Cuando hablamos del orégano queremos hacer referencia a la planta, puesto que hay muchas personas que ven al orégano más como un sabor y no como una planta en particular, además de la gran confusión masiva entre el orégano y la mejorana.
Así que el fin de este artículo es dar la información más preciada e importante de esta planta y además de eso, manejar al máximo su cultivo y cosecha, es por eso que el día de hoy, comenzaremos con lo que hay que saber sobre el cultivo del orégano y de la planta misma en sí.
Primero para poder obtener el orégano verdadero