El injerto en cactus es una técnica que nos ayuda a mejorar su crecimiento y floración. Porque lo que hacemos es unir dos plantas para que se desarrollen y florezcan como una sola.
Eso sí, para que la operación sea exitosa debemos saber cómo afrontarla, y nosotros te vamos a contar todo lo que tienes que hacer.
¿Por qué realizar un injerto en cactus?
Hay muchas razones para hacerlo, pero las más habituales son estas:
- Acelerar el crecimiento. Algunas especies de cactus tienen un crecimiento muy lento, pero al injertarlas en un portainjerto vigoroso, pueden crecer más rápido.
- Mejorar la floración. Hay especies de cactus que tardan muchos años en florecer, pero al injertarlas en un portainjerto adulto pueden florecer antes.
- Propagar variedades difíciles. Algunas variedades de cactus son difíciles de propagar por otros métodos, como esquejes o semillas, pero se pueden injertar con éxito.
- Obtener plantas más resistentes. Al injertar un cactus en un portainjerto resistente a enfermedades o plagas se puede obtener una planta más resistente.
¿En qué consiste un injerto de cactus?
Como decíamos, esta es una técnica especializada con la que vamos a unir dos plantas diferentes para que crezcan como una sola.
El injerto se basa en la unión de los tejidos vasculares de las plantas, y se puede hacer en muchas especies, como en los árboles frutales.
Tenemos dos partes claramente diferenciadas:
- Portainjerto. La planta que proporciona las raíces y la base para el injerto. Debe ser una especie vigorosa y compatible con el injerto.
- Injerto (o vástago). La parte que se une al portainjerto, generalmente un segmento de tallo o una areola que contiene el tejido meristemático (tejido de crecimiento) de la planta que se desea propagar o mejorar.
La clave del éxito del injerto radica en lograr una unión íntima entre los tejidos del cambium (capa de células entre la corteza y la madera) del portainjerto y el injerto. Para ello, se requiere:
- Selección de materiales. Elegir un portainjerto y un injerto compatibles, en términos de género y especie, y que se encuentren en buen estado de salud y crecimiento activo.
- Preparación. Desinfectar las herramientas de corte y las áreas de injerto para prevenir infecciones. Realizar cortes limpios y precisos en ambos componentes, exponiendo el cambium.
- Unión. Colocar el injerto sobre el portainjerto, asegurando que los tejidos del cambium de ambas plantas estén en contacto. Para ello podemos utilizar técnicas de fijación, como bandas elásticas o cinta adhesiva especial para injertos, a fin de mantener la unión firme.
- Cuidados post-injerto. Debemos ser capaces de proporcionar condiciones ambientales adecuadas para la cicatrización y el desarrollo de la unión, como una temperatura cálida, humedad controlada y protección contra la luz solar directa y la lluvia.
Tipos de injertos en cactus
Seguramente ya te habrás dado cuenta de que hacer un injerto no es algo para quienes se acaban de iniciar en el mundo de la jardinería, requiere que tengas unos conocimientos básicos.
Si te quieres animar a probar suerte, otra de las cosas que debes saber es que hay varias técnicas para injertar:
Injerto en «V» o de cuña
Consiste en realizar un corte en forma de «V» en el portainjerto y a la vez que se da al injerto forma de cuña para que encaje en el corte. Una técnica que resulta idónea para injertar cactus columnares o con tallos gruesos.
Su ventaja es que es fácil de realizar y proporciona una buena superficie de contacto entre el injerto y el portainjerto.
Injerto por aposición
Con esta técnica se unen las superficies planas de corte de ambas plantas, asegurando que los tejidos del cambium estén en contacto. Esto resulta adecuado para injertar cactus con tallos planos o cilíndricos.
Es una técnica sencilla que nos permite injertar cactus de diferentes formas.
Injerto de Areola
Se extrae una areola que contiene el tejido meristemático de la planta deseada y se inserta en un corte realizado en el portainjerto. Se utiliza para propagar variedades raras o difíciles de cactus que no producen hijuelos o semillas.
Su gran ventaja es que permite propagar plantas a partir de una pequeña cantidad de tejido.
Injerto de segmento
Consiste en cortar un segmento de tallo de la planta deseada y colocarlo sobre el portainjerto, asegurando que los tejidos del cambium estén en contacto. Esta técnica es muy útil para propagar cactus con tallos segmentados, como las opuntias.
Destaca porque es fácil de realizar y permite propagar grandes cantidades de plantas a partir de un solo segmento.
Injerto en corona
Para llevarlo a cabo se realizan varios cortes alrededor del tallo del portainjerto y se insertan los injertos en forma de cuña. Esto permite crear plantas con múltiples injertos de diferentes variedades.
El beneficio que obtenemos es que podemos combinar diferentes características en una sola planta.
Consejos para injertar cactus con éxito
Hay varias técnicas entre las que puedes escoger, pero sea cual sea la que utilices, seguir estos consejos te ayudará a tener más posibilidades de éxito:
Planificación y preparación
- Elige el momento adecuado. La mejor época para injertar cactus es durante la temporada de crecimiento activo (primavera y verano).
- Selecciona plantas saludables. Tanto el portainjerto como el injerto deben estar sanos y libres de enfermedades o plagas. Elige un portainjerto vigoroso y compatible con el injerto. Investiga qué especies son compatibles para asegurar el éxito del injerto.
- Reúne las herramientas necesarias. Necesitarás un cuchillo afilado y limpio, alcohol para desinfectar, guantes, bandas elásticas o cinta adhesiva especial para injertos, y posiblemente hormonas de enraizamiento.
- Prepara el portainjerto. Si el portainjerto es muy alto, puedes cortarlo unos días antes del injerto para que cicatrice. Asegúrate de que tenga un sistema de raíces sano y esté bien hidratado.
Proceso de injerto en cactus
- Desinfecta las herramientas. Limpia el cuchillo con alcohol antes y después de cada corte para evitar la propagación de enfermedades.
- Corta el portainjerto. Realiza un corte limpio y horizontal en el portainjerto, justo por encima de la zona donde quieres realizar el injerto.
- Prepara el injerto. Corta un segmento de tallo o una areola de la planta que deseas injertar. Si vas a injertar un segmento, asegúrate de que tenga al menos una areola.
- Une las partes. Coloca el injerto sobre el corte del portainjerto, asegurando que los tejidos del cambium (la capa verde justo debajo de la corteza) de ambas plantas estén en contacto.
- Fija el injerto. Utiliza bandas elásticas o cinta adhesiva especial para injertos para mantener las dos partes unidas firmemente. Asegúrate de no apretar demasiado para no dañar las plantas.
Cuidados posteriores
- Protege el injerto. Coloca la planta injertada en un lugar cálido y luminoso, pero sin luz solar directa. Evita regar la planta durante unos días para permitir que el injerto cicatrice.
- Vigila la cicatrización. Revisa el injerto regularmente para asegurarte de que no haya signos de pudrición o infección. Si ves algo extraño, retira la parte afectada y aplica un fungicida.
- Retira la fijación. Una vez que el injerto haya cicatrizado (generalmente en una o dos semanas), retira las bandas elásticas o la cinta adhesiva con cuidado.
Injertar cactus es una tarea delicada que requiere de atenciones y cuidados especiales, pero si se hace bien el resultado es espectacular. ¿Te animas a probar?