El Nogal es el árbol de las nueces que puede alcanzar una altura de 30 o 40 metros. Las flores surgen en primavera junto con las hojas, siendo estas flores de color verde no muy bonitas, desde mi punto de vista. Tras las flores, aparecen los frutos. Las nueces aparecen recubiertas de una capa verde. Este fruto verde va engordando hasta que con el paso del tiempo y llegado el otoño, se caiga del árbol sin su cubierta verde. Dentro de esta cubierta verde se encuentra otra capa marrón de madera y dentro de esta está el fruto comestible.
Es fácil cultivarlo y cuidarlo. Para reproducir este árbol se puede hacer mediante semillas en otoño, siendo las semillas el fruto del árbol. No requiere grandes cantidades de agua y soporta mucho el frío. Además el suelo debe estar bien drenado.
El Nogal es uno de los mejores árboles que existen, pues todos sus componentes son muy buenos y se aprovechan para diversas funciones.
La madera del Nogal es muy demanda en las carpinterías, pues es una madera resistente.
Las hojas del Nogal tienen propiedades curativas, se recogen en junio. La infusión de las hojas de Nogal es buena contra los trastornos digestivos como el estreñimiento, purifica la sangre y es bueno contra la diabetes. Los enjuagues bucales ayudan contra las afecciones de las encías y la garganta.
El fruto, la nuez, es comestible y muy nutritivo. Es buena para el corazón, para la circulación, para reducir el colesterol y contra la caída del pelo. Además tiene Vitamina E y Vitamina C, omega 3 y omega 6.
Más información – El crecimiento de los árboles frutales.
Sé el primero en comentar