¿Cómo limpiar las hojas de las plantas?

Las hojas de las plantas deben de permanecer limpias todo el tiempo que sea posible, ya que de lo contrario tendrían muchas dificultades para realizar sus funciones vitales, tales como respirar o hacer la fotosíntesis. Y si bien hemos hablado en esta web de lo importante que es que de vez en cuando les quitemos el polvo a las plantas que tenemos en casa, en esta ocasión vamos a hablarte también de las que tenemos fuera, ya sea en el balcón, en la terraza, en el patio o en el jardín.

Y es que se comenta muy poco los problemas que les puede causar, por ejemplo, una lluvia de barro. Si esa tierra que se ha quedado adherida a la superficie del limbo de la hoja no se quita pronto, esta va a comenzar a secarse. Pero claro, ahora que sabes esto, seguramente te preguntes cómo limpiar las hojas de las plantas, así que vamos a explicártelo a continuación.

¿Por qué hay que limpiar las hojas de las plantas de interior y de exterior?

Para entender la importancia que tiene la limpieza de las hojas, quiero que veas la imagen de arriba. Se trata de una hoja vista a través del microscopio. ¿De qué color es? Efectivamente, verde. Pero, ¿sabes por qué es verde? Si no lo tienes claro, no te preocupes, ahora mismo te lo digo: el verde es el color de la clorofila, que es un pigmento que, además, resulta esencial para que pueda realizar la fotosíntesis, ya que es ella la que se encarga de absorber la energía del sol para transformarla luego en energía.

Ahora, profundicemos un poquito más.

En esta otra imagen se pueden ver los estomas, que son esas estructuras que se abren o se cierran cuando es necesario. Si me permites la comparación, serían algo así como nuestra nariz: cuando inspiramos, las fosas nasales se abren al máximo, pero cuando suspiramos por la susodicha, las fosas nasales se cierran un poco. ¿Qué ocurre cuando estamos tenemos la nariz congestionada? Exacto, que tenemos muchos problemas para respirar por ella.

Pues bien, lo mismo (salvando las diferencias, claro está) ocurre lo mismo con los estomas. Cuando las hojas quedan cubiertas de polvo, barro, tierra,… o cualquier otra cosa, no solo no pueden realizar la fotosíntesis, sino que además tendrán problemas para respirar puesto que los estomas permanecen cerrados. Y es que, sí, las plantas respiran. Tienen que hacerlo si quieren vivir. Y lo hacen como nosotros: absorbiendo oxígeno y expulsando dióxido de carbono.

Y, antes de que lo preguntes: sí, lo hacen todo el tiempo, pero no, no te van a ‘robar’ el aire si las tienes contigo en el dormitorio, puesto que la cantidad de oxígeno que tú necesitas, es mucho mayor que la que necesita una o varias planta/s. Otra cosa sería que quisieras convertir tu vivienda en una jungla; entonces sí que te recomendaría no poner muchas en el cuarto.

Una vez que te he explicado esto, ahora toca averiguar…:

¿Cómo se limpian las hojas de las plantas?

En realidad, limpiar las hojas es una tarea bastante sencilla, que además puede resultarnos muy beneficiosa ya que puede ayudarnos a cultivar la paciencia, y a desconectar la mente de la rutina del día a día. Puede ser por lo tanto un ejercicio de meditación muy bonito, puesto que nos obliga a permanecer en el ‘aquí y ahora’.

Pero por supuesto si lo hacemos, es por las plantas, para que ellas no tengan dificultades para realizar sus funciones. Y por este motivo, te diré que un pequeño pincel es realmente útil para quitar el polvo/tierra que está seco/a. Este se puede usar -y de hecho, es muy recomendable- para limpiar las hojas pequeñas, así como las plantas suculentas (sean cactus o crasas).

En caso de que tu planta tenga las hojas grandes, entonces te será mucho más útil o bien un pincel más grande, o bien un trapo seco.

¿Qué hacemos si la tierra o el polvo están húmedos? En estos casos, tendremos que optar por limpiarlas de otra forma, por ejemplo con un trapo húmedo (de agua). Si ha llovido barro y tienes manguera, puedes limpiarlas así, excepto si se trata de plantas muy pequeñas que están en macetas, puesto que si las limpias con la manguera, lo más probable es que terminen o bien lejos de donde tienen que estar, o bien con menos tierra.

Yo casi cada año a finales de verano tengo que darles ‘manguerazo’ a las plantas, puesto que suele llover tierra. Como hay muchas (muchísimas, en realidad), me da tanta pereza limpiarlas una por una, que cojo la manguera y las limpio de esa forma. A las palmeras que son de cierto tamaño (es decir, que miden más de 1 metro de altura), aprovecho para echarles agua dentro del tronco, es decir, que dirijo el agua a la guía de crecimiento, para así ahogar las larvas de picudo o paysandisia que pudieran tener; y a los cactus y crasas que tengo en maceta, los limpio también con manguera pero me mantengo lejos puesto que el agua sale con mucha potencia.

Una vez que estén limpias, puedes aprovechar para aplicarles abrillantador de hojas. Pero esto solo lo recomiendo si tu planta está dentro de la vivienda. Estos productos pueden ser tóxicos si se ingieren (esto lo especifica en el envase de los mismos), así que no es nada aconsejable su uso en el exterior puesto que perjudicaría a la fauna autóctona. Incluso en casa, si tienes hijos pequeños y/o animales domésticos, tampoco es buena idea usarlos por este motivo.

Esperamos que te haya sido de gran utilidad todo lo que te hemos comentado aquí.