Esta es una de las pocas flores que florece todos los días del año y es considerada como una planta de jardín. La Lantana es un arbusto pequeño, pero que se ramifica muy rápido y de manera frondosa, generalmente alcanza una altura de entre uno o dos metros.
La Lantana presenta un olor característico, su aroma es penetrante y sus tonos variados entre naranja y amarillo; rosa o malva brillante la identifican a simple vista. Sus hojas son simples, pero a la vez ásperas, rugosas y con el borde dentado.
Esta planta es conocida con diversos nombres, pero su nombre científico es Lantana camara, aunque popularmente es muy posible que la llamen simplemente lantana o camara, bandera española, flor de duende, tres colores y muchos más.
La Lantana a simple vista es hermosa por su follaje brillante, su aroma delicado persistente, capaz de desarrollarse con mayor rapidez en climas suaves y cálidos, no así en temperaturas menores, en pocas palabras es una planta bastante resistente a la sequía del verano.
Pero, ¿cuáles son los orígenes de esta planta reconocida como hermosa por las degradaciones de sus tonos y colores? Es originaria de América Central, de Sur y Sudamérica y caracterizada como un arbusto persistente.
No es exigente en cuanto al tipo de suelo donde puede llegar a ramificarse, es resistente a la sequía, requiere además de poco riego pero si de sol para florecer. Ofrece una floración extensa y a medida que crece los matices de sus colores generan cambios entre rojo, amarillo, rosa, lila y blanco.
Para plantarla se debe escoger fechas entre marzo hasta mayo y después de las últimas heladas, para que pueda florecer en época de verano, por lo que es recomendable que crezcan en un lugar cálido y brillante lo que puede contribuir a un desarrollo acelerado.
¿Cómo plantarla?
En un campo abierto y para que pueda mantener su especial y hermosa floración, utiliza un suelo rico, abonado y bien drenado, así que sigue los siguientes pasos:
- Cava un hoyo ancho
- Extiende una capa drenante de grava
- El suelo debe estar abonado y enriquecido
- Necesitará además agua abundante.
Esta planta es también ideal para crecer en un maceta como de unos 30 cm, utiliza arena nutrida y riega regularmente. Hay algunos trucos infalibles para sembrar esta planta y entre ellos se encuentran los siguientes:
- Sumergir la semilla durante 24 horas en un vaso de agua tibia antes de sembrar.
- Enterrar las semillas hasta algo menos de tres milímetros de profundidad.
- Colócalas en lugares con temperaturas cálidas
- Riega de manera moderada.
La Lantana es definitivamente resistente a la sequía y en el primer año de plantación necesita de muy poca agua. Al llegar el invierno y si se desea mantener esta planta, entonces es necesario guardar las macetas en un invernadero claro con temperaturas entre 10 a 15 °C, podrás sacarla gradualmente a medida que vayan calentando las temperaturas.
¿Cuándo y cómo cortarla?
Es preciso proporcionar algunos cuidados, pudiendo comenzar en el siguiente orden:
- Retirar las flores marchitas, durante el verano, para que puedan nacer nuevas.
- Cortar con los dedos los extremos, durante la primavera para que se estimule su crecimiento
- Eliminar tallos que puedan comprometer su belleza
Plagas
La Lantana rara vez se enferma, pero dentro del invernadero puede llegar a ser algo sensible a las moscas blancas que pueden afectar las hojas de la parte inferior, por lo que se recomienda lavar con agua jabonosa. Y si hay manchas marrones, estas pueden ser ocasionadas por los ácaros rojos, siendo la solución quemar, cortar y rociar agua constantemente debajo de las hojas y tallos.
Particularmente hermosa, de tonos y matices brillantes, la Lantana puede llegar a florecer en diferentes jardines, y debido a sus peculiares colores da la sensación de alegría, además que da un toque de elegancia, decoración y hasta son consideradas como plantas exóticas.
Debido a sus pocas exigencias para su reproducción es muy buscada, necesita un clima templado para florecer en grandes cantidades, resiste a la sequía además de ser hermosa y radiante a la vista.
En definitiva, la Lantana es una de las flores más brillantes, con diversas tonalidades, fácil de plantar, de cuidar y poco exigente en su propia naturaleza ideal para adornar cualquier jardín.