Después de haber estado mimando nuestros árboles frutales durante todo el año, nos encontramos ansiosos a la hora de probar sus deliciosas frutas y es toda una decepción ver que las frutas no han madurado bien, que los pájaros las han picoteado, los insectos pequeños como las avispas, se tomaron la libertad de comérselos antes que nosotros, etc.
Pero, ¿qué podemos hacer para conseguir una buena cosecha de frutas sanas? Está muy claro, el envasado de la fruta.
¿Cómo funciona el embolsado de las frutas?
Esta es una técnica muy antigua, de finales de la década de 1880 y aunque a veces a esta técnica se le culpa por su falta de estética, muchos jardineros lo llevan realizando año tras año. De hecho, a los fruticultores les interesa más la cosecha que la decoración.
El embolsado y sus ventajas
Embolsar es un simple gesto que consiste en envolver la fruta que todavía está en el árbol dentro de una bolsa, siendo una técnica que tiene varias ventajas.
Los frutos están protegidos de las inclemencias del tiempo, las fuertes lluvias y sobre todo del granizo, que es la principal causa de perdida de la fruta.
También están protegidos contra insectos que pican, como avispas o parásitos y sobre todo contra la polilla.
Los pájaros no pueden chupar el jugo de la fruta.
Las enfermedades, especialmente la sarna, se propagan con menos facilidad.
Las frutas embolsadas son generalmente más grandes que otras y su piel es más fina.
La fruta reacciona un poco como nosotros y es que al ser destetados de la luz durante el proceso de embolsado, absorben el más mínimo rayo de luz solar.
Su piel brilla así más fácil, siendo mucho más colorida.
¿En qué árboles frutales se pueden realizar el embolsado?
Esta técnica está reservada para los árboles que dan frutas grandes como melocotones, peras y manzanas, incluso se pueden embolsar racimos de uvas que no sean muy pequeños.
Un ejemplo de esto lo tenemos muy cerca, ya que mucha gente conocerá o habrá oído hablar de los melocotones de Calanda, pero lo que muchos de ellos no saben, es que estos melocotones son embolsados durante todo el verano.
¿Qué bolsas se pueden utilizar?
Tradicionalmente, el embolsado se realiza con bolsas de papel Kraft y de las pequeñas.
Hace unos años, muchos de los primeros fruticultores se inclinaron ecológicamente a abandonar las bolsas de plástico en favor de las bolsas de papel, siendo muy fácil realizar este tipo de técnica.
Como consejo te diremos que realices unos pequeños agujeros en el fondo de la bolsa para así permitir el drenaje del agua de lluvia.
En los centros de jardinería también hay disponibles «bolsas de fruta» de papel microperforado, que son prácticos y listos para usar y que permiten que el aire y el agua circulen bien.
¿Cuándo embolsar la fruta?
En el caso de las frutas grandes, el embolsado se realiza generalmente a lo largo del mes de junio, siendo necesario esperar hasta que se haga el clareo de la fruta, ya sea natural o no.
Las uvas deben envolverse cuando estas alcancen el tamaño de un pequeño guisante.
¿Cómo embolsar las frutas?
La primera gran precaución a tomar, es embolsar cuando no esté lloviendo. Tampoco debe hacerse demasiado temprano por la mañana, ya que la fruta debe estar muy seca y por lo tanto no debe estar cubierta de rocío, así que evita dañar mientras te sea posible, la fruta.
Coloca la bolsa de papel sobre la fruta, asegurándola con la banda elástica o con grapas, siendo esta segunda opción la más rápida y económica.
Recuerda que a los meses y cuando tengas que retirar las bolsas de papel, es necesario actuar con delicadeza, porque los frutos son extremadamente frágiles, así que simplemente debes rasgar las bolsas por un lado, pero asegurándote de que la banda elástica no dañe la fruta.
Las bolsas se retiran unas dos semanas antes de la cosecha. Es durante este período que los frutos captarán la luz y los rayos del sol para terminar de madurar.
Valiosa información, muchas gracias por compartirla!
Muchas gracias, Yazid.