La Calathea – actualmente denominada en gran parte de las especies como Goeppertia – es una de las plantas tropicales de interior más apreciadas por los amantes de la naturaleza y la decoración del hogar. Esta especie no solo destaca por la extraordinaria belleza de sus hojas, sino que también aporta vitalidad y un toque exótico a cualquier ambiente. Las calatheas, nativas de América Central y del Sur, son un ejemplo perfecto de cómo la biodiversidad tropical puede adaptarse y crecer felizmente en nuestros salones, oficinas o incluso baños.
A pesar de su reputación como planta caprichosa, lo cierto es que conociendo bien sus necesidades, la Goeppertia (Calathea) se convierte en una compañera de fácil mantenimiento. Si alguna vez te preguntaste cuál es el secreto para mantener intacto el colorido y la textura de sus hojas, o cómo evitar los clásicos problemas de hojas secas, aquí encontrarás una guía exhaustiva y natural sobre sus cuidados.
¿Qué es la Calathea o Goeppertia?
La Calathea es un género de plantas de la familia Marantaceae, aunque muchas de sus especies han sido reclasificadas recientemente bajo el género Goeppertia. Su origen está en las selvas húmedas de Sudamérica, sobre todo en Brasil y Perú. Destacan por sus hojas de formas ovaladas, alargadas o redondeadas que suelen tener patrones llamativos: rayas, manchas o líneas en tonos que van del verde oscuro al claro, con detalles en blanco, rosa, púrpura o plateado.
Las Calatheas y Goeppertias son herbáceas y rizomatosas, adaptadas a un crecimiento moderado y con la peculiaridad de que sus hojas se pliegan durante la noche y vuelven a desplegarse cada mañana, un fenómeno conocido como nictinastia. Muchas especies se han convertido en iconos del interiorismo por su elegancia y su capacidad para mejorar la calidad del aire.
Principales especies de Calathea y Goeppertia
Dentro de este complejo género encontrarás una gran variedad de especies, cada una con características ornamentales propias. Algunas de las más populares entre los aficionados a las plantas son:
- Goeppertia concinna (antes Calathea concinna): con hojas alargadas y decoradas con líneas verdes oscuras sobre fondo claro.
- Calathea makoyana: llamada también «planta de lupa», con hojas redondas y patrones en tonos verde y marrón.
- Calathea orbifolia: sus hojas grandes y redondeadas son de un verde intenso con bandas plateadas.
- Calathea zebrina: apodada «planta cebra», muestra rayas verdes y blancas que parecen el pelaje de una cebra.
- Calathea roseopicta: conocida también como medallion, sus hojas presentan dibujos en rosa y púrpura.
- Calathea ornata: destaca por sus finas rayas blancas y rosadas sobre hojas verde oscuro.
- Calathea rufibarba: con hojas onduladas y un característico vello en el envés.
- Calathea lancifolia: llamada rattle snake, tiene hojas largas y marcadas en dos tonos de verde.
La diversidad es enorme, pero comparten similitud en los cuidados, así que las recomendaciones que verás a continuación son válidas para prácticamente todas las Calateas y Goeppertias de interior.
Cuidados básicos de la Calathea (Goeppertia)
Esto es lo que necesita esta planta:
Luz e iluminación adecuada
La Calathea es muy sensible a la luz solar directa. Lo ideal es mantenerla en ambientes con luz indirecta moderada o incluso zonas de sombra parcial, sobre todo si el espacio no cuenta con grandes ventanales. Una exposición directa al sol puede provocar quemaduras en el follaje, dejando manchas marrones o provocando que las hojas se sequen por los bordes.
- Colócala cerca de una ventana bien iluminada, pero protegida de los rayos directos.
- Se adapta bien a espacios poco luminosos, por lo que es una opción perfecta para baños, pasillos o habitaciones orientadas al norte.
- Evita ubicaciones junto a fuentes de calor o corrientes de aire, que pueden estresar la planta.
Riego: humedad pero sin encharcamiento
Uno de los aspectos más importantes es el riego correcto. La Calathea/Goeppertia necesita un sustrato húmedo pero bien drenado, ya que el exceso de agua es su enemigo número uno y puede provocar la pudrición de las raíces.
- Riega únicamente cuando la capa superficial de la tierra esté seca. Puedes comprobarlo introduciendo un dedo o un palillo en el sustrato.
- En invierno, reduce la frecuencia de riego para evitar el exceso de humedad.
- El agua ideal es la filtrada, de lluvia o reposada. El cloro y otros químicos del agua de grifo pueden provocar puntas secas o manchas en las hojas.
