Por lo general, cuando vemos una planta que tiene las hojas de otro color, solemos preocuparnos, ya que puede ser que le esté faltando algún nutriente. Pero hay varias especies, como el Ficus ingens, que el rojo que adquieren sus hojuelas nuevas no es signo de problemas, sino que es más bien una medida para que los insectos no se las coman.
Si quieres saber más sobre este magnífico árbol, a continuación te voy a hablar sobre él.
Origen y características
Imagen – todo-ficus.net
Nuestro protagonista es un árbol perennifolio originario de las regiones tropicales o subtropicales secas de África y del sur de Arabia. Su nombre científico es Ficus ingens, aunque popularmente se le conoce por el nombre de higuera de hojas rojas. Alcanza una altura de 15 metros, y sus hojas son lisas, coriáceas, de color rojo-marrón cuando son jóvenes y verde apagado cuando maduran. Estas miden 16,5 por 8,5cm. En otoño, las más viejas se vuelven de color rojizo.
El fruto es un higo casi esférico que mide 0,9 por 1,2cm de diámetro, y es de color púrpura o marrón amarillento cuando madura. Es comestible.
¿Cuáles son sus cuidados?
Si quieres tener un ejemplar, te recomendamos proporcionarle los siguientes cuidados:
- Ubicación: exterior, a pleno sol. Se ha de plantar a una distancia de 7 metros como mínimo de cualquier construcción.
- Tierra:
- Jardín: ha de ser fértil, con buen drenaje.
- Maceta: sustrato de cultivo universal mezclado con perlita a partes iguales.
- Abonado: desde comienzos de primavera hasta finales de verano con abonos ecológicos una vez al mes.
- Multiplicación: por semillas o esquejes en primavera.
- Época de plantación: a principios de primavera.
- Rusticidad: no soporta el frío y las heladas. Para estar bien necesita que la temperatura mínima no baje de los 0 grados.
¿Qué te ha parecido la higuera de hojas rojas? ¿La conocías?