Ficus lyrata, un árbol que decora jardines y hogares

El Ficus lyrata es un árbol de muy rápido crecimiento que se puede tener tanto en los jardines medianos tropicales como en maceta. Es muy adaptable y muy fácil de cuidar, por lo que vas a poder disfrutar de él desde el primer día.

Si te apetece saberlo todo sobre esta curiosa y hermosa planta, a continuación te voy a explicar todo sobre ella.

Origen y características del Ficus lyrata

Nuestro protagonista es un árbol originario de África occidental, desde Camerún hasta el oeste de Sierra Leona cuyo nombre científico es Ficus lyrata y que recibe los nombres comunes de Ficus lira, Árbol lira, Ficus lirado e Higuera de hojas de violín. Comienza su vida siendo epífita, germinando en la rama de un árbol al que poco a poco sus raíces van estrangulándole. Cuando el árbol anfitrión muere, se pudre, dejando sólo al Ficus lira. Alcanza una altura de 12-15 metros, y normalmente tiene una copa aparasolada compuesta por hojas grandes de 20-25cm de largo en forma de lira o violín. El fruto es un higo de color verde que mide de 2,5 a 3cm de diámetro.

Su ritmo de crecimiento es bastante rápido, pero mejor veámoslo más en detalle para que no se nos escape nada. 🙂

¿Cómo se cuida?

Si te apetece tener un ejemplar, te recomendamos proporcionarle los siguientes cuidados:

Ubicación

El Ficus lyrata es una planta que puede estar a pleno sol o en semisombra. Sin embargo, si se cultiva en el interior debemos de colocarlo en una habitación en la que entre mucha luz natural.

Tierra

• Maceta: se puede usar sustrato de cultivo universal mezclado con perlita al 30%.
• Jardín: el suelo tiene que tener buen drenaje y ser rico en materia orgánica.

Riego

Tiene que ser frecuente, sobretodo en verano. Lo ideal es regar cada 2-3 días durante la época de más calor, y una vez por semana el resto del año.

Abonado

Desde comienzos de primavera hasta finales del verano es muy importante abonarla con abono universal para plantas líquido siguiendo las indicaciones especificadas en el envase del producto. En el caso de tenerlo en el jardín, también podremos utilizar abonos orgánicos, como estiércol, guano, verduras pasadas (que ya no se pueden comer), bolsitas de té, o compost.

Época de plantación o trasplante

En primavera, cuando el riesgo de heladas haya pasado. En caso de tenerlo en maceta, habrá que trasplantarlo cada dos años.

Multiplicación

Semillas

El Ficus lyrata es una planta que se multiplica por semillas en primavera, siguiendo este paso a paso:

1. Lo primero que hay que hacer es rellenar una maceta u otro semillero con sustrato de cultivo universal
2. Después, colocamos las semillas en la superficie y las cubrimos con una fina capa de sustrato.
3. Finalmente, regamos y colocamos cerca de una fuente de calor.

Las primeras germinarán en 15-30 días.

Esquejes

Una manera más rápida de conseguir un nuevo ejemplar de Ficus lyrata es multiplicándolo por esquejes en primavera, siguiendo este paso a paso:

1. Primero, se corta una rama de unos 40cm y se impregna la base con hormonas de enraizamiento en polvo o con enraizantes caseros.
2. Después, de planta en una maceta con vermiculita o sustrato para plantas.
3. Luego, se riega.
4. Finalmente, se coloca en una zona protegida del sol directo.

Si todo ha ido bien, en un mes, máximo dos, empezará a emitir raíces.

Plagas y enfermedades

Es muy resistente. Podría tener alguna cochinilla si el ambiente es seco y muy cálido, pero nada serio. Además, se podría quitar fácilmente con un algodón humedecido con alcohol de farmacia y quitarla a mano.

Poda

Si las ramas crecen demasiado se puede podar a finales de invierno/comienzos de primavera. También es necesario quitarle las que estén secas, enfermas o débiles para que pueda continuarse viendo bonito.

Rusticidad

Se trata de una planta muy sensible a las heladas. Puede soportar hasta los -1ºC siempre que sea un árbol adulto y aclimatado, pero lo ideal es que el termómetro no baje de los 10ºC.

¿Se puede cultivar en maceta?

Sí, por supuesto. De hecho, es una de las plantas de interior más queridas. A pesar del tamaño adulto que llega a alcanzar, mediante podas se puede controlar fácilmente su crecimiento. Lo único que tenemos que tener presente es que debe de estar en una habitación en la que entre mucha luz natural, lejos de las corrientes de aire (tanto frías como cálidas) y que, cada vez que reguemos, tenemos que acordarnos de retirar el agua del plato que haya sobrado a los diez minutos de haber regado.

Asimismo, es muy aconsejable abonarlo con abonos líquidos desde primavera hasta verano para que pueda crecer bien y no le falte de nada. De esta manera, nuestro Ficus lira estará sano.

¿Qué te ha parecido esta planta? ¿La conocías? Si te animas a adquirirla, visita un vivero o tienda de jardinería de tu zona: seguro que ahí la encontrarás fácilmente. Que la disfrutes.