¿Cómo hacer arcos para invernaderos?

  • Los arcos proporcionan estabilidad y eficiencia a los invernaderos.
  • Existen tres tipos principales: semicircular, asimétrico y ojival.
  • La instalación requiere precisión y materiales de calidad.

Invernadero visto desde dentro.

Es importante saber cómo hacer arcos para invernaderos. Porque son piezas fundamentales que dan forma y estructura a este tipo de construcciones. No solo ayudan a soportar la cubierta, sino que también permiten optimizar las condiciones en el interior, lo que influye directamente en el éxito de los cultivos. Pero, ¿qué tipo de arcos existen y cómo se instalan? Vamos a profundizar en este tema para despejar todas tus dudas.

El diseño de invernaderos con arcos no es únicamente una cuestión de estética. Cada modelo tiene ventajas específicas que pueden hacer la diferencia en climas ventosos, en el control de la temperatura o incluso en el aprovechamiento de la luz solar. Si estás pensando en construir tu propio invernadero, esta guía te proporcionará todo lo que necesitas saber para elegir e instalar los modelos correctos.

¿Qué función tienen los arcos en un invernadero?

Los arcos de un invernadero cumplen dos funciones principales: dar forma a la estructura y sujetar los materiales de la cubierta. Estos pueden ser plásticos especializados, mallas de sombreo o incluso mallas mosquiteras, dependiendo del tipo de protección o ventilación que necesite el cultivo. Los invernaderos que incorporan arcos suelen llamarse túneles o multitúneles, según su diseño y tamaño.

Un aspecto clave de los invernaderos con arcos es su cubierta curva, característica que los distingue de otros modelos. Esta forma no es solo estética: mejora la distribución de la luz solar, controla mejor la temperatura y ofrece resistencia frente al viento. Es por estas razones que los invernaderos túnel y multitúnel son especialmente populares en regiones con condiciones climáticas adversas.

Cómo hacer arcos para invernaderos: tipos

Plantas creciendo en un invernadero.

Existen distintos tipos de arcos que puedes considerar según las necesidades de tu proyecto. Entre ellos, podemos destacar tres formas principales: semicircular, asimétrico y ojival o gótico. A continuación, analizamos sus características.

Arco Semicircular

Este modelo proporciona una cubierta redondeada que, en estructuras multitúnel, se conecta para formar una superficie con altibajos. Entre sus ventajas se encuentra la capacidad para captar más radiación solar, lo que resulta fundamental para cultivos que necesitan recibir luz de manera constante. Además, esta forma facilita la evacuación de la condensación que se acumula en la cubierta y permite albergar un mayor volumen de aire, lo que mejora las condiciones internas del invernadero.

Arco Asimétrico

El diseño de este arco está pensado para optimizar la transmisión de la luz. Gracias a su forma irregular, mejora la orientación y recepción de los rayos solares, especialmente en los meses más fríos. Además, este tipo de estructura ofrece una resistencia notable frente a vientos fuertes y otras inclemencias climáticas.

Arco Ojival o Gótico

Este tipo combina las ventajas del arco semicircular con características adicionales. Su diseño permite una mejor transmisión de luz y ofrece un mayor volumen de aire en el interior del invernadero. Asimismo, destaca por su capacidad para evacuar la condensación de forma eficiente, convirtiéndolo en una opción ideal para quienes buscan optimizar al máximo su inversión en un invernadero de alta calidad.

Ventajas de los invernaderos con arcos

Estructura de invernadero.

Los invernaderos que utilizan arcos presentan una serie de beneficios que los hacen altamente recomendables para una gran variedad de cultivos:

  • Homogeneidad térmica: la forma curva ayuda a mantener una temperatura uniforme en el interior.
  • Sensación de amplitud: el diseño aerodinámico facilita el movimiento y las tareas diarias dentro del invernadero.
  • Resistencia al viento: los arcos están diseñados para resistir condiciones climáticas adversas, especialmente en zonas ventosas.

¿Cómo se instalan los arcos en un invernadero?

Cómo hacer arcos para invernaderos

La instalación de los arcos puede variar dependiendo del tipo de estructura, pero en general, existen dos métodos principales:

  1. Instalación directa en la cubierta: el arco se eleva hasta el techo y se fija al capitel mediante un sistema de bridas.
  2. Pre-montaje en el suelo: aquí se ensamblan los tirantes y refuerzos antes de llevar el arco al lugar definitivo, donde finalmente se sujeta con bridas al capitel.

Ambos métodos son efectivos, pero el pre-montaje en el suelo puede ser una opción más segura y sencilla para los principiantes. La clave está en asegurarse de que los arcos queden perfectamente fijados para garantizar la estabilidad de la estructura.

Además, es importante contar con materiales de calidad. Los arcos metálicos suelen ser los más utilizados debido a su resistencia. Sin embargo, también existen opciones en PVC para quienes buscan una alternativa más económica y ligera.

Con todas estas opciones y consejos, ya sabes cómo construir arcos para invernadero que te ayuden a optimizar tus cultivos.  Recuerda que los detalles marcan la diferencia entre un resultado básico y uno totalmente profesional. ¿Te animas?


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