Si tienes un jardín grande y buscas un árbol de crecimiento rápido que te pueda dar sombra en pocos años, entonces no lo dudes: el falso pimentero puede ser una especie muy interesante para ti, ya que además no necesita de muchos cuidados para sobrevivir.
Es muy utilizado en alineaciones, aunque se puede tener también como ejemplar aislado, de modo que tan sólo queda saber cómo se cuida. Y para eso, te invitamos a seguir leyendo 🙂 .
Origen y características del falso pimentero
Nuestro protagonista es un árbol perennifolio de rápido crecimiento originario de América del Sur, concretamente desde el sur de México hasta el norte de Chile. Recibe los nombres comunes falso pimentero, pimentero falso, aguaribay, especiero y lentisco del Perú, y su científico es Schinus molle. Alcanza una altura máxima de 7 metros. Está formado por una copa péndula o llorona con hojas divididas en numerosos foliolos lanceolados, lisos y de color verde intenso.
Las flores, que brotan en primavera, se agrupan en panículas colgantes terminales de color amarillento y son hermafroditas. Una vez son polinizadas, comienza a madurar el fruto, que es una drupa de color rosa brillante del tamaño de un grano de pimienta.
¿Cómo se cuida?
Si te has hecho con un ejemplar, te recomendamos proporcionarle los siguientes cuidados:
- Ubicación: exterior, a pleno sol. Hay que plantarlo a una distancia mínima de 5 metros de suelos, tuberías, etc., pues sus raíces son invasivas.
- Riego: resiste la sequía; sin embargo, se recomienda regar cada 3 días en verano y cada semana el resto del año.
- Suelos: crece en todo tipo de suelos, incluso en los calizos pobres en nutrientes.
- Abonado: no es necesario, pero se puede abonar de tanto en cuando con abonos orgánicos.
- Época de plantación: en primavera, cuando el riesgo de heladas haya pasado.
- Plagas y enfermedades: es muy rústico.
- Rusticidad: soporta heladas de hasta los -5ºC.
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