Las hierbas aromáticas, además de quedan muy bien en los jardines, se pueden utilizar como plantas decorativas en el hogar teniéndolas en la cocina, lugar donde se aprovecharán sus cualidades para preparar deliciosos platos. Pero claro, para poder hacer eso es muy importante secarlas bien.
Así que si no sabes cómo secar hierbas aromáticas, o tienes dudas, esperamos que tras leer el artículo se te hayan resuelto todas.
¿Cómo secar hierbas aromáticas?
Para uso culinario
Si lo que quieres es secarlas para utilizarlas en la cocina, corta aquellas ramitas que te gusten, límpialas bien con agua y luego agítalas suavemente para retirar toda el agua posible. Ahora, colócalas sobre un papel de cocina plano y déjalas secar.
Sécalas en el exterior
No se utiliza mucho este método, pero si necesitas hierbas aromáticas para hacer algún trabajo de artesanía te puede servir. Tan sólo tienes que cortarlas cuando estén secas, amarrarlas usando una liga de caucho, colgarlas boca a abajo en algún lugar expuesto al sol y protegerlas con una bolsa de papel.
Seca las hierbas aromáticas en el horno
Tanto para su uso culinario o medicinal, secarlas en el horno es un método muy aconsejable. Para ello, hay que poner el horno a la temperatura más baja posible y dejar la puerta abierta. A continuación, coloca las hierbas en una bandeja para hornear y colócala en el nivel más bajo. Ve volteándolas con frecuencia para que se sequen correctamente y extráelas en cuanto las notes un poco crujientes.
¿Cuáles son las hierbas aromáticas que se pueden secar?
Todas ellas pueden secarse, pero algunas son más difíciles que otras debido a las características de sus hojas. Por ejemplo, las más sencillas son las que tienen las hojas pesadas, como las del laurel, romero o tomillo; en cambio, las de la albahaca, perejil, menta o estragón pueden verse afectadas por hongos muy rápidamente.
Por ello, lo más aconsejable es experimentar y ver qué tal se secan.
Si te han quedado dudas, no dudes en preguntar.