Las semillas ecológicas son esas que provienen de los cultivos habituales, cultivos donde se suelen respetar totalmente el ciclo natural de su evolución. Los agricultores escogen entre los mejores cultivos de cada una de las generaciones y los distintos tipos de semillas que tienen la capacidad de adaptarse poco a poco al terreno y al clima en el cual están ubicadas, a la vez que también se relacionan con aquellas comunidades microbianas que forman parte del área.
Diferencias entre semillas
Esta capacidad de adaptación permite que estas semillas sean mucho más resistentes en cuanto a las plagas, todo esto de manera natural, ya que no se requiere de usar ningún tipo de abono que contenga químicos o manipular genéticamente a las semillas durante el cultivo o su preservación.
En la actualidad, las personas están optando por tener una alimentación mucho más sana y es por eso que las semillas ecológicas son más utilizadas con el paso del tiempo, además, estas semillas tienen un mejor sabor. Igualmente, la propagación de los huertos urbanos ha sido de gran ayuda a la hora de que las personas comiencen a plantar sus propias semillas ecológicas en vez de consumir las que son comerciales o las que han sido alteradas genéticamente.
Semillas tratadas y no tratadas
Las semillas tradicionales que no son tratadas, proceden de las plantas que se cultivan de manera convencional utilizando productos químicos y sintéticos con el fin de controlar las plagas, la fertilización y la maleza. Las semillas que son tratadas suelen ser tratadas con un poco de agua caliente y algunos métodos biológicos y químicos con el objetivo de mantenerlas protegidas de los patógenos y como consecuencia, incrementar su rendimiento.
¿Cuáles son las mejores semillas?
La opción más saludable tanto para las personas como para el medioambiente, es utilizar semillas orgánicas.
Lo que quiere decir que los productos artificiales y químicos que se utilizan para fertilizar, controlar plagas y malas hierbas no son usados en el proceso de producción de estas plantas. Dichos productos químicos son aquellos que se encargan de intoxicar el agua subterránea e incrementan la exposición frecuente a los pesticidas, lo cual causa como resultado un mayor riesgo para nuestra salud y nos hace ser más propensos a desarrollar patologías tales como daños a los nervios, cáncer y problemas congénitos.
Las semillas orgánicas, sin embargo, no se encuentran disponibles para la gran mayoría de las frutas y las verduras. Por eso y al comprar semillas orgánicas tratadas y no tratadas asegúrate de que tu proveedor te ofrezca toda la información acerca de cuáles son las semillas orgánicas, cuáles son tratadas y no tratadas, etc. Además, te recomendamos que cada vez que compres las semillas las revises de manera cuidadosa, con el fin de cerciorarte de que no te han vendido algunas semillas tratadas.
Dónde puedes adquirir las semillas ecológicas
Es posible adquirir las semillas ecológicas, tanto en las tiendas tradicionales como en tiendas online y para asegurarte de que se trata de semillas ecológicas es necesario que busques el sello del organismo que lo certifica, el cual varía dependiendo de la región y el país en el que te encuentres.
La mejor opción y la más común entre los aficionados, es comenzar a sembrar aquellas semillas que han comprado o adquirido mediante algunos intercambios. Sin embargo, en este último caso, es necesario que confíes en aquella persona que te ha enviado las semillas y que además te explique de qué forma las deberías cultivar.
Cómo puedes hacer para adquirir las semillas ecológicas
Si bien, una de las opciones más sencillas es comprarlas en alguna tienda o comercio que se especialice en este tipo de semillas, también otra forma en las cual podrías adquirir tus semillas ecológicas y es la siguiente:
Consiste básicamente en buscarlas tanto en las ferias como en las fiestas que se encuentran vinculadas con todo aquello que rodea la agricultura.