El otoño vuelve a reunir a aficionados y expertos alrededor de las jornadas micológicas que diferentes localidades españolas celebran con propuestas que combinan naturaleza, ciencia y gastronomía. Rutas de reconocimiento, exposiciones, charlas y demostraciones de cocina completan la agenda en varios puntos del país.
Estas citas buscan poner en valor la riqueza fúngica de los territorios, impulsar un turismo respetuoso y acercar la identificación segura de especies a públicos de todas las edades. La oferta es variada, pero el hilo conductor está claro: salir al monte con criterio y disfrutar de la temporada con responsabilidad.
Calendario y sedes destacadas
En Laguna de Duero (Valladolid) se anuncian dos actividades de referencia: una ruta de interpretación de setas prevista para el sábado 8 de noviembre, de 10:00 a 13:00, en el entorno municipal –la zona exacta se ajustará a dónde haya más fructificaciones–, y un taller-demostración de cocina con setas el domingo 9, de 11:30 a 13:30, en la Casa de las Artes, de la mano del especialista César Lomas y con acceso a partir de 12 años.
En la comarca del Campo de Gibraltar, Los Barrios acoge las XII Jornadas Micológicas del Estrecho del viernes 14 al domingo 16 de noviembre, con salidas guiadas en áreas del Parque Natural del Estrecho, charlas técnicas sobre especies locales y showcookings donde la cocina con boletos, níscalos o rebozuelos ocupa un lugar central.
Cabanillas ha celebrado sus XIII Jornadas Micológicas con una salida tradicional a Ulzama, concurso popular, exposición de setas y degustación a precio simbólico, además de un cierre musical que reunió a vecinos y visitantes en un ambiente festivo.
El Campo Arañuelo (Extremadura) mantiene una programación repartida en varios días: el sábado 8 se realiza una exposición e identificación de ejemplares en el Jardincillo, el domingo 9 hay encuentro comarcal con salida a la dehesa en Toril y el miércoles 12 se presenta la charla “Boletus: la pasión del setero”; el fin de semana del 15 y 16 se completan dos salidas de campo en Bohonal de Ibor y Fresnedoso.
En Teruel, el Campus de la Universidad de Zaragoza ha organizado salidas al Parque Micológico de la Comunidad de Albarracín, exposición de cerca de 70 especies en la facultad y charlas divulgativas abiertas, además de mantener durante noviembre los “lunes micológicos” para resolver dudas de identificación y consumo seguro.
La Rioja se suma con Aguilar del Río Alhama, donde las jornadas incluyen proyección de documental, recolección en monte, exposición con identificación en la Plaza de España, degustación de pinchos y sorteo, con apoyo del Ayuntamiento y de comercios locales.
En la provincia de Soria, Navaleno concentra una feria micológica y una gran exposición de setas frescas en el polideportivo, además de ponencias divulgativas y un concurso fotográfico. La organización ha ajustado salidas por la menor fructificación en algunas fechas, poniendo el foco en la divulgación y el respeto al recurso.
Programas que unen monte, ciencia y cocina
El esquema se repite con matices locales: salidas guiadas para aprender a reconocer especies, sesiones de identificación con expertos, espacios expositivos para ver ejemplares con su nombre científico y charlas sobre conservación del micelio y los micobiomas. La gastronomía gana terreno con menús temáticos, barras de degustación y demostraciones prácticas de cocina con setas.
En Los Barrios, por ejemplo, restaurantes y cocineros locales preparan menús en los que las setas toman el protagonismo, con opciones como risottos, cremas o revueltos elaborados con especies de temporada, siempre incidiendo en el origen y en el uso responsable del recurso.
Inscripciones, edades y recomendaciones
Las actividades suelen ser gratuitas o de bajo coste y con plazas limitadas, por lo que se aconseja reservar con antelación. En las rutas se recomienda llevar calzado de montaña, cesta (no bolsa de plástico) y navaja, así como respetar normas de recolección y los cupos establecidos por cada municipio o espacio protegido.
En Laguna de Duero, la inscripción prioriza a los empadronados hasta el 5 de noviembre; a partir del día 6 y hasta las 13:00 del día 7 pueden apuntarse no empadronados. El contacto es el correo turismo@lagunadeduero.org, indicando nombre completo, edad y teléfono de cada participante.
Divulgación y seguridad alimentaria
La educación es un pilar en estas jornadas: la sociedad micológica turolense ha ofrecido charlas didácticas sobre biología fúngica, especies invasoras, técnicas de preparación y casos de toxicidad por consumo en crudo o en grandes cantidades. Este enfoque reduce riesgos y fomenta el consumo responsable con criterios claros.
En el Campo Arañuelo, además de las salidas guiadas, se abordan mesas redondas sobre hongos pirófilos y antracófilos, así como conferencias monográficas dedicadas al género Boletus, muy apreciado pero que requiere identificación precisa para evitar confusiones.
Voces del territorio y estado de la temporada
Desde el área de Turismo de Laguna de Duero se subraya que estas citas ponen en valor la tradición micológica local y refuerzan un turismo sostenible de calidad. Los expertos recuerdan que la temporada depende de la lluvia y la temperatura; aunque el inicio pueda ser más seco, hay enclaves con buena respuesta gracias a las últimas precipitaciones y a la diversidad de hábitats.
Organizadores y sociedades micológicas coinciden en que la comarca de Los Barrios es un escenario idóneo por su mosaico de bosque mediterráneo y litoral, mientras que Navaleno mantiene su gran cita con una vertiente expositiva y cultural potente, incluso ajustando salidas si las condiciones no acompañan.
Cómo disfrutar sin dejar huella
Las asociaciones insisten en recolectar solo lo que se conoce, evitar especies dudosas y no arrancar ejemplares para “probar suerte”. Es clave cortar con cuidado, no remover el suelo, dejar setas viejas para esporulación y devolver al campo aquellas que no se vayan a consumir. El objetivo: conservar el recurso para las próximas campañas.
Quien participe en estas jornadas encontrará apoyo experto, rutas formativas y actividades pensadas para todos los públicos, con una propuesta que combina aprendizaje, disfrute gastronómico y respeto por el entorno; una manera completa y cercana de vivir la temporada de setas.