Imagen – Wikimedia/David J. Stang
Las plantas crasas o suculentas no cactáceas son muy fáciles de cuidar, pero hay algunas, como la hierba callera, que es además muy interesante por sus propiedades medicinales. De hecho, es una de esas que no pueden faltar en ningún jardín medicinal, especialmente si estás interesado en los cuidados de plantas medicinales que favorecen la salud. Además, conocer sobre hierbas provenzales puede complementar tu jardín.
Su mantenimiento no es nada complicado, incluso se puede multiplicar fácilmente por esquejes. Descúbrela.
Origen y características
Imagen – Wikimedia/Prazac
La hierba callera, también llamada curalotodo, hierba callera rosa, anacansero común, fabaria, hierba de los callos, matacallos u orpina, es una planta crasa originaria de las regiones montañosas de Europa central y meridional. Su nombre científico es Sedum telephium, y alcanza una altura de 30 a 60 centímetros, con porte erguido. Las hojas son planas y carnosas, de color azul verdoso, alternas y con el margen dentado.
Sus flores se agrupan en inflorescencias que brotan de tallos terminales, y son de color púrpura o blanco. Posee una raíz carnosa que forma diversos tubérculos pequeños en forma de nabo de color grisáceo. Esta planta se adapta bien a varios suelos, incluyendo los que se pueden encontrar en el jardín, y es ideal para quienes buscan plantas de fácil mantenimiento. Para aquellos interesados en conocer más sobre cómo eliminar hierbas no deseadas, también resulta útil.
Propiedades
Sus hojas aplicadas directamente sobre la zona sirven para tratar llagas y heridas, además de como cicatrizante y callicida (ablanda los callos). Por si fuera poco, es astringente y, una vez quemada, sirve como insecticida. Estas propiedades la convierten en una opción perfecta para quienes buscan tratamientos naturales en jardines medicinales. También puedes descubrir más sobre la hierba luisa y sus beneficios.
¿Cuáles son sus cuidados?
Si quieres tener un ejemplar de hierba callera, te recomendamos cuidarlo de la siguiente forma:
- Ubicación: ha de estar en el exterior, a pleno sol para asegurar su crecimiento óptimo.
- Tierra:
- Maceta: puedes usar sustrato de cultivo universal mezclado con perlita a partes iguales, lo que favorece el drenaje.
- Jardín: crece en suelos fértiles con buen drenaje. Teme el encharcamiento, por lo que es importante seleccionar el sustrato adecuado.
- Riego: se ha de regar unas 3 veces por semana en verano y una a la semana el resto del año, siguiendo las pautas de riego para suculentas. Si estás interesado en más información sobre el riego, consulta sobre la hierbabuena y sus cuidados.
- Abonado: es aconsejable abonar en primavera y verano con abonos específicos para cactus y otras suculentas siguiendo las indicaciones especificadas en el envase, o bien con una cucharada o dos pequeñas de nitrofoska azul cada 15 días. Una mejor comprensión sobre el abono de césped puede ser útil para aplicar al suelo donde crece la hierba callera.
- Multiplicación: por semillas y esquejes de tallo en primavera-verano, lo que facilita su propagación.
- Rusticidad: resiste el frío y las heladas de hasta los -3ºC, lo que la hace resistente a climas diversos.
¿Qué te ha parecido esta planta?