Cultivar un árbol de ciruelas en el jardín trasero de su casa puede ser una experiencia gratificante y agradable. Con la preparación y los cuidados adecuados, podrás disfrutar de un hermoso árbol en flor con frutos deliciosos.
Para comenzar, vamos a describir algunas características del ciruelo. Es un árbol caducifolio, que pierde sus hojas en otoño, presenta flores llamativas blancas o rosadas que crea un espectáculo visual hermoso y atrae polinizadores.
Produce ciruelas que son unos frutos deliciosos repletos de vitaminas. Una fruta jugosa y dulce que varía en color desde el amarillo hasta el rojo oscuro o morado, dependiendo de la variedad.
Es un árbol muy preciado por su valor ornamental especialmente durante la floración. Algunos otros nombres comunes del ciruelo: ciruelero, pruno, prunero.
Su nombre científico es Prunus domestica. Es un árbol que tiene origen en la región del Cáucaso y Asia Menor. El nombre «ciruela» proviene del latín «cereola», que significa color de cera, en referencia al color de algunas de las variedades.
A continuación, investigaremos y brindaremos una guía para saber cómo plantar un árbol de ciruelas.
Ubicación para el árbol de ciruelas
El primer paso para cultivar un ciruelo es seleccionar el lugar adecuado en tu jardín. Deben plantarse en una zona que reciba la luz del sol directa durante al menos seis horas al día.
También es importante evitar lugares expuestos a heladas primaverales porque pueden dañar las flores. Si vives en un clima cálido, selecciona un lugar donde pueda estar protegido del sol de la tarde en verano.
Preparar el suelo
Tienes que examinar el suelo donde vas a plantarlo debes estar bien drenado y con un pH entre 6,0 y 7,0. Si el pH del suelo es demasiado bajo o demasiado alto, el árbol puede ser menos productivo.
Para acondicionar el suelo puedes agregar una buena materia orgánica como estiércol. Tienes que dejar reposar la tierra durante seis semanas.
Plantar el árbol de ciruelas
Una vez que el suelo esté preparado, estará listo para plantar el ciruelo. Comienza cavando un hoyo que sea el doble de ancho y justo la mitad de profundo que el cepellón de la raíz del árbol.
Coloca el árbol en el agujero y cúbrelo con tierra. Trata de presionar firmemente la tierra alrededor del árbol para eliminar cualquier bolsa de aire. Por último, riega generosamente el árbol. La tierra tiene que llegar 5 a 10 cm por encima de las raíces.
Cuidados del árbol
Riego y fertilizante
Ahora que tienes el árbol plantado es importante añadir una capa de mantillo alrededor de la base del árbol. Esto ayudará a retener la humedad y a evitar que crezcan malas hierbas alrededor del árbol.
Asegúrate de regar el ciruelo abundantemente y a fondo una vez a la semana. Este árbol necesita suficiente riego para que pueda crecer más rápido y saludable.
A medida que el árbol va creciendo puede reducir la frecuencia de riego, pero siempre tienes que regar profundamente y centrarte en la zona de las raíces para fomentar el desarrollo que crezcan fuertes y profundas, de esa manera va a poder resistir bien en periodos de sequía.
En cuanto a la fertilización, va a necesitar un fertilizante multiuso de liberación lenta a principios de primavera. Debes esperar a que el árbol comience a dar frutos para hacerlo. Un exceso de fertilizante puede provocar un gran crecimiento del follaje minimizando la producción de frutos.
Poda
La poda también es una parte importante del cuidado del ciruelo. Debes podar el árbol a principios de primavera para eliminar la madera dañada o muerta, lo que ayudará a promover un nuevo crecimiento y a mejorar la salud y productividad del árbol.
Puedes acortar las ramas que crezcan demasiado o comprar variedades enanas para reducir este trabajo.
Plagas y enfermedades comunes del árbol de ciruelas
El control de las plagas es fundamental, y en los árboles de hoja caduca en el período de latencia, es cuando las plagas van a atacar.
Lo más importante para el cuidado del ciruelo son las aves, que se comen las ciruelas justo cuando están maduras. Tienes que protegerlo con una red o proteger las frutas individualmente.
Una enfermedad común a la que enfrentan los ciruelos es la hoja plateada, ataca los ciruelos cuando se podan en invierno. Puede dejar un brillo plateado en las hojas y dañar gravemente el árbol.
Para prevenirlo, es mejor podar los ciruelos en verano para que la enfermedad se reduzca significativamente. Otras plagas que pueden atacarlos son las polillas, pulgones, escarabajos y otros insectos.
Para evitar las plagas, tienes que intervenir a tiempo, estar atento a las señales y actuar rápidamente para evitar la expansión hacia todo el árbol.
Un buen riego y una fertilización pueden fortalecer las defensas naturales del árbol reduciendo la vulnerabilidad a las plagas.
Cosechar los frutos
Saber cuándo cosechar las ciruelas es lo más importante para garantizar la perfecta maduración, y que el fruto tenga un sabor único dulce y ligeramente ácido. De hacerlo demasiado pronto o demasiado tarde puede resultar una pérdida de sabor.
Las ciruelas generalmente están listas para cosechar desde finales del verano hasta otoño, dependiendo de tu ubicación geográfica y la variedad que hayas elegido.
Un buen consejo es examinar la piel de la fruta, si está madura debe sentirse suave al apretarla ligeramente y debe desprenderse de la rama con un rápido giro.
El color de la piel es otro indicador de que está madura, lo que también depende de la variedad. También la prueba del sabor. Recuerda que las ciruelas no endulzan mucho después de la cosecha, si el sabor es bueno, es momento de cosechar.
Cómo cosechar las ciruelas sin dañar el árbol
Requiere cuidado ya que las frutas son muy delicadas y una cosecha brusca puede magullarlas y dejar marcas en el árbol. Recuerda que es importante, porque si dañas las ramas puedes causarles estrés y producir riesgos de plagas y enfermedades.
Cuando hayas identificado las ciruelas maduras sostiene cada fruto en tu mano y gírala suavemente, la ciruela se va a desprender fácilmente de la rama, lo que indica que está pronta para la cosecha. Puedes utilizar un recipiente para evitar que se caiga en el suelo y se dañen.
Para almacenarlas puedes guardarlas en el refrigerador que es la mejor opción para conservarlas. Tienen que estar en un lugar fresco con una humedad relativa del 90 al 95%, y una temperatura entre – 0,5 ° C y 0°C, en esas condiciones las puedes conservar de 2 a 4 semanas.
Es una fruta muy versátil que ya puedes utilizarlas para preparar mermeladas, pasteles, helados, las posibilidades son ilimitadas.
Cultivar un árbol de ciruelas es una forma estupenda de añadir belleza y frutos deliciosos a tu jardín. Con una preparación y unos cuidados adecuados, incluso los principiantes pueden cultivar un ciruelo hermoso y productivo.
¿A qué esperas? Empieza hoy mismo a cultivar tu propio ciruelo. Te encantará tener ciruelas repletas de nutrientes y de exquisito sabor para disfrutar cuando quieras y en tu propio jardín.