Guía completa para cuidar jazmines durante el invierno

  • El jazmín necesita protección ante las heladas y reducción del riego en invierno.
  • La poda tras la floración favorece un crecimiento fuerte y más flores la siguiente temporada.
  • Prevenir plagas y enfermedades en ambientes húmedos es esencial para su salud.

jazmín en invierno

Con la llegada del invierno, el cuidado de los jazmines se vuelve fundamental para garantizar su salud y belleza en la próxima temporada. El jazmín, incluido el apreciado Jasminum nudiflorum o jazmín de invierno, entra en una fase de reposo vegetativo, lo que exige adaptar los cuidados habituales para afrontar el frío, la humedad y la menor exposición lumínica. Comprender las necesidades específicas de los jazmines durante esta época es la clave para conservarlos vigorosos y con una floración espectacular al regresar el calor.

Características del jazmín y su resistencia al frío

jazmín resistente al frío

El género Jasminum agrupa más de doscientas especies entre arbustos y plantas trepadoras, con diferencias notables en resistencia, forma de crecimiento y floración. El jazmín de invierno (Jasminum nudiflorum), originario de China, es especialmente valorado por su gran tolerancia a bajas temperaturas y su capacidad de florecer en pleno invierno, cuando la mayoría de los jazmines entran en letargo.

Este jazmín amarillo alcanza hasta tres metros de altura si cuenta con soportes adecuados. Sus brillantes flores de color amarillo intenso, aunque poco aromáticas, son muy decorativas y aparecen antes que en otros jazmines, haciendo de esta especie una opción excelente para jardines fríos. Al ser una planta de hoja caduca, sus hojas caen durante el invierno, permitiendo que la luz penetre hasta el centro de la planta.

Cuidados esenciales de los jazmines en invierno

cuidado de jazmines en invierno

  • Protección frente a heladas: Especialmente si el jazmín está plantado en el exterior, es crucial protegerlo de las heladas. Una cubierta plástica tipo invernadero ayuda a mantener la temperatura estable. En caso de ejemplares jóvenes, cubrir la base con ramas de abeto o paja evita daños en las raíces.
  • Ubicación: Se recomienda colocar el jazmín en un sitio soleado o con semisombra ligera, protegido del viento. En maceta, debe trasladarse a un espacio cerrado, pero luminoso, como una jardinería en maceta o invernadero.
  • Riego controlado: Durante el invierno, las necesidades hídricas disminuyen. El riego debe ser moderado, unos 7-9 días entre riegos, evitando encharcamientos y suspendiendo el riego en días de helada.
  • Suelo y drenaje: El jazmín requiere suelos ricos en nutrientes, con buen drenaje y ligeramente alcalinos. Un sustrato demasiado compacto aumenta el riesgo de podredumbre radicular en invierno.
cuidados del jazmín de invierno
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Poda del jazmín durante el invierno y principios de primavera

poda de jazmín en invierno

La poda es una tarea vital para mantener la salud y estética del jazmín. Debe realizarse en invierno o al terminar la floración, según la especie. Consiste en retirar ramas secas, enfermas o débiles y en aclarar el interior para permitir el paso de la luz. En el caso del jazmín de invierno, la poda intensa tras la floración suele favorecer una floración más abundante el año siguiente. Si el jazmín se utiliza como tapizante, conviene recortar periódicamente para controlar su extensión.

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Plagas y enfermedades comunes en invierno

Durante los meses fríos, los jazmines pueden verse afectados por algunas enfermedades fúngicas y plagas que encuentran condiciones favorables en ambientes húmedos y poco ventilados. Las manchas en las hojas producidas por hongos como Phyllosticta jasminorum o Colletotrichum gloesporium pueden tratarse con fungicidas de cobre. Otras enfermedades incluyen mildiu, tuberculosis (provocada por bacterias que aprovechan heridas), agallas en el cuello y podredumbre de raíz, que requiere mejorar el drenaje y reducir el riego.

Entre las plagas, destacan las orugas defoliadoras, cochinillas, gorgojos y el taladro del tronco. El control debe ser principalmente preventivo, eliminando restos vegetales y aplicando tratamientos fitosanitarios si aparecen síntomas.

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Cuidados adicionales según el tipo de jazmín

Cada especie de jazmín puede necesitar cuidados específicos. Los jazmines tropicales y de floración primaveral suelen ser más sensibles al frío y requieren protección extra. El jazmín de invierno, por su resistencia, solo precisa cuidados básicos. Es aconsejable asociar el jazmín a otras trepadoras para asegurar colorido todo el año, y siempre proporcionarle soportes para guiar sus tallos largos y flexibles.

El jazmín es una de las plantas más apreciadas en jardinería por su fragancia y por lo vistoso de sus flores. Adoptando los cuidados adecuados en invierno, esta planta no solo resistirá el frío, sino que volverá a ofrecer su mejor aspecto cuando regresen las temperaturas suaves, llenando de vida y color cualquier jardín o terraza.

Flor de jazmín blanca.
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