Heliconia
Las flores exóticas son aquellas que tienen formas y/o colores que no solemos ver en los jardines de nuestra zona. A menudo son producidas por plantas de origen tropical, aunque eso no siempre es así. Pero, en cualquier caso, ¿quién no quisiera saber sus nombres para cultivarlas?
Por suerte, hay una gran variedad de especies de flores exóticas cuyos cuidados no son especialmente delicados. Si bien es posible que tengamos que protegerlas del frío, eso no nos impedirá disfrutar de ellas.
Ave del paraíso (Strelitzia reginae)
La flor ave del paraíso es una planta rizomatosa y perenne originaria de Sudáfrica. Alcanza una altura máxima de 1,5 metros, con hojas de color verde grisáceo y con largos pecíolos. Se cultiva especialmente por sus flores, las cuales brotan en primavera y verano. Además, es muy agradecida ya que crece tanto al sol como en semisombra, y por si fuera poco soporta las heladas suaves de hasta los -2ºC.
Bandera española (Gloriosa superba)
Imagen – Flickr/Kai Yan, Joseph Wong
Si buscas una trepadora con flores exóticas te recomendamos la Gloriosa superba. Es relativamente pequeña ya que rara vez supera los 2 metros de alto, pero además produce flores rojas y amarillentas en primavera-verano. Es natural de África y de Asia tropical, de modo que no resiste las heladas. Pero eso no es problema ya que siempre que tenga luz podrá crecer bien.
Frangipani (Plumeria rubra)
Imagen – Wikimedia/Minghong
El arbusto o arbolito conocido como frangipani produce unas de las flores exóticas más bonitas del mundo. Estas surgen en panículas, miden unos 30 centímetros de diámetro, y son de color blanquecino o rosado. La planta es originaria de América, y perennifolia. Alcanza una altura promedio de 7 metros. Necesita una exposición soleada, así como un suelo con buen drenaje. No soporta las heladas, pero la Plumeria rubra var acutifolia sí aguanta temperaturas de 0 grados e incluso algo menos de forma puntual.
Heliconia psittacorum
Imagen – Wikimedia/Alejandro Bayer Tamayo
La Heliconia psittacorum es una planta rizomatosa perenne que pertenece al género de las Heliconia. Es originaria del Caribe y de Sudamérica, y tiene hojas muy grandes y pecioladas cuya altura puede llegar a ser de 2 metros. Sus flores son amarillas, o rojo-anaranjadas y brotan durante el verano. Eso sí, necesita luz -indirecta- y protección contra las heladas.
Hibisco (Hibiscus rosa-sinensis ‘Double Red’)
Imagen – Wikimedia/Dinesh Valke
Los hibiscos tienen flores magníficas, pero casi siempre se ven las mismas en los jardines. Si quieres una que no sea tan común, te recomendamos la ‘Double Red’. Se trata de un arbusto perennifolio, pequeño de 1-2 metros de altura, que tiene las flores con una doble corona de pétalos los cuales son rojos en primavera y verano. Crece a pleno sol, y puede soportar algo el frío, de hasta los -2ºC.
Loto de Egipto (Nymphaea caerulea)
Imagen – Wikimedia/Reinhold Möller
El loto de Egipto, conocido también como loto azul egipcio, es una planta acuática originaria de Egipto. Tiene hojas flotantes, redondas, de unos 20-40 centímetros, y unas flores de 15 centímetros de diámetro, con pétalos de color azulado. Es muy bonita, ideal para cultivar en estanques de agua dulce teniendo en cuenta que puede medir 1,5 metros de ancho. El único inconveniente es que no soporta las heladas, pero siempre puedes sacar el rizoma del estanque y tenerlo en un vaso -con agua- dentro de casa durante el invierno.
Reina de la noche (Selenicereus grandiflorus)
Imagen – Flickr/dé.wé.
El cactus conocido como reina de la noche es epífito y originario desde México hasta Sudamérica. Tiene tallos cuadrangulares de color verde armados con espinas cortas, y produce flores blancas las cuales miden unos 22 centímetros de diámetro. Estas se abren al anochecer, y son fragantes. Puede medir 12 metros de alto, de modo que es importante darle algún soporte por el que trepar. Crece a pleno sol y en semisombra, pero tienes que tener en cuenta que no soporta el frío.
Rosa del desierto (Adenium obesum)
La rosa del desierto es un arbusto perennifolio originario de África y Arabia tropical. Alcanza una altura de 1 a 3 metros, con hojas de color verde oscuro. Sus flores miden entre 4 y 6 centímetros de diámetro, y pueden ser blancas, rojas o rosas, con una o dos coronas de pétalos. Resiste la sequía, pero no así el exceso de agua. Además, ha de estar en un lugar soleado, y protegida del frío.
Tillandsia cyanea
Imagen – Wikimedia/Cliff
Si te gustan las bromeliáceas hay una que además de ser fácil de encontrar a la venta es también una de las que menos cuidados precisan: la Tillandsia cyanea. Sus hojas forman una roseta de unos 15-20 centímetros de alto por unos 40 centímetros de ancho, y crecen curvándose hacia abajo. Del centro surge una inflorescencia, la cual es un conjunto de brácteas (hojas modificadas parecidas a pétalos) de color roja o rojo, y flores violetas. Has de ponerla en sombra o semisombra, y resguardarla del frío.
Zarcillos de la reina (Fuchsia magellanica)
Un bonito arbusto con flores exóticas es el que se conoce como zarcillos o pendientes de la reina. Es originario de Chile y Argentina, y alcanza una altura de 2 a 4 metros. Sus hojas son perennes, y en primavera brotan flores de color rojizo o violeta. Necesita sombra, y un riego regular durante todo el año. Pero por lo demás es capaz de soportar hasta los -7ºC.
¿Cuál de estas flores exóticas te ha gustado más?