Si bien podemos encontrar una gran variedad de insecticidas en los viveros, la realidad es que muchos de ellos son muy perjudiciales para el medio ambiente. Hay que utilizarlos bien, leyendo previamente la etiqueta del envase, para minimizar al máximo los posibles daños que puedan causar. Por este motivo, cada vez son más los que optan por tratar las plantas con productos naturales, ya que no suponen ningún peligro ni para los humanos ni, tampoco, para ellas, aquellos seres vivos que decoran nuestro hogar o jardín.
Uno de los pesticidas más eficaces que podemos hacer rápidamente en casa es el que te voy a explicar a continuación. Descubre cómo hacer un pesticida con ajo y cebolla y, así, contribuirás a cuidar del medio ambiente.
Los pesticidas sintéticos (químicos) pueden sernos muy útiles en determinadas situaciones, cuando las plagas están ya muy extendidas, pero no es nada recomendable su uso prolongado, y mucho menos si lo que estamos cultivando son plantas para consumo humano. Además de que son productos tóxicos, con el tiempo debilitan a las plantas, como nos puede ocurrir a nosotros si viviéramos permanentemente dentro de una vivienda: al salir al exterior, cualquier virus, bacteria, cambio drástico de temperaturas, etc. podría hacernos enfermar pues nuestro sistema inmunológico, simplemente, no habría tenido oportunidad alguna de producir los anticuerpos necesarios para hacerles frente.
Por todos estos motivos, los remedios caseros están ganando cada vez más popularidad. Y si hay alguno que sea especialmente interesante es el que se prepara con ajo y cebolla. Estos dos ingredientes, como sabemos, desprenden un olor muy intenso, el cual repele a una gran variedad de plagas, como los pulgones, la mosca blanca y las hormigas. ¿Cómo se prepara? Muy fácil.
Lo primero que hay que hacer es preparar los ingredientes, que son:
- 1/4 de cebolla
- 1/2 cabeza de ajo
- 1 cucharada de ralladura de jabón blanco
- 1 litro de agua
Ahora que lo tenemos todo, debemos de proceder a picar el ajo y la cebolla en trozos muy finos. Una vez hecho esto, añadiremos agua y jabón rallado y lo mezclaremos todo bien. Para terminar, sólo quedará dejar reposar una noche y rellenar un pulverizador con esta mezcla. De este modo, será mucho más sencillo tratar las plantas.
Lo usaremos, como mínimo, una vez por semana. Pero si vemos que la plaga se está extendiendo o que la planta se está debilitando, podremos repetir el tratamiento más seguido.
¿Qué te ha parecido este pesticida casero? ¿Lo has hecho alguna vez?
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