Cultivo aeropónico: qué es, características y cómo hacerlo en casa

¿Has oído hablar del cultivo aeropónico? ¿Sabes de lo que trata? A continuación te queremos presentar una guía para que conozcas todo lo que debes saber sobre este sistema de cultivo y sobre todo por si quieres montarlo en casa.

Te puede servir, no para todas las plantas, pero sí para una gran cantidad de ellas. Sin embargo, has de tener en cuenta las características que lo definen y lo que necesitarás para construir uno en casa. ¿Vamos a ello?

Qué es el cultivo aeropónico

Lo primero que queremos dejarte claro es que el cultivo aeropónico se refiere a un sistema por el cual las plantas se cultivan sin necesidad de sustrato. En realidad lo que se hace es que las raíces queden suspendidas en el aire, siempre en una pequeña maceta de cultivo especial de tal forma que solo se rocían con agua rica en nutrientes.

Dicho de otro modo, es una planta que se desarrolla con las raíces al aire y que se nutre a través de las pulverizaciones de agua con abono o similar para que pueda seguir creciendo.

De esta forma las raíces de la planta no tocan el agua más que cuando se les rocía con ellas.

Para que te hagas una idea, lo que se hace es poner las plantas en unos recipientes donde la planta queda iluminada por arriba, pero por abajo las raíces se meten en un recipiente cerrado (y normalmente también oscuro). Esta estructura conserva las raíces intactas, sin echarle sustrato ni tampoco se usa un producto artificial.

Sin embargo, debajo de estas sí que hay unos nebulizadores que apuntan hacia arriba, así como unos conductos que llevan el agua rica en nutrientes. De esta forma, cuando se activan, los nebulizadores crean una especie de nube de humedad que llega a las raíces y los nutre para alimentar a la planta.

Qué plantas se pueden plantar en un cultivo aeropónico

Si ahora mismo te estás preguntando si cualquier planta se podría plantar en este sistema, lo cierto es que no. En realidad, hay algunas que tienen una probabilidad mayor de éxito que otras. Por ejemplo, en el caso de las hortalizas de hoja, las plantas aromáticas o las fresas sí que podrías tenerlas así, pero otras plantas no es tan fácil de conseguirlo.

Por eso, debemos avisarte de que no podrás tener las que quieras con este sistema.

Como planta con flor que sí podrías optar por este método tienes la orquídea, ya que esta sí que se desarrolla mejor con las raíces al aire y alimentándose de la humedad que reciba a través de los nebulizadores (más si viene rica en nutrientes).

Qué beneficios tiene el cultivo aeropónico

Ahora que conoces un poco más lo que es el cultivo aeropónico, ¿puedes vislumbrar cuáles son los beneficios que tiene? Aquí te exponemos los más importantes a tener en cuenta:

Hay un menor gasto

Imagina que no tienes que comprar tierra, macetas individuales, etc. Es un ahorro significativo, sobre todo cuando tienes muchas plantas.

Es cierto que el sistema en sí no es barato de montar. Pero la inversión que se realiza en un primer momento se va amortizando ya que las plantas pueden ir creciendo y dando sus frutos para ser reemplazadas por otras sin tener que cambiar tierra cada dos por tres (como ocurriría con estas).

Además, tampoco se gasta tanto en agua ni en fertilizantes.

El crecimiento es rápido

No lo decimos nosotros, hay estudios cuyas conclusiones han demostrado que el cultivo aeropónico hace que las plantas crezcan más rápido que si se ponen en tierra (o en agua). El motivo principal es que las raíces, al estar al aire, tienen una mejor oxigenación, lo que impide que se deterioren (o que puedan sufrir de pudrición, hongos, etc.).

Tienes una mejor visión de la planta

Si bien te hemos dicho que es más complicado que se sufra de plagas y enfermedades, no están exentas de ello, lo que implica que puedas ver visualmente el estado de las raíces de la planta. De esta manera podrás actuar de forma más rápida para salvarla.

Cómo crear tu cultivo aeropónico en casa

Si todo lo anterior te ha llamado la atención y quieres tener en casa un cultivo aeropónico similar, primero, no es tan caro como puedes pensar. Y, segundo, en solo 2-3 horas podrías construirlo.

Para hacerlo, lo que vas a necesitar es lo siguiente:

• Un tanque de agua. Te puede valer, por ejemplo, un acuario que no uses. Eso sí, te recomendamos que cubras las paredes para que la luz no llegue al agua del interior.
• Tubo de PVC. Necesitarás 1 metro o así (mejor que sobre que no que falte).
• Conectores de PVC: para conectar y establecer los sistemas. Dependiendo de cuántos necesites podrás poner unos u otros.
• Bomba de agua. Trata de que sea de 275 a 300 gal/h para que tenga suficiente forma.
• Cabezales de aspersor.
• Macetas de rejilla.
• Una superficie donde tener las macetas. Ha de ser de la misma longitud y anchura que el tanque de agua.

Para empezar, debes hacer agujeros a la superficie donde vas a colocar las macetas. Asegúrate de que las puedas meter y no se caigan.

Dentro del tanque de agua monta el sistema con el tubo, los conectores y los cabezales. Asegúrate de que la bomba de agua funciona y de que esta tiene suficiente presión para que salga el agua por los cabezales.

Una vez lo tengas hecho solo te quedará montarlo todo y sellar. Aunque en este caso es mejor no hacerlo para que puedas levantar a menudo y ver cómo van las raíces.

¿Merece la pena el cultivo aeropónico?

Lo cierto es que esa respuesta no podemos darla nosotros. Es un método muy efectivo pero, ¿te merece la pena tenerlo en casa para tus plantas? ¿Vas a sacarle provecho? No hay duda de que se ahorra, pero puede tener algunos inconvenientes, como el hecho de depender de la electricidad (ya que la bomba de agua ha de estar conectada siempre para que funcione). Esto limita la ubicación donde puedes ponerlo y a veces no es fácil de mantener (sobre todo porque el agua puede pudrirse o hay que cambiarla cada varios meses.

¿Te animas a pasarte al cultivo aeropónico en tu casa? ¿Con qué plantas o esquejes probarías tú?