El Instituto de Desarrollo Urbano (IDU) ha puesto en marcha Columnas Verdes, un proyecto de jardinería urbana que integra vegetación en pilares de puentes y estructuras viales para sumar naturaleza al paisaje cotidiano de Bogotá. La propuesta busca equilibrar obra pública y medio ambiente, fomentando una imagen de ciudad más amable sin descuidar la funcionalidad.
El plan arrancó como piloto en las bases del puente curvo de la avenida 68 con calle 26, dentro del grupo 5 de la troncal de la 68, tras una directriz de la Alcaldía para conectar los proyectos de infraestructura con soluciones basadas en la naturaleza. Según el IDU, la idea es que estas intervenciones no se queden solo en lo estético, sino que aporten conectividad ecológica y atraigan polinizadores.
Qué son y cómo se cuidan las Columnas Verdes

Las columnas se recubren con una malla plástica de dos metros que sirve de soporte a plantas trepadoras como capuchina, manto de María y passiflora. En la base se instala un jardín de diseño concéntrico con especies no trepadoras —bencenuco, salvia y dietes— dispuestas en hileras circulares para crear un patrón visual reconocible y facilitar el manejo.
La selección de especies y su conducción está pensada para que alcancen altura sin interferir con los aisladores sísmicos de los puentes, un punto clave para el mantenimiento y la seguridad estructural. Además, algunas superficies cercanas incorporan grafitis con temática de naturaleza para reforzar el carácter del conjunto.
En condiciones normales, el proceso de colonización vegetal se estima en unos 10 meses desde la siembra: tiempo durante el cual las trepadoras irán cubriendo gradualmente la superficie de los fustes. La meta no es solo “verdear” el hormigón, sino convertir cada columna en un pequeño conector ecológico entre parches urbanos.
El plan de cuidados es mensual e incluye poda y orientación del follaje, manejo fitosanitario, control de malezas, ajuste de mallas y riego. Con esta pauta, el IDU busca garantizar la sostenibilidad del componente vegetal y mantener la lectura paisajística del diseño con el paso del tiempo.
El piloto ya se ve en siete columnas del puente curvo de la avenida 68 con calle 26. A partir de ahí, la intervención se extenderá a otros puntos estratégicos de la capital para consolidar una red de referencias verdes en corredores de alta circulación.
- Bases del puente de la Autopista Norte con calle 94.
- Intersecciones de la avenida Boyacá con calle 127 y avenida El Rincón.
- Puente de la avenida 68 con calle Tercera.
- Glorieta elevada de la troncal de la avenida Ciudad de Cali con avenida Las Américas (grupo 4).
La actuación se integra en una línea más amplia de renovación del paisaje que el IDU viene desplegando con soluciones basadas en la naturaleza: plantación de arbolado nativo, ampliación de zonas verdes, instalación de jardines y uso de Sistemas Urbanos de Drenaje Sostenible (SUDS). Entre enero de 2024 y junio de 2025, la entidad contabiliza más de 2.400 árboles plantados, 14.824 m² de jardinería, 16.475 m² de zonas verdes y 122 SUDS activos en distintos proyectos.
En paralelo, durante 2024 se gestionaron de forma responsable 461.866 toneladas de RCD (residuos de construcción y demolición), y para el periodo 2024-2027 el objetivo municipal es superar los 20.000 árboles y desarrollar más de 202.000 m² de nuevas áreas de jardinería, con producción de especies nativas en el vivero La Florida en convenio con el Jardín Botánico.
El Distrito también estudia escalar medidas afines en otras infraestructuras, como el Metro de Bogotá, cuyas estructuras alcanzan hasta 14 metros, así como fomentar jardines verticales en equipamientos y muros artísticos para reducir vandalismo y mejorar la percepción del entorno urbano.
En cuanto al avance de obra, la troncal de la avenida 68 registra un 71,43% de ejecución (octubre de 2025), a lo largo de 17,07 kilómetros distribuidos en nueve grupos. Ya están habilitados tramos clave y nuevos elementos como el puente de la calle Tercera, el costado occidental del puente sobre la calle 26 y el puente de la calle 100 con avenida Suba, lo que permite ir enlazando movilidad, espacio público y vegetación.
Con esta intervención, el IDU busca consolidar una identidad urbana más verde y coherente: columnas que suman biodiversidad, diseños reconocibles y mantenimiento regular para compatibilizar obra civil y naturaleza en puntos neurálgicos de la ciudad sin perder de vista la funcionalidad y el cuidado del espacio público.