El Abedul del Himalaya (Betula utilis var. jacquemontii )

El Abedul del Himalaya de nombre científico Betula utilis var. jacquemontii  y miembro de la familia Betulácea es original de la región del Himalaya, que se encuentra en el continente asiático.

Se halla diseminado en los territorios de Afganistán, Cachemira, Nepal, Bután y el oeste de China. También se puede observar en extensos parajes y jardines del Reino Unido.

Características del Abedul del Himalaya

Este árbol ornamental de corteza blanca y brillante es muy resistente al frío.

Se desarrolla en climas de bajas temperaturas y regiones que alcanzan hasta los 4.500 metros de altura. Durante la gélida temporada, sus raíces se cubren de nieve y cuando se cultiva en un ambiente propicio (suelos arenosos, húmedos, con silicio y ácidos, permeables o profundos), puede crecer hasta 20 metros, aunque por lo general suele medir entre los 9 y 12 metros.

Por su parte, las hojas tienen el borde dentado, son ligeramente peludas, de color verde oscuro y caducas, es decir que van cambiando la coloración (amarillo brillante) al comenzar el otoño.

Especialistas en la materia, aseguran que estas poseen un alto valor medicinal al igual que su savia; siendo aprovechadas especialmente para tratar malestares vinculados al riñón, corazón y problemas circulatorios.

Su tallo tiene la particularidad de producir líquenes bajo la sombra.

Es una variedad que se cultiva por esquejes (ramas) de madera blanda o injertos. El exceso de agua durante el riego puede perjudicarla, aparte que se debe evitar la exposición directa al sol en épocas calurosas.

No es susceptible de sufrir plagas. Florece en primavera y se recomienda la poda (que no es frecuente) en época de inactividad.

Historia sobre este árbol

En 1820, el botánico danés Nathaniel Wallich fue el primero en recoger muestras de la planta en Nepal.

Cinco años después y en 1825, el escocés David Don describió sus características a partir de los ejemplares de su colega Wallich. A cambio recibiría la designación con la que hoy se conoce (Betula utilis var. Jacquemontii) y todo gracias al galo Víctor Jacquemont, quien en 1831 recibió una licencia libre por parte del emperador Hindú Ranjit Singh sij de Cachemira para educarse sobre la diversidad de especies vegetales que había en el país. Su amor por la naturaleza le valdría al europeo tal excepción.

Usos

Según la mitología celta, este tipo de Abedul simboliza la evolución y la purificación, ya que antiguamente lo consideraban el “árbol de la sabiduría”.

Tenía varios usos, la corteza se empleaba como pergamino. Las ramas servían de látigos y con ellas se elaboraban escobas para limpiar los huertos. Era tradición sembrar tres abedules de tallo blanco en la entrada del hogar para la buena fortuna y resguardarse de malos espíritus.

Un árbol ornamental, útil e invernal

Este árbol crece en fríos ambientes exteriores y decora con el contraste de colores (según las estaciones anuales) los helados montes orientales.

Un atractivo tronco cuya corteza se desprende descuidadamente como si se escamara poco a poco es su característica primordial. Es un poema ver cómo las hojas se mecen boca abajo acariciando el viento y cual dormilonas lágrimas se agotan una tras otra, envejeciendo lentamente en la espesura de sus ramas.

Gracias a su extraña belleza se utiliza mucho para decorar e igual que muchos de su especie, ofrece incalculables beneficios siendo un importante recurso natural renovable, ya que purifica el aire para que puedas vivir en un ambiente saludable y reduce tu consumo de energía.

Con la madera puedes practicar el reciclaje y convertirla como por arte de magia en muebles o utensilios para tu hogar u oficina. Además reverdece el paisaje urbano que tienes a tu alrededor y garantiza la calidad de vida que mereces.

Por eso y más debes reconocer los beneficios de esta verde creación. De tu comportamiento depende que el planeta donde habitas, la Tierra, no se extinga y con ella las especies animales, vegetales, los seres vivos y tú que al final interactúas con cada ecosistema.