Tener un jardín implica invertir en dinero, tanto para crearlo como para mantenerlo. Abonar, plantar, cosechar, fertilizar, podar, vigilar las plagas… Todo eso implica trabajo y dinero que tienes que gastar. Pero, ¿cómo ahorrar dinero en el jardín? ¿Es posible?
Si tienes un espacio en el exterior de tu casa y quieres convertirlo en un jardín pero que no suponga un desembolso económico anual elevado, a continuación te damos algunos trucos para ahorrar dinero en el jardín y tenerlo como el de un profesional. ¿Quieres saber cómo?
Por qué tu jardín puede salirte gratis siempre
Imagina que tienes un jardín. Eso implica que tienes un espacio fuera de tu casa en el que cultivar plantas, flores, árboles, etc. El mantenimiento es algo que no vas a poder evitar pero, ¿y si estuviera diseñado de una determinada forma para que no supusiera un despilfarro de dinero o hasta te hiciera ahorrar?
Pues, aunque no lo creas, tu jardín puede salirte gratis. Y es que basta con poner los gastos del jardín a un lado y lo que te ahorras por tenerlo en otro. Por ejemplo, ¿y si tienes árboles frutales? Eso quiere decir fruta gratis que no vas a comprar. Así que te estás ahorrando un dinero en el supermercado que es el que inviertes en los productos para mantener el jardín.
Ahorrar dinero en el jardín consiste en idearlo de tal forma que, aunque suponga un gasto por otro lado te dé los beneficios que necesitas para evitar otros gastos. Te explicamos cómo.
Responsabiliza de la jardinería a toda la familia
Tener un jardín es tener una responsabilidad. Las plantas necesitan agua, necesitan que las podes, que les eches abono, las cuides cuando están enfermas… Y eso requiere de tiempo y de esfuerzo. Así que puedes considerarlo una tarea de toda la familia.
Igual que cada uno tiene cosas que hacer en la casa (limpiar, fregar los platos, recoger la mesa…), también puedes aplicar ese método al jardín, de tal manera que todos contribuyan.
Además, para los niños es un buen ejercicio porque les estarás inculcando el que tienen que cuidar el medio ambiente y la naturaleza, y nada mejor que hacerlo con tu propio jardín.
Elige plantas que sean productivas para ti
Sabemos que los jardines que vemos en foto nos enamoran. Es algo que no podemos evitar y que nos hace que queramos replicarlo. Pero antes de asumir una compra compulsiva, debes tener en cuenta si realmente esa planta te beneficia en algo o no. ¿Es una planta que te va a servir para la cocina? ¿Quizá para cuidar la salud? ¿Solo es ornamental?
Con esto no estamos diciendo que no puedas tener un jardín bonito, pero esto no debe ser todo. Tienes que diseñar un jardín que sea funcional, que te repercuta en un ahorro, bien porque uses frutales, plantas comestibles, plantas beneficiosas para otras…
Haz tu propio abono
Muchas veces, uno de los gastos habituales de los jardines es el abonado, ya que necesitas compost, estiércol… para poder hacerlo. Y eso cuesta dinero. Pero lo que a lo mejor no sabes es que en casa podrías hacer tu propio abono.
Solo tienes que ver los muchos artículos que existen en los que te hablan de cómo hacer compost o abono para tus plantas. Y lo mejor de todo es que no va a suponer un gasto excesivo, al contrario, al final estarás reutilizando aquellas cosas que directamente tirarías y que, sin embargo, son ideales para darles los nutrientes que necesitan tus plantas.
Apuesta por frutales y plantas de frutos que compras a menudo
¿Eres de comer mucho tomate? Entonces, ¿por qué no tener tomateras en tu jardín? Ahorrarás a la hora de comprar. Lo mismo puede ocurrir con otra fruta y verdura.
En definitiva, te recomendamos que tengas un huerto, ya que es esta forma no comprarás tanto en las tiendas y, además, te beneficiarás de alimentos que no han sido procesados y que son mucho más ricos y nutritivos que los que puedes comprar en las tiendas.
Eso sí, controla la zona en que vives para saber qué frutales y plantas te van a soportar mejor el clima, temperatura, ubicación, etc. para que no hagas una compra que no fructifique.
Apuesta por la segunda mano
¿Por qué te decimos esto? Pues porque para mantener el jardín es necesario tener un material, desde cubos, palas, rastrillos, cortacésped, cortasetos, tijeras… Y todo eso puede salir caro si es nuevo. Pero no tanto si es de segunda mano.
Por supuesto, tienes que ver si realmente merece la pena, que no se vaya a romper al poco tiempo, y que tengas una mínima garantía para ello. Si cumple con todo, no pasa nada por tener herramientas de segunda mano. De hecho, tu bolsillo te lo va a agradecer.
Usa tus propias plantas para reproducirlas
Un error que se comete a menudo es pensar en que, para tener un jardín, hay que comprar todas las plantas y árboles, cuando en realidad no es así. También podrías plantarlos de semillas.
Estas son más baratas que las plantas o árboles jóvenes y al mismo tiempo, tus propios cultivos pueden ayudarte a reproducirse. Por ejemplo, si tienes frutales, podrías obtener semillas y plantarlas. Es verdad que van a tardar años en dar su fruto, pero a veces no hay que pensar en el tiempo sino en lo que te ahorras por hacerlo así.
En el caso de las plantas ocurre algo igual, así que solo es cuestión de tener una zona para hacer que crezcan fuertes y rápido y después plantarlas en tu jardín.
Reciclar productos para tu jardín
Es cierto que un jardín con productos reciclados puede no verse tan bonito y elegante como uno con todos los accesorios de marca y bien cuidados, pero estarás ahorrando mucho dinero y, además, cuidando el medio ambiente. Así que sacrificar la definición que tenemos de belleza por ser práctico y ayudar a no contaminar bien merece la pena.
Por ejemplo, podrías usar tenedores para mantener a raya ciertos animales que ataquen tus plantas; usar botellas de plástico como macetas, o botas, o recipientes similares.
Planteado así, ahorrar dinero en el jardín no solo es viable, sino que puede ser la solución que estabas buscando para dar el paso y construir tu jardín. Y es que a veces mirando más allá de lo que son los gastos puedes encontrar que hay muchos beneficios de invertir en algo que repercuta en otra tarea o actividad de tu día a día. ¿Tienes más ideas o trucos para ahorrar dinero en tu jardín?