Bonsai sageretia: características y cuidados más importantes

Bonsai sageretia

Cuando vas a las tiendas el día en que llegan las ofertas de plantas, uno de los tipos de bonsáis que te puedes encontrar es el bonsái Sageretia. Es uno de los más comunes junto con el ficus, carmona y serissa. Y, sin embargo, salvo el ficus, todos los demás no son árboles fáciles de cuidar para principiantes en el mundo del bonsái.

Por eso, en esta ocasión, nos vamos a centrar en él para que sepas cómo es y los cuidados más importantes que debes darle para que no se te muera en dos semanas (literalmente). ¿Vamos a ello?

Cómo es el bonsái Sageretia

Venta de bonsais

Lo primero que necesitas, cuando tienes un bonsái Sageretia, es entender cómo es. Su nombre más «común» es el de ciruelo chino, aunque en las tiendas, y entre compradores, el de Sageretia suena mucho más.

Se caracteriza por tener unas hojas pequeñitas y un porte compacto. Su tronco es liso y bastante normalito (muy delgado en los bonsáis que sueles ver en las tiendas).

Además, florece con unas pequeñitas flores (que no son nada del otro mundo). Pero, tras ellas, llega el fruto, unas bolitas entre azul y violeta.

Cuidados del bonsái Sageretia

Sageretia thea

Como te decíamos antes, el bonsái Sageretia se vende como uno de los mejores para principiantes. Y en realidad no se puede estar más equivocado. Junto con los bonsáis carmona y serissa, son de los tres más complicados. Incluso se les resisten a muchos expertos en el mundo del bonsái.

Por eso, si te han regalado uno, o bien estabas pensando en comprarlo, deberías leer atentamente los cuidados que necesita.

Ubicación y temperatura

Como cualquier árbol, independiente de su tamaño, ha de estar en exterior. Es otro de los errores que se comete. Necesita el aire libre, y necesita sol. Ahora bien, no quiere decir que lo pongas al sol y te olvides.

En realidad, lo mejor es que el árbol tenga sol directo solo durante las primeras horas del día, pero a partir de las 12 del mediodía, cuando empiece a apretar la temperatura, deberá estar en sombra o semisombra.

Dicho de otra manera, necesita luz indirecta lo más posible, pero directa solo unas horas al día.

En cuanto a la temperatura, es un árbol delicado, y no le va bien cuando estas bajan de 12ºC, porque empieza a sufrir. Si en tu casa pasa eso entonces lo mejor es protegerlo o bien ponerlo en un invernadero para controlar mejor la temperatura. Por su parte, las temperaturas altas las tolera bastante mejor.

Sustrato

La mezcla ideal para este bonsái ha de ser una combinación de turba rubia, greda volcánica y akadama. De esta manera tendrás una tierra que aguantará la humedad, y al mismo tiempo drenará muy bien.

Riego

El riego es sin duda uno de los mayores quebraderos de cabeza de este bonsái, junto con la ubicación. Y es que no tolera ni la sequía ni el encharcamiento, pudiendo morir en apenas unos días de uno u otro motivo.

Podemos decirte que al bonsái Sageretia tendrás que regarlo a menudo pero sin encharcarlo. Y al mismo tiempo deberás comprobar que la tierra que le has puesto drena bien, pero también que retiene humedad. ¿Ves lo complicado que es?

Si te sirve de ayuda, te vamos a ayudar con estos consejos:

  • El mejor agua para riego de los bonsáis (no solo del Sageretia, sino de todos) es el agua de lluvia. Pero entendemos que no siempre vas a conseguir esta así que opta por agua del grifo pero con 48 horas mínimo de reposo. Además, te recomendamos echarle unas gotas de vinagre porque enriquece mucho más el agua.
  • La manera de saber si tu bonsái necesita o no agua es tocando con el dedo la tierra. Pero claro, aquí es donde viene el primer problema: los bonsáis que compras en supermercados tienen una tierra tan apelmazada que esta técnica es casi imposible de realizar. Y además, si lo compras y lo trasplantas, el shock es tan importante para la planta que podría morirse fácilmente. Así que tendrás que aplicar riegos con muy poca cantidad de agua, y más diarios, hasta que transcurran dos semanas, tiempo suficiente en que la planta se haya adaptado al nuevo hogar y puedas, siempre que sea el momento, trasplantar.
  • A la hora de regar, procura regar con una botella fina para que no le caiga demasiado agua. Los días previos a ese trasplante riega muy poquito, pero más veces. Cuando ya tengas la tierra adecuada, y revises con el dedo (metiéndolo) si está húmeda o seca, riega hasta que notes que sale el agua por los agujeros de drenaje de la maceta. En ese momento, deja de hacerlo.

Humedad

Otro de los cuidados del bonsái Sageretei del que apenas se habla, pero es importante, es la humedad. Esta planta necesita una humedad constante. Pero, ¿de cuánto? Pues hemos investigado y los datos nos dicen que ha de ser mínimo de un 30%. Si está entre el 30 y el 40, que es la humedad ambiental ideal, estará perfecto.

Eso implica que tendrás que pulverizarle las hojas a menudo para que se hidrate también por esa zona.

Abonado

Pequeño árbol

Seguimos con los cuidados del bonsái Sageretia y en este caso el abonado es un poco especial. Verás, se comienza en primavera, y se aplica un abono rico en nitrógeno que puedes echarle al agua de riego.

Sin embargo, cuando la temperatura supere los 30ºC, el abonado hay que reducirlo a la mitad.

Por otro lado, cuando llegue el otoño conviene abonarlo con un producto que sea rico en potasio y fósforo. Y en invierno tendrás que abonar una vez al mes.

Trasplante

El trasplante es un poco «peligroso», en el sentido en que tienes que esperar hasta que veas muchas raíces fuera de la maceta. En ese momento, tocará trasplantar, aproximadamente cada dos años, pero los expertos recomiendan que, en ese momento, debes eliminar el 30% de las raíces que tenga.

Si no sabes cómo cortarlas, ni cuáles, puedes hacer que sufra bastante, así que te recomendamos informarte bien sobre el tema antes de hacerlo.

Poda

La poda se hace durante todo el año para mantenerle la forma que quieras.

Plagas y enfermedades

La araña roja, la mosca blanca o los hongos son la perdición del bonsái Sageretia. Casi todos ellos aparecerán por no tener en cuenta los cuidados, o no hacerlo de manera correcta, por lo que cambiando estos se podrá mejorar.

Aun así, requerirá el uso de insecticidas y fungicidas, tanto para tratarlo como para prevenir los problemas.

Multiplicación

Finalmente, la propagación del bonsái Sageretia se puede hacer, bien por semillas (de los frutos que echa), o bien de esquejes que puedas sacar de tu planta.

Ahora puedes tener más oportunidades con tu bonsái Sageretia, pero recuerda que es de los que deberás estar más pendiente de él.


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