- Siempre elimina el exceso de agua del plato de la maceta para evitar el estancamiento.
- Si las hojas muestran bordes enrollados hacia la nervadura central, es hora de rregar.
Humedad ambiental: el secreto de las hojas perfectas
Las Goeppertias y Calatheas son amantes de la humedad alta. Sus hojas reflejan si el ambiente es demasiado seco, mostrando puntas marrones o arrugas.
- Mantén la humedad ambiental entre el 60% y el 70%. Puedes lograrlo con un humidificador, colocando platos con agua cerca de la planta o pulverizando las hojas con agua no calcárea.
- Las habitaciones como el baño, si cuentan con luz natural, son entornos ideales.
- Evita poner la planta cerca de radiadores, aire acondicionado o lugares con corriente de aire seco.
Temperatura: cálida, sin cambios bruscos
La temperatura ideal para la Calathea se sitúa entre 18 y 26°C, aunque tolera bien hasta los 30°C si la humedad es adecuada. No soporta el frío ni los cambios bruscos de temperatura.
- Evita exponerla a menos de 15°C. Por debajo de esta temperatura sus procesos vitales se ralentizan y pueden aparecer daños en hojas y raíces.
- Mantén la planta lejos de ventanas o puertas por donde entre el aire frío en invierno.
- Las corrientes de aire intenso también pueden afectar el espectáculo de sus hojas.
El sustrato perfecto para tu Calathea
El sustrato es clave para el desarrollo y la salud de la planta. Opta por una mezcla suelta, aireada y muy rica en materia orgánica:
- Utiliza una base de tierra para macetas de calidad mezclada con turba y perlita para mejorar el drenaje y evitar el encharcamiento.
- La fibra de coco o vermiculita son buenos aliados para retener humedad sin compactar el suelo.
- Evita los sustratos con exceso de musgo sphagnum, ya que podrían retener demasiada agua y favorecer hongos o pudrición.
La maceta debe tener siempre agujeros de drenaje. Si el sustrato se compacta o las raíces asoman por los agujeros, es momento de trasplantar.
Fertilización: cuándo y cómo abonar
Tu Calathea agradecerá recibir nutrientes adicionales, sobre todo en épocas de crecimiento activo (primavera y verano).
- Aplica fertilizante líquido para plantas de interior cada 4-6 semanas durante primavera y verano, diluyendo la dosis a la mitad de lo recomendado.
- En otoño e invierno, reduce la frecuencia a una vez al mes o suspende si la planta entra en reposo.
- Si prefieres los abonos orgánicos, el compost bien curado también es adecuado.
- No abuses del fertilizante para evitar la acumulación de sales en el suelo, lo que puede dañar las raíces y manchas en las hojas.
Poda y limpieza de las hojas
La poda no es complicada y ayuda a mantener la planta en óptimas condiciones:
- Retira hojas secas, dañadas o amarillas cortándolas en la base con tijeras limpias y desinfectadas.
- Limpia periódicamente el polvo de las hojas con un paño húmedo, evitando productos químicos. Así, mejorarás su respiración y aspecto general.
Multiplicación y trasplante
Las Goeppertias y Calatheas se multiplican de forma sencilla por división de mata durante la primavera.
- Saca la planta de la maceta, separa con cuidado los rizomas y planta cada sección en una maceta individual con sustrato fresco.
- Es recomendable esperar al menos 15 días para trasplantar después de introducirla en un nuevo entorno y permitir su adaptación.
- Trasplanta cada uno o dos años, cuando las raíces colonicen toda la maceta o el crecimiento se estanque.
Prevención de plagas y enfermedades en Calathea y Goeppertia
Como toda planta, las Calatheas pueden verse afectadas por plagas y enfermedades. Los problemas más comunes incluyen:
- Ácaros, trips y cochinillas, visibles como puntitos o manchas en el envés de las hojas. Usa jabón potásico o aceite de neem cada 20 días como medida preventiva.
- Pulgones u hongos, que pueden aparecer si hay exceso de humedad o mala circulación de aire. Trata con insecticidas específicos o fungicidas.
- Limpia las hojas al menos una vez al mes para evitar la acumulación de polvo y la aparición de plagas.
- Utiliza tierra de diatomeas diluida en agua para reforzar la prevención.
Las Calatheas y Goeppertias nos invitan a convertir el hogar en un pequeño rincón de selva. Con el cuidado adecuado y un poco de paciencia, disfrutarás durante años de sus impresionantes colores y de su carácter único. Si combinas humedad, luz indirecta, riegos controlados y un ambiente cálido, tu planta te recompensará con un follaje vibrante y saludable.
