Cómo hacer que las plantas crezcan más rápido

Sedum rubrotinctum

Aunque las plantas tienen su propio ritmo de crecimiento, lo cierto es que a veces no hacemos todo lo posible para que crezcan con la velocidad que nos gustaría, ya sea porque no tenemos mucha experiencia en el cultivo del Verde o porque, simplemente y como me ha pasado a mí en más de una ocasión, no tenemos suficiente espacio para todas las macetas que decoran el patio o la terraza.

Pero hay algunos trucos que nos servirán para conseguir nuestro objetivo. Así que si quieres saber cómo hacer que las plantas crezcan más rápido, síguelos y verás qué bonitas se ponen 🙂 .

Utiliza un sustrato con buen drenaje

Akadama

Tal y como te contamos en este artículo, el drenaje es muy importante para las plantas. Las raíces deben de estar aireadas para poder cumplir con su función, que es la de absorber el agua y los nutrientes disueltos en ella, además de anclar la propia planta al suelo o a la maceta. Cuando el sustrato que utilizamos no drena bien, el ritmo de crecimiento se ralentiza.

¿Qué hacer? Usar un sustrato adecuado para cada planta. Por ejemplo:

  • Acuáticas y de ribera: turba negra mezclada con perlita o arena de río a partes iguales.
  • Árboles y arbustos: turba negra o mantillo mezclado con un 30% de perlita. También se puede usar -y de hecho, es lo más recomendable akadama si es una especie que normalmente no crecería en nuestra zona, como los arces japoneses en el mediterráneo.
  • Bonsáis: una mezcla estándar con la que no vas a tener ningún problema es esta: 70% akadama + 30% kiryuzuna.
  • Carnívoras: por lo general, se dan bien en turba rubia mezclada con perlita a partes iguales.
  • Hortícolas: las plantas de huerto crecen de maravilla con 60% mantillo + 30% perlita + 10% abono orgánico, como estiércol o humus de lombriz.
  • Palmeras: sustrato de cultivo universal mezclado con un 30% de perlita; o bien 60% sustrato universal + 30% perlita + 10% fibra de coco.
  • Plantas de flor (vivaces, anuales, perennes): crecen bien en sustrato universal, siempre y cuando se le añada una primera capa de perlita o greda volcánica.
  • Suculentas (cactus y plantas crasas): sustratos porosos, como pómice, akadama, arena de río, etc., ya sea solos o mezclados.

Abona regularmente

Abono orgánico

Tan importante como elegir un buen sustrato es abonar durante toda la temporada de crecimiento -excepto a las carnívoras, ya que ellas se alimentan de los insectos que caen en sus trampas-. Así pues, durante la primavera y el verano es necesario aportarles una »comida» extra con el fin de que su crecimiento sea el óptimo.

Hoy en día contamos con abonos preparados para cualquier tipo de planta, por lo que tan sólo tenemos que adquirir el que más nos interese y seguir las indicaciones especificadas en el envase. Aunque por supuesto si queremos optar por abonos naturales, podemos hacerlo sin ningún problema, pero teniendo siempre en cuenta lo siguiente:

  • Los árboles, arbustos y bonsáis en macetas se aconseja abonar con abonos líquidos. El espacio con el que cuentan sus raíces es muy reducido, y esto puede suponerles un serio problema si se abonan con abonos en polvo, ya que sin quererlo podríamos asfixiar su sistema radicular.
  • Las palmeras se aconseja abonar con abonos orgánicos, alternando los líquidos con los que se presentan en polvo, ya que son plantas a las que la falta de micronutrientes les suele perjudicar con bastante más facilidad que a las de cualquier otro tipo.
  • Las suculentas (cactus y plantas crasas) se han de abonar con abonos minerales, como el Nitrofoska, echando una cucharada pequeña alrededor de la planta una vez cada 15 días.

Trasplanta cada vez que sea necesario

Fenestraria aurantiaca

A menudo, cuando compramos una planta la solemos dejar en esa misma maceta bastante tiempo, lo cual es un error. Cada vez que nos llevemos una a casa tenemos que cambiarle la maceta si es la época adecuada, es decir, si es primavera, pero debes saber que en climas suaves también se puede trasplantar a comienzos de otoño. Si no se hace, el crecimiento se estancará y podríamos terminar perdiéndola.

Pero además, cada vez que se le salgan raíces por los agujeros de drenaje tendremos que plantarla en una maceta algo mayor, puesto que no tendrá más espacio para crecer. A continuación te explicamos cómo hacerlo:

  1. Prepara una maceta que sea, al menos, 2-3cm más amplia que la que tiene.
  2. Rellénala con el sustrato que necesite, hasta un poco menos de la mitad.
  3. Extrae la planta e introdúcela en su nueva maceta. Si queda demasiado alta o baja, añade o quita sustrato.
  4. Termina de rellenar la maceta.
  5. Riega.
  6. Coloca la planta en semisombra hasta que le veas crecimiento (normalmente, al cabo de una semana ya empieza a crecer de nuevo). Pasado ese tiempo podrás pasarla a una ubicación más soleada si es una planta a la que le gusta el sol (cactus, crasas, la mayoría de plantas de flor, y muchos árboles y arbustos). Si tienes dudas, no dudes en ponerte en contacto con nosotros 🙂 .
  7. Empieza a abonarla un mes después del trasplante.

Riega siempre que sea necesario

Regadera metálica

Se podría pensar que cuanta más agua se le eche a una planta, más crecerá pues a fin de cuentas sin el agua no podría haber vida (o al menos, no tal y como la conocemos). Sin embargo, ése es un error que nos podría hacer perder nuestras queridas macetas, pero encontrar en punto medio es muy difícil incluso para los que llevan tiempo en el mundo de la jardinería.

Aún así, hay varios trucos que podemos realizar para no tener que preocuparnos… demasiado, y son los siguientes:

  • Introduce un palo delgado de madera (como los que usan los japoneses para comer) hasta el fondo de la maceta. Repite la acción en diferentes puntos, ya que puede ocurrir que el sustrato que está más cerca del tallo principal de la planta esté húmedo y el que está más cerca del borde del recipiente esté más seco. Si al extraerlo sale limpio en ambos casos, entonces podrás regar.
  • Pesa la maceta una vez regada y de nuevo al cabo de unos días. La planta recién regada pesa más que cuando está seca, por lo que puede servirte como guía.

Además, si tiene un plato debajo, es conveniente que le quites el agua sobrante a los 15-20 minutos de haber regado, ya que de lo contrario el permanente contacto de las raíces con el agua podría asfixiarlas.

Tradescantia pallida

Con estos consejos, tus plantas crecerán a buen ritmo, seguro 😉 .


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