Cómo crear un jardín de plantas aromáticas

¿Te gustaría tener un jardín donde, nada más llegar, pudieras percibir un aroma muy, muy agradable que te haga olvidarte de tus preocupaciones para que puedas, así, disfrutar de tus queridas plantas? Esto, aunque puede parecer un sueño difícil de hacer realidad, lo cierto es que es mucho más fácil de conseguir de lo que piensas. ¿Por qué? Porque tenemos a nuestro alcance una gran variedad de plantas aromáticas a un precio muy interesante: a no más de 4 euros las podemos encontrar en los viveros.

Así pues, descubre cómo crear un jardín de plantas aromáticas, y presume de espacio verde.

1.- Elige el mejor lugar donde tener tu jardín de plantas aromáticas

Estas son plantas muy resistentes, pero necesitan estar a pleno sol para que puedan crecer bien -excepto el perejil y la salvia, que prefieren estar en semisombra-, de lo contrario no tardarían en aparecer los problemas. Por este motivo, es importante que se cree el jardín en un lugar que esté muy expuesto al astro rey, para que de este modo todo el ‘verde’ pueda desarrollarse de la mejor manera posible.

Otro punto importante es el suelo, el terreno. Éste ha de tener buen drenaje, y ser ligeramente alcalino. Así, se evitará el temido encharcamiento y la posterior pudrición de las raíces.

2.- Elige las plantas

Hay muchas plantas que desprenden un muy agradable aroma que puedes poner en tu jardín. Algunos ejemplos son:

• Lavandula sp (todas las especies)
• Salvia sp (todas las especies)
• Ruta graveolens (ruda)
• Capparis spinosa (alcaparra)
• Artemisa annum (artemisa)
• Calendula officinalis (caléndula)
• Petroselinum crispum (perejil)
• Malva sp (todas las especies)
• Rosales
• Plantas bulbosas como los Amaryllis, Iris, Galtonia, o Hyachinthus (Jacinto)

3.- Plantando las plantas

Una vez que se han elegido las plantas aromáticas que se van a poner, ahora es momento de pasar a la tarea más gratificante: su plantación. Para ello, debes tener en cuenta estas consideraciones:

• Las plantas que sean más grandes o más altas deben de estar colocadas en la parte de atrás. Así, no les quitarán luz a las que no crezcan tanto.
• Es interesante combinar plantas con hojas de distinto color. Por ejemplo, podrías hacer un parterre con lavandas (hoja de color verde grisáceo), perejil (hoja verde vivo), romero (hoja verde oscuro), y albahaca de hoja morada.
• Coloca algunos árboles de flores aromáticas. Si quieres además tener un poco de sombra en algún rincón, no está de más poner algunos, como cerezos ornamentales, nísperos, aligustre, o cítricos (naranjo, limonero, pomelo…).

¡Y a disfrutar! 🙂