Las plantas son seres vivos, y cada una de ellas es única. No es nada raro que, de una misma remesa de semillas las cuales tienen mismos progenitores, haya alguna que sea un poco más resistente al frío que otra, o que no se termine de adaptar al clima o a las condiciones de cultivo tan bien como sus hermanas. Por ello, cuando adquirimos plantas tenemos que tener muy en cuenta esto, que aunque hayamos leído, por ejemplo, que soporta las heladas, puede que nuestro ejemplar necesite protección.
Y es por eso por lo que quiero explicarte cuándo proteger las plantas de exterior del frío. También te hablaré de cuándo debes meter en casa aquellas que, si bien son consideradas plantas de interior, se tienen fuera durante unos cuantos meses. Toma nota.
La importancia de conocer las necesidades de tu planta
No todo el mundo soporta igual de bien el frío, y las plantas no son una excepción. Su origen, su genética, las atenciones que haya recibido hasta la fecha, el clima en el que ha crecido… todo esto influye muchísimo en su resistencia, no solo a las bajas temperaturas, sino también al viento, al sol directo, a la sombra, al hielo, a la brisa marina, y en definitiva, a cualquier otra condición climática que pueda tener el lugar en el que esté.
Y esto aplica, como digo, tanto a las plantas que están en el exterior, como a aquellas que se tienen en interior. Por ello, cuando vamos a adquirir una planta, tenemos que investigar un poco sobre los cuidados que requiere. Me puedes llamar exagerada, pero casi te diría que hay que hacer lo mismo que hacemos cuando adoptamos a un animal de compañía; es decir, cuando adoptamos a un gato por ejemplo, vamos a comprarle todo lo que necesita: comida adecuada para su edad, bebedero y comedero, juguetes, una cama, el arenero, antiparasitarios, etcétera.
Pues con la planta hay que hacer algo parecido: tenemos que saber si puede estar o no fuera de casa, el abonado (o sea, la comida) que necesita, los insecticidas o en su defecto los remedios caseros contra plagas que puede que tengamos que aplicarle en algún momento de su vida, cuándo regarla y cuánta agua requiere, etcétera. Como decía al principio del artículo, tu planta es un ser vivo, y si está en maceta, es uno que dependerá mucho de ti.
Así que, como hay infinidad de plantas en todo el mundo y sería, por lo tanto, imposible hablar de cada una de ellas en un solo artículo, voy a dividir este texto en dos encabezados. Empezamos por:
¿Cuándo hay que proteger las plantas de exterior del frío?
Las plantas que se cultivan en el exterior en los viveros son, por lo general, resistentes al frío y no requieren de protección. Pero cuidado: puede que la planta que tú quieres comprar lleve poco tiempo allí. Para evitar sorpresas, no dudes en preguntar al responsable del mantenimiento de las plantas; o mejor aún, descárgate la aplicación PlantNet (está disponible tanto para Android como para iOS) para que puedas identificarla fácilmente. Una vez identificada, podrás mirar en nuestra web los cuidados que necesita.
Si decides comprarla porque, ahora sí, sabes que puede estar sin problemas en la zona donde quieres tenerla, una vez llegues a casa con tu nuevo ejemplar tendrás que decidir dónde vas a tenerla y si vas a protegerla o no. Y es que, aunque teóricamente pueda resistir las heladas, eso no quita que no pueda necesitar algo de protección especialmente si es joven, o si es el primer invierno que pasa contigo. Y esto te lo digo porque yo misma a veces he creído innecesario proteger una planta en invierno porque, en teoría, tenía que resistir sin ningún problema las temperaturas invernales de mi zona, y eso que no son muy bajas (puede haber heladas ocasionales de hasta los -1,5ºC, pero nada más).
Así pues, teniendo todo esto en cuenta, te recomiendo protegerla en caso de que:
- Sea un ejemplar joven y/o de semillero. A esa edad, toda planta es muy tierna y vulnerable, hasta las secuoyas o los tejos.
- Sea el primer año que pasa en el exterior. Si durante X tiempo las has tenido en casa y ahora has decidido que la cultivarás fuera, no está demás protegerla un poco. Por ejemplo: has tenido una kentia durante cinco años en interior, pero a partir de ahora vas a tenerla en el exterior ya que en tu zona la temperatura más baja es de -3ºC. En este caso, lo más probable es que, si no se protegiera, sufriera mucho durante este primer año.
- Sea una planta que, sí, puede adaptarse al clima de tu zona, pero se encuentre un poco al límite. Por ejemplo, si tienes una palmera que resiste hasta los -2ºC y en tu zona la temperatura más baja es de -2ºC, tendrás que protegerla hasta que crezca.
- Sea una planta que no resiste el frío. Esto es obvio, lo sé, pero es importante que, si tienes plantas delicadas, las protejas para que no sufran.
¿Cuándo es el momento de protegerlas? Cuando la temperatura empiece a bajar de los 5-10ºC, excepto si son plantas delicadas, en cuyo caso se protegerán cuando baje de los 15ºC.
¿Cuándo hay que proteger las plantas de interior que se tienen fuera?
A mí me encanta tener plantas de interior en el patio. De hecho, me gusta mucho, mucho más tenerlas allí que en casa. Por este motivo, después de un año cultivándolas en interior, me las llevé al patio. Pero antes de eso, les hice una estructura que usaré como invernadero durante el invierno. Aquí tienes las fotos (son de marzo del 2024):
Durante los meses cálidos se tiene así, tal cual lo ves en las fotos, pero durante el invierno se cubrirá con tela antiheladas primero (esta será la que mantenga el interior cálido), y luego por encima se le pondrá el plástico (que será el que las proteja del viento y del granizo que pueda caer).
Así, se mantendrán las mismas temperaturas que hay en la habitación donde las tenía antes, con la enorme diferencia de que, ahora, recibirán aún más luz si cabe.
Y ahora la pregunta del millón: ¿cuándo hay que meter las plantas de interior en el invernadero o en casa de nuevo? Pues dado que son originarias de climas tropicales o subtropicales, lo haremos cuando la temperatura baje de los 15-18ºC. De este modo, las mantendremos a salvo del frío.
Espero que este artículo te haya sido de utilidad. Un abrazo.