Con la llegada del otoño podremos darnos cuenta de que nuestras plantas de interior van ralentizando su crecimiento, o bien que por el contrario crecen más rápido ya que las temperaturas son más agradables, no tan calurosas. Y es que esta estación, dependiendo de dónde vivas y, especialmente, de lo cálida o fría que sea tu vivienda, puede o no convertirse en una segunda primavera para ellas.
Pero, lo que debe de quedarnos muy claro, es que tenemos que seguir prestando atención a nuestras macetas con el fin de que sigan estando muy bonitas. Así pues, veamos cómo cuidar plantas de interior en otoño.
¿Tu vivienda es fría o cálida?
Antes de comenzar, has de responder primero a esta pregunta pues dependiendo de ello vas a proporcionarles unos cuidados u otros. Por ejemplo, la casa donde vivo tiene las paredes exteriores muy anchas, de unos 40 centímetros. Esto hace que, aunque haya varias ventanas tanto en la planta baja como en el primer piso, en el interior haya al menos unos 2-3 grados de diferencia tanto en verano como en invierno.
A ello tengo que sumarle la humedad ambiental, la cual es muy alta durante todo el año, por lo que la sensación térmica hace que pasemos frío durante la temporada invernal, y calor en la veraniega. Literalmente, podemos necesitar llevar una chaqueta -fina- en casa durante el otoño, y tener que quitárnosla cuando salgamos fuera. Y nosotros no somos los únicos que notamos el frío o el calor.
Las plantas que tenemos dentro del hogar también sufren o agradecen (dependiendo de la estación del año) las consecuencias de vivir en estas condiciones. Así, mientras que en primavera y otoño crecen a buen ritmo, en verano y en invierno es cuando su crecimiento se detiene.
Para que comprendas mejor lo que quiero decirte, has de saber que la mayoría de plantas de interior son originarias de climas tropicales, por lo que su rango ideal de temperaturas oscila entre los 15ºC de mínima y los 30ºC de máxima. Cuando es más baja o más alta, es entonces cuando notaremos que no crecen tanto como antes. Asimismo, debes tener en cuenta que necesitan que la humedad ambiental sea alta, de ahí que si el ambiente es seco (y repito: solo si es seco; si por ejemplo yo lo hiciera enseguida se verían afectadas por hongos) se recomiende pulverizarlas con agua a diario.
En el caso de que tengas dudas, podrás resolverlas si escribes en el navegador »humedad ambiental de X», cambiando la X por el nombre de tu localidad. O incluso si por las mañanas sales pronto a la calle y todos los días ves que las ventanas y las hierbas están mojadas -y no es por las lluvias-, sabrás que la humedad es muy alta.
¿Cuáles son los cuidados de las plantas de interior en otoño?
Ahora que te he hablado de la importancia de conocer qué grado de humedad y temperaturas hay en el hogar para poder proporcionarles los mejores cuidados a tus plantas de interior en cualquier estación del año, vamos a centrarnos ahora en aquellas cosas que tenemos que hacerles durante el otoño. Como decía antes, esta estación puede ser algo así como una segunda primavera para ellas, si el termómetro marca un máximo de 25ºC durante el día y un mínimo de 15ºC por la noche; o bien puede ser un otoño propiamente dicho, con temperaturas de entre los 20 y los 10ºC o inferiores.
Los cuidados varían un poco, pero no te preocupes porque voy a explicarte cómo cuidarlas independientemente del caso:
Riego: frecuente pero cada vez menos
Las temperaturas son un poco más bajas que en verano, así que la tierra tarda más en perder su humedad, en secarse. Por ello, tenemos que empezar a espaciar los riegos, cada vez más a medida que se vaya acercando el invierno. Es importante seguir introduciendo el palito hasta el fondo de la maceta si se tienen dudas sobre cuándo regar, ya que esa es una forma excelente de saber cuándo es el mejor momento para hacerlo. Recuerda además vaciar el plato tras cada riego para que las raíces no se pudran.
Abonado: se puede hacer, pero solo si el invierno es suave
Muchas veces se recomienda abonar las plantas solo en primavera y en verano, y es por una razón muy simple: no interesa abonar en otoño si en invierno va a haber heladas, porque si lo hiciéramos esos brotes nuevos que haya producido la planta se morirán en cuanto bajen las temperaturas. Esto pasa también si la vivienda es fría. Por este motivo, si vives como yo en una zona con clima cálido, entonces abónalas también en otoño, pero si no, deja de hacerlo a finales del verano.
Podas: necesarias en ciertos casos
El otoño es un buen momento para podar las plantas de interior, pero únicamente hay que hacerles podas pequeñas, como por ejemplo, quitar las hojas secas, o los tallos que estén muertos. Las podas más severas se realizarán en primavera, pues es cuando podrán recuperarse sin demasiada dificultad.
Cambios de maceta urgentes
Los trasplantes se deben de realizar, siempre que sea posible, en primavera. Pero, durante el otoño también se pueden hacer si tenemos una planta de interior recién adquirida y vemos que se les salen las raíces por los agujeros de su recipiente, o si tenemos una que podría tener alguna infección o plaga en sus raíces. También se debe de hacer en aquellos casos en los que se haya regado demás, cambiando la tierra por otra nueva.
Limpieza de hojas y tallos
Aunque no es un cuidado que tengamos que hacerles solo en otoño, no quiero que te olvides de él en esta estación. Limpiar las plantas de interior es crucial para que puedan estar preciosas, y también para que puedan realizar sus funciones vitales (como respirar) sin impedimentos. Para ello, puedes usar un pincel pequeño, algodón o papel, pero en cualquier caso ha de estar seco.
Con todos estos consejos, seguro que tus plantas de interior estarán espléndidas durante el otoño.