sol (por ejemplo, en verano que hace más calor y puede quemarlo si está demasiadas horas), se pondría en semisombra.

No te preocupes por cambiarlo mucho de lugar, ya que tolera los cambios drásticos y es capaz de adaptarse a cambios de temperatura.

Temperatura

El bonsái de encima es uno de los que no tiene preferencias en cuanto a temperaturas. Puede vivir perfectamente en cualquier estación del agua, ya sea en fríos o heladas, o en calor extremo.

Ahora bien, ten en cuenta que como bonsái, sus raíces están más compactas y mucho más cerca de la superficie que en los ejemplares plantados en el suelo. Eso provoca que en heladas intensas, las raíces sí que puedan dañarse o al menos debilitarse. Si eso pasa, la integridad del árbol estará en peligro.

Por eso, es mejor intentar cubrirlas para evitar que le pase esto.

Tierra

Lo cierto es que este bonsái no es tan exigente como otros en cuanto al sustrato a utilizar. Pero sí es verdad que una mezcla de 70% de akadama y 30% de greda volcánica es lo mejor que puedes usar. Ahora bien, no quiere decir que sea lo único. En realidad, se adapta a lo que le des.

Por ejemplo, también podrías hacer una mezcla de arena gruesa (drenaje), arcilla granular y tierra. O arena gruesa, akadama y tierra vegetal.

Lo que sí debes tener en cuenta es que necesita que la tierra tenga un buen drenaje porque no le gusta demasiado el agua y, de hecho, no le gusta nada un encharcamiento.

Riego

El riego del bonsái encina es curioso. Muchos bonsáis necesita agua y mantenerlos húmedos. Pero no así en el caso de la encina. En este caso, solo debes regarlo cuando la tierra esté seca. Y no hace falta echarle mucha cantidad, más bien al contrario.

¿Qué pasa si te excedes con el riego? Nada. Este árbol lo aguanta bien, aunque no conviene que te pase muy a menudo.

En general, lo mejor es que, cuando veas que la superficie está seca, lo riegues un poco y esperes hasta que vuelvas a ver de nuevo esa parte seca. No te agobies si lo riegas y no sale agua por abajo, no quiere decir que no lo hayas regado bien.

Abonado

En primavera y en otro, es agradecido si le das un poquito de fertilizante. Pero ojo, porque debes aplicarle un abonado mensual desde primavera a primeros del verano. Y en otoño solo dos veces.

Poda

Si quieres que el bonsái tenga una forma bonita, tendrás que podarlo de manera habitual. Pero la poda propiamente dicha solo será a primeros de primavera, y antes de que el bonsái empiece a despertar. En ese momento debes podar los brotes dejando unos 6cm de largo en cada uno.

A lo largo del año, también deberás podarlo como mantenimiento para quitar las hojas, ramas y brotes que no quieras o que se salgan de la forma que le estás dando.

Trasplante

El bonsái de encina se debe trasplantar, cuando son ejemplares jóvenes, cada dos años. De adulto pueden pasar mínimo 3 años para hacerlo. Eso sí, en el caso de cortar las raíces, no debes pasarse, sino ser muy suave, porque no le gustan demasiado los trasplantes.

Y durante 3 días deberás ponerlo en un lugar luminoso pero que no le dé la luz directa.

Plagas y enfermedades

Como muchos otros árboles y plantas, el bonsái encina no está exento de sufrir problemas por las plagas y las enfermedades. Una de las más habituales es el oidio, que se caracteriza por un polvo blanco en las hojas o incluso en el tronco. Para solucionarlo, lo mejor es colocarlo en un lugar muy seco y reducir el riego. Además de aplicarle un fungicida y quitarle las hojas que tengan ese polvillo.

Otro de los problemas a los que te puedes enfrentar es la «seca de encina» que se sufre por un exceso de humedad y de agua. Con un fungicida de Fosetil AI podrías solucionarlo, pero también llevándolo a una zona más seca y espaciando aún más los riegos.

Más allá de estos problemas, es bastante resistente y no se suele ver afectado por otras plagas y/o enfermedades.

Multiplicación

multiplicacion bonsai encina

Fuente: lahuertadetoni

En cuanto a su reproducción, podría ser desde las bellotas hasta plantones de encinas (es decir, ejemplares muy finos y jóvenes que te ahorran unos cuantos meses o años de espera).

¿Te ha quedado claro cómo cuidar un bonsái encina?


Deja tu comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

*

*

  1. Responsable de los datos: Miguel Ángel Gatón
  2. Finalidad de los datos: Controlar el SPAM, gestión de comentarios.
  3. Legitimación: Tu consentimiento
  4. Comunicación de los datos: No se comunicarán los datos a terceros salvo por obligación legal.
  5. Almacenamiento de los datos: Base de datos alojada en Occentus Networks (UE)
  6. Derechos: En cualquier momento puedes limitar, recuperar y borrar tu información.