Es una conífera muy elegante. Sus hojas son muy similares a las que tienen las del género Cupressus, que es por lo que se conoce con el nombre de falso ciprés, pero su porte es ligeramente distinto. Estamos hablando de los Chamaecyparis, unas preciosas plantas originarias de Asia y América del Norte que quedarán estupendas tanto en los jardines rústicos como orientales. Si deseas conocer más sobre una especie específica, puedes consultar el ciprés de Lawson.
Crecen hasta alcanzar alturas increíbles: ni más ni menos que 30m, pudiendo ser más en hábitat. Y como es perenne, es decir, se mantiene siempreverde todo el año, es perfecto para protegerse del sol en verano y disfrutar de él el resto del tiempo. Conócelo más a fondo.
Chamaecyparis pisifera
El género apareció en la Tierra hace muchos millones de años. De hecho se han encontrado registros fósiles de una especie ya extinta, la C. eureka, pertenecientes al Eoceno, hace 55 millones de años. Por lo que si quieres tener una planta que se puede considerar fósil viviente, esta es una de tus mejores opciones. Si te interesa saber más sobre árboles raros, te invito a visitar el enlace correspondiente.
Sus hojas son de dos tipos: las más jóvenes tienen forma de aguja acicular, pero a medida que van madurando pasan a ser escamosas. Éstas son de color verde claro u oscuro dependiendo de la especie. Los frutos son conos globosos u ovales en cuyo interior se encuentran de 2 a 4 semillas, las cuales hay que estratificar en la nevera por 3 meses y sembrar en macetas con sustrato compuesto por turba negra y perlita a partes iguales. Aquí te explicamos cómo se estratifican. Si deseas conocer más sobre la estratificación de semillas, también puedes leer sobre plantas que necesitan pasar frío antes de germinar.
Es muy rústico, soportando heladas de hasta -15ºC y es importante conocer cuales son las plantas resistentes a las heladas si planeas cultivarlo en un clima frío.
Chamaecyparis obtusa
Si hablamos de sus cuidados, estamos ante una conífera a la que tenemos que proteger del sol directo. Necesita también que la humedad ambiental sea alta, y un suelo que tenga muy buen drenaje. Así, se recomienda mezclar la tierra del jardín con turba y arena a partes iguales, en primavera, aunque puede ser en otoño si vivimos en un clima suave. Para más información sobre la elección de árboles en el jardín, puedes consultar este artículo sobre cómo elegir árboles.
El riego tiene que ser ocasional, una vez por semana o dos como mucho en verano. Podemos aprovechar para abonarlo con un abono orgánico como guano durante la temporada de crecimiento (primavera y verano). Esto es especialmente importante si se trata de un árbol alto, que puede requerir más atención en su cuidado.
¿Conocías esta bella planta?