Nepenthes khasiana
Con la llegada de la estación más fría del año nuestras plantas carnívoras detienen su crecimiento. Una vez que la temperatura baja de los 15 grados centígrados empiezan a ahorrar energía para poder sobrevivir y llegar bien a la próxima primavera.
Durante estos meses, mantenerlas puede ser un tanto complicado, especialmente si no habíamos tenido antes una. Por ello, te vamos a decir cómo cuidar las plantas carnívoras en invierno.
Sarracenia purpurea
La mayoría de las plantas carnívoras son de origen tropical o subtropical, esto significa que no resisten el frío ni mucho menos las heladas. Tan sólo las del género Sarracenia o las Dionaea pueden soportar temperaturas un poco bajas (hasta los -3ºC) si son heladas puntuales y de muy corta duración. Por este motivo, es muy probable que tengamos que cambiarlas de ubicación antes de que llegue el invierno.
Así pues, si vivimos en una zona donde se producen heladas intensas tendremos que protegerlas de las inclemencias del tiempo en un invernadero casero o dentro del hogar. Colocadas en un rincón donde no les lleguen las corrientes de aire (ni frías ni cálidas) y donde haya una temperatura de unos 15ºC (10ºC si se trata de Sarracenias, Heliamphoras y Dionaeas), podrán hibernar sin problema. En cambio, si vivimos en una zona que tiene un clima suave, podremos seguir teniéndolas en el exterior.
Drosera rotundifolia
Pero no sólo hay que pensar en la ubicación, sino también en el riego. Al no crecer, ya no necesitan tanta agua, de modo que hay que espaciar los riegos. La nueva frecuencia variará dependiendo de dónde tengamos las plantas y de las previsiones meteorológicas (en el caso de que las dejemos en el exterior). Por lo general, se tiene que dejar el sustrato siempre un poco húmedo, no encharcado.
Para evitar problemas, hay que quitarles el plato de debajo pues si se producen heladas el agua que pudiese haber dentro de él se podría congelar y, al hacerlo, perjudicaría a las raíces.
Más información: Hibernación de las plantas carnívoras