Si te gusta coleccionar suculentas, tienes que conocer la Kalanchoe tomentosa y sus variedades, porque estamos seguros de que te vas a enamorar de ella. Puedes encontrarla también como “Planta de Panda” o, más comúnmente, “Oreja de Gato”. Tiene unos orígenes bastante lejanos, ya que procede nada menos que de Madagascar. Esos divertidos apodos le vienen de su apariencia, porque tiene hojas gruesas y peludas que recuerdan a las orejas del minino. No obstante, hay diferentes variedades de esta planta y, por eso, hemos preparado este artículo, para mostrártelas todas.
No te arrepentirás de leer este post, porque estamos convencidos de que querrás tener más de una de las variedades de la Kalanchoe, ya que son preciosas y la mar de curiosas. Tienen tantas formas y colores que es difícil decantarse solo por una de ellas y querrás completar la colección.
Kalanchoe blossfeldiana
La Kalanchoe blossfeldiana es resistente y, por lo tanto, una buena opción para tener en casa. Es una planta de interior, así que si estás buscando alguna que alegre tus rincones favoritos. Si la quieres para tu jardín, dependiendo de cómo sea el clima de tu zona, podrías intentarlo, teniendo en cuenta que es una planta tropical que no soporta las heladas.
Te encantarán las hojas de color verde intenso y con los bordes dentados que tiene la blossfeldiana. Además, si recibe mucha luz, estos bordes pueden ponerse con un bonito tono rojizo, haciendo la planta más llamativa y bonita.
Puede tener una altura de unos 30 centímetros y su frondosidad hace que parezca un pequeño arbusto que se ve adornado con flores también pequeñas que pueden ser de colores blancos, amarillos, naranjas y rosas.
Kalanchoe Tomentosa
De la Tomentosa ya hemos descrito anteriormente sus características, pero dentro de ella hay algunas variantes que merece la pena conocer más en profundidad.
Kalanchoe tomentosa ‘Chocolate soldier
La variedad de Kalanchoe tomentosa “Chocolate soldier” tiene hojas de color tostado. Se la llama también “Kalanche soldado de chocolate” y tiene unos pelitos blancos que contrastan con ese tono tostado de los bordes que lucen como motas en sus hojas verdes.
Las hojas son ovaladas y recuerdan al aspecto del chocolate, de ahí su nombre. Cuando echa flores, lo hace con pequeñas florecillas de color amarillo.
Tomentosa nigrum
La Tomentosa nigrum puede alcanzar el metro de altura y tiene hojas aterciopeladas. Es una planta que puede perder sus hojas cuando llega el invierno, pero no te preocupes, porque cuando llegue el buen tiempo volverá a recuperar su belleza.
Kalanchoe Tomentosa «Cinnamon”
Otra de las variedades de la Kalanchoe tomentosa es la cinnamon. Se llama así porque desprende un olor que recuerda a la canela. Las hojas tienen tonalidades entre plata y marrón y la buena noticia es que la puedes disfrutar en tu casa o jardín, porque resiste bien las distintas condiciones climáticas, sin perjuicio de que sobreviva mejor en climas tropicales, por su propia naturaleza.
Kalanchoe Tomentosa «Silver Panda»
Siguiendo los patrones de la Kalanchoe tomentosa, la Silver Panda se diferencia en que sus hojas tienen patrones plateados, lo cual le infiere una elegancia especial. Unido, por supuesto, a sus características motas marrones y su pelusilla. Es una variante sofisticada de la Kalanchoe Tomentosa.
Kalanchoe Tomentosa «Chocolate Cherry»
Se la llama así porque, por sus tonalidades, nos recuerda a una barra de chocolate y cerezas maduras. El chocolate lo representarían las motas marrones que salpican las bonitas hojas verdes dentadas y velludas del Kalanchoe. Y las cerezas, por su borde rojo de esta tonalidad que presentan las hojas. Invitan a darle un mordisco. Aunque mejor reprimirse y disfrutar del espectáculo visual y aromático que nos regala su apariencia.
¿Quieres que tu Kalanchoe tomentosa luzca espectacular?
Querrás que tu Kalanchoe tomentosa luzca perfecta y crezca sana, independientemente de la variedad que elijas. Por eso, no podemos despedir este post sin mostrarte cuáles son sus cuidados básicos.
El Kalanchoe necesita mucha luz, pero que no le venda directamente del sol, porque es delicada y el sol fuerte podría quemar sus hojas.
¡Cuidado con el riego! Al tratarse de una suculenta, acumula agua en sus hojas y, por eso, no debes regar hasta que veas que su tierra ya se secó. Pues el exceso de agua la perjudica. Por la misma razón, debe tener un buen drenaje, para evitar que el agua pudra las raíces.
Es una planta que no soporta las temperaturas extremas, así que salvo que vivas en un clima cálido, con temperaturas de entre 18 y 27º, es preferible que no te decantes por esta especie.
Si quieres verla crecer con el máximo vigor, puedes añadirle, cada dos meses, un poco de fertilizante para suculentas durante primavera y verano para que crezcan más bonitas y con mejor color.
¿Por qué tener una Kalanchoe tomentosa en casa?
Tener una Kalanchoe tomentosa nos ayuda a llenar nuestra vivienda de color, energía y buenas vibras. Se trata de una planta curiosa que presenta colores muy variados y que son, en verdad, fáciles de cuidar. Como suculenta, no exige un riego continuado, de modo que puedes irte de vacaciones y dejar tu planta varios días sin preocuparte por su riego, porque sus hojas almacenan agua para tiempos de escasez. Es su propia naturaleza que favorece a aquellas personas que aman las plantas pero que no son muy expertos en su cuidado o que no tienen mucho tiempo para dedicarles.
Además, las suculentas están de moda y alegran la mesa de trabajo, la ventana de tu cocina o la encimera. También puedes colocarla en tu balcón o terraza, siempre y cuando las condiciones climáticas se parezcan mínimamente a un clima tropical.
Hay que sumar, aparte, los beneficios que estas plantas tienen para la salud. Porque una Kalanchoe, además de su peculiar belleza, son un excelente remedio para combatir el dolor de cabeza, la negatividad y la tristeza.
Si nos centramos en sus propiedades medicinales, hay que decir también que tiene propiedades antiinflamatorias.
La Kalanchoe Tomentosa y sus variedades son una alternativa fantástica a otros tipos de plantas más complejos, para llenar nuestros espacios de color, de vida y de pequeños pulmones verdes. ¿Te apuntas a la moda?