Quizá por el nombre de Fargesia rufa no sepas qué tipo de planta es. Pero si te hablamos de un bambú la cosa cambia. La Fargesia rufa es un bambú no invasivo, y una de las mejores opciones para cercar o proteger tu intimidad en los jardines.
Pero, ¿qué sabes de esta planta? ¿Qué cuidados necesita para utilizarla en el jardín? De todo eso, y de algunas cosas más, es de lo que te vamos a hablar a continuación. Échale un ojo.
Cómo es la Fargesia rufa
El bambú Fargesia rufa es uno de los más resistentes que encontrarás. Además, no es invasivo, lo que implica que podrás tener más plantas en el jardín sin que este se «coma» el espacio de estos y te quedes sin esas plantas.
Puede alcanzar fácilmente los tres metros de altura, de ahí que uno de los principales usos que se le dé sea el de servir de tapizante entre vallas, cercas o muros para que los vecinos, ni personas de la calle, puedan verte en el interior de tu casa.
Su crecimiento se produce en matas, bastante densas entre sí, que, con unos buenos cuidados, puede hacer que tenga tallos bastante gruesos. A veces puede quedar algo colgante, por lo que tendrás que podarlo a menudo, sobre todo si las ramas cuelgan hacia partes donde son de paso o no necesitas que las plantas molesten. Más allá de eso, no te va a dar ningún problema.
En cuanto a los tallos, debes saber que estos son de color rojizo, que contrasta muchísimo con las hojas, que son de un color verde lima.
Eso sí, no hablamos de una planta que florezca. Solo será de hojas verdes, que con buenos cuidados puedes mantenerla durante todo el año así.
Cuidados de la Fargesia rufa
¿Te animas a tener bambú Fargesia rufa en casa? Lo cierto es que lo puedes tener plantado tanto en el jardín como en una maceta. En ambos casos aguanta muy bien y en el segundo puedes controlar mucho mejor el crecimiento de este.
Pero más allá de la ubicación que le des, debes saber que hay otros cuidados que debes tener muy en cuenta para que se desarrolle de manera saludable. Te contamos los principales.
Ubicación y temperatura
Lo primero que debes controlar de la Fargesia rufa es que es una planta de rápido crecimiento. Siempre que se le den los cuidados precisos. Uno de ellos tiene que ver con su ubicación. Necesita mucho espacio para extenderse. Ten en cuenta que puede crecer hasta tres metros de altura, pero también llegar casi a los dos metros de ancho. Por eso, intenta plantarlo en una zona donde tenga para crecer. Así mismo, busca un lugar que esté a pleno sol. O al menos en semisombra.
La elección de un lugar u otro va a depender, en gran medida, de cómo sea tu clima. Si hace demasiado calor y quieres evitar que se le quemen las hojas, mejor que esté en semisombra. Pero si no tienes temperaturas demasiado altas en verano, puedes considerar ponerlo al sol.
En cuanto a la temperatura, su rusticidad está en los -28ºC, lo que implica que no solo no tendrás problema con el calor, sino que también te olvidarás de problemas con el frío o las heladas.
Sustrato
Si bien te lo vamos a comentar a continuación, la Fargesia rufa es una planta que tolera muy bien la sequía, lo cual implica que no tengas que regarla muy a menudo. Sin embargo, eso no quiere decir que pueda estar con la tierra seca mucho tiempo y despreocuparte de ella. Cuando la sequía es larga en el tiempo la planta se resiente, hasta el punto de que puede morirse.
Por eso, te recomendamos que hagas una mezcla con sustrato universal, humus de lombriz (para que tenga algo de humedad) y arcilla expandida (para que respire y oxigene la tierra). Eso sí, asegúrate de que la tierra que uses no tenga un exceso de caliza ya que la planta no lo soporta y puede acabar muriendo.
Riego
Una vez le des la tierra adecuada, el riego ha de ser moderado pero no abundante. Dicho de otra manera, tendrás que regarla pero de vez en cuando. En realidad, no podemos darte una pauta fija de riego porque va a depender de dónde lo coloques, de si está en maceta en el jardín, de qué temperatura haga, etc.
Nuestra recomendación es que mejor regar poco que mucho.
Abonado
Con respecto al abonado, debes saber que este se hace dos veces al año. Uno en primavera, y otro en otoño. Puedes usar en primavera un abono de liberación lenta, mientras que, en otoño, es mejor uno multiusos.
Poda
La poda de la Fargesia rufa es una parte muy importante de sus cuidados, sobre todo si no quieres que te invada con sus hojas. Esta se realiza sobre todo para controlar tanto el tamaño como la forma del bambú.
Para empezar, debes eliminar aquellas matas que estén muertas, o ramas secas, débiles o dobladas. Necesitas que la planta tenga una buena circulación de aire para que se prevengan enfermedades.
Intenta usar herramientas que estén muy afiladas para así hacer cortes rectos y seguros para que la planta no se dañe en sí misma.
Plagas y enfermedades
Lo cierto es que, en general, no vas a tener problemas con las plagas y enfermedades, pero sí con la falta de humedad ambiental. Si vives en una zona así te puedes encontrar con que las hojas se secan y la planta en sí adquiere un deterioro en su aspecto general.
Multiplicación
La propagación de la Fargesia rufa se lleva a cabo de dos formas diferentes: a través de la división de la mata o bien por rizomas. Cuando se hace, para aumentar la probabilidad de que salga adelante se ponen en sustratos más ricos en humus de lombriz para que conserve la humedad. Así, hasta que arraigan, se les mantiene en una maceta más controlados para vigilar su desarrollo.
Para tener aún más éxito, te recomendamos que lo hagas a mediados de primavera o bien al principio del verano.
Con todos estos datos, ya puedes pensar en la Fargesia rufa para tu jardín. ¿Te animas a tenerla?