¿Vives o trabajas en la Comunidad Valenciana? Si es así, y si eres un ávido jardinero y te encanta cultivar tus propios alimentos, puede que te interese la certificación ecológica que te permite aumentar el valor ecológico de tu jardín o huerto.
La Comunidad Valenciana ofrece una certificación ecológica para las personas que cultivan alimentos en huertos comunitarios o individuales.
Esta certificación se denomina «Etiqueta Agroecológica», y su finalidad es certificar que los alimentos cultivados cumplen las buenas prácticas agroecológicas para obtener beneficios sociales, económicos y medioambientales, de forma sostenible y con un impacto sustancialmente menor.
¿Qué es la certificación ecológica?
Esta certificación en realidad es una manera de aprobar y verificar que tu granja cumple con las regulaciones orgánicas, y las normas determinadas que requieren determinados procesos para realizar la producción, incluidas las prácticas para cultivos, ganado y productos procesados.
Luego de obtener el certificado, puedes utilizar el sello orgánico para vender, etiquetar y representar tus productos.
Para este caso puntual, la Etiqueta Agroecológica es una iniciativa de la Comunidad Valenciana y forma parte del programa PLAN MOVES, cuyo objetivo es promover una producción sostenible y agroecológica para mejorar la calidad de los productos agrícolas.
La Etiqueta Agroecológica es válida tanto para la Comunidad Valenciana (provincia de Castellón, provincia de Valencia y provincia de Alicante) como para el Estado español en su conjunto.
Forma parte de la Etiqueta de Producción Ecológica de la Unión Europea y pretende reconocer las buenas prácticas de los productores agrícolas, así como la calidad de los productos agrícolas y agroalimentarios.
El objetivo principal es fomentar la sostenibilidad de la producción y la conservación del medio ambiente, promover el desarrollo local y crear un marco para el reconocimiento de los productores del sector que desarrollan actividades agroecológicas.
Requisitos para obtener la Etiqueta Agroecológica
Para obtener la Etiqueta Agroecológica, los agricultores deben cumplir una serie de normas legales, técnicas y de gestión.
Los principales actores implicados en el proceso de producción deben comprometerse con prácticas orgánicas, agroecológicas y sostenibles, siguiendo un plan de adaptación de 3 años.
El cultivador debe aceptar también las visitas periódicas de organismos de inspección autorizados a su jardín o huerto, realizadas de acuerdo con las disposiciones específicas del Reglamento (CE) n º 883/2014 de la Unión Europea.
Estas disposiciones pueden incluir, entre otros, la toma periódica de muestras, el uso de marcas de actividad autorizadas y la cooperación en análisis de laboratorio potenciales.
Además, el cultivador debe facilitar detalles del plan de producción y venta de alimentos, así como el cumplimiento de las normas de inspección del productor. El cultivador tendrá que facilitar también copias de facturas, certificados y otra documentación correspondiente a organismos de inspección autorizados.
Pasos para obtener la etiqueta agroecológica en la Comunidad Valenciana
En la Comunidad Valenciana, los pasos para obtener la Etiqueta Agroecológica para productores individuales de huertos y jardines son los siguientes:
Paso 1: Inscripción. Inscribirse en la Conselleria de Agricultura, Desarrollo Rural, Emergencia Climática y Transición Ecológica de la Comunidad Valenciana.
Paso 2: Solicitud. Solicitar formalmente la Etiqueta Agroecológica.
Paso 3: Documentación. Presentar la documentación necesaria para la certificación, incluido el plan de adaptación, una copia del plan de ventas y producción, copias de las facturas requeridas, y el plan de visita de los organismos de inspección autorizados.
Paso 4: Inspección. Esperar los resultados de la inspección inicial y de los análisis de laboratorio que puedan realizarse, así como la lista de medidas correctoras a adoptar, si fuera necesario.
Paso 5: Certificación. Una vez obtenido el Certificado Agroecológico, el productor está obligado a exhibirlo en sus instalaciones.
Ayuda financiera para la obtención del Sello Agroecológico
La Comunidad Valenciana ofrece ayuda financiera a los productores individuales que deseen obtener el Sello Agroecológico, dentro del programa PLAN MOVES.
La ayuda financiera puede incluir, entre otras, una reducción del 75% en las tasas de tramitación para la obtención de la certificación, así como pagos de apoyo a la renta para compensar la disminución del rendimiento de la producción agrícola, si fuera necesario y durante un período máximo de 3 años.
La Etiqueta Agroecológica de la Comunidad Valenciana es una certificación importante para los productores individuales de huertos y jardines que deseen demostrar que siguen buenas prácticas agroecológicas.
Aunque el proceso de certificación requiere el cumplimiento de una serie de normas legales, técnicas y de gestión, existe ayuda financiera para los productores individuales que la necesiten.
Al obtener la Etiqueta Agroecológica, los productores individuales de huertos y jardines pueden aumentar el valor ecológico de su producción y contribuir al desarrollo sostenible de la Comunidad Valenciana.
Beneficios de la certificación ecológica para tu huerto o jardín
Es muy importante obtenerla porque beneficia a los consumidores y a los productores:
Para el consumidor:
- Proporciona garantías de calidad de los productos, libres de pesticidas sintéticos y aditivos artificiales.
- Genera confianza, mejora la salud y, para muchos, el sabor de los alimentos orgánicos es más intenso y natural.
Para el productor (Mercado Premium):
- Acceso a precios Premium por la mayor demanda del mercado.
- Ventaja competitiva y acceso a mercados especializados (supermercados importantes, cooperativas y minoristas en línea).
- Genera mayor credibilidad e importancia de la marca por la calidad y las prácticas éticas.
- Recompensa por utilizar métodos de cultivo respetuosos con el medio ambiente para las generaciones futuras.
- Posibles programas de financiación adicionales.
Desafíos y consideraciones antes de la certificación ecológica
Si bien los beneficios son considerables, es fundamental que los productores individuales sean conscientes de los desafíos inherentes al proceso:
El periodo de transición (Mínimo de 3 Años):
El reto más grande es el periodo obligatorio de tres años de adaptación. Durante esta fase, el huerto debe seguir todas las prácticas orgánicas, pero sus productos aún no pueden ser vendidos como «certificados». Esto requiere paciencia y una gestión financiera que asuma una posible disminución inicial en el rendimiento de los cultivos.
Los costos y el esfuerzo burocrático:
El proceso implica costos de inspección y certificación. Se requiere dedicar tiempo considerable al registro de datos, gestión de la documentación y preparación para las visitas periódicas de los organismos de inspección. Este esfuerzo administrativo puede ser intensivo para un productor individual.
Reducción temporal del rendimiento:
Es común experimentar una disminución en el rendimiento de la cosecha durante los primeros años de transición, ya que el suelo se adapta a los métodos de fertilización natural y se eliminan los insumos químicos sintéticos. Requiere planificación y paciencia.
Mayor exposición a plagas y enfermedades:
La gestión de plagas y enfermedades en un entorno orgánico requiere un conocimiento más profundo y herramientas preventivas (como la rotación de cultivos o el control biológico) que pueden ser más laboriosas que el uso de pesticidas sintéticos.
Tener en cuenta estos desafíos es clave para iniciar el proceso de certificación con una expectativa realista y una estrategia de gestión sólida.
Análisis final: ¿Vale realmente la pena la certificación orgánica?
La certificación ecológica como motor de desarrollo rural sostenible
más allá de los beneficios directos para el productor y el consumidor, la Etiqueta Agroecológica contribuye significativamente a objetivos de desarrollo más amplios.
La incorporación de productos orgánicos en huertos y jardines es parte de un sector que está en rápido crecimiento, lo cual genera empleos directos e indirectos y promueve el crecimiento económico y las oportunidades en las zonas rurales de la Comunidad Valenciana.
Al formalizar las buenas prácticas mediante la certificación, se establece un estándar que eleva toda la industria local, atrayendo inversión y reconociendo el valor del conocimiento agrícola tradicional y sostenible.
Esto no solo garantiza la calidad de los alimentos para la generación actual, sino que también fomenta la conservación del medio ambiente para las generaciones futuras, protegiendo la biodiversidad, mejorando la salud del suelo y la calidad del agua a largo plazo.
Para llevar a cabo la producción orgánica en un jardín individual y aprovechar la creciente demanda del sector, es importante tener las certificaciones necesarias.
Sin embargo, la decisión de certificarse debe equilibrar el volumen de producción, el costo de la certificación y los posibles beneficios. No todos necesitan la etiqueta, pero es un camino claro para quienes buscan la ventaja competitiva y la credibilidad máxima en el mercado orgánico de la Comunitat Valenciana.
Los productos orgánicos
Recordemos que un producto orgánico es cultivado sin pesticidas sintéticos, fertilizantes, ni organismos genéticamente modificados, utilizando el equilibrio ecológico y la sostenibilidad.
Es importante saber que, si bien son beneficiosos para el medio ambiente, los expertos en nutrición afirman que los alimentos orgánicos no son necesariamente más saludables en términos de nutrientes en comparación con los cultivados de forma convencional, por lo que su elección no supone una diferencia significativa en la salud del consumidor final.
Además, los alimentos orgánicos pueden echarse a perder más rápidamente que los convencionales y tienen un precio más alto.
Para algunos agricultores, los estándares orgánicos son demasiado restrictivos y no ven la necesidad de una certificación de terceros, ya que mantienen una relación directa de confianza con los consumidores. De esta manera, evitan todo el proceso de certificación y el costo que implica.
Para finalizar, es importante tener en cuenta que la incorporación de productos orgánicos se realizan todos los jardines del mundo ya que es un sector que está en rápido crecimiento, genera empleos y promueve el crecimiento económico y las oportunidades en las zonas rurales. Para llevarlo a cabo es importante tener las certificaciones necesarias y lograr todos los beneficios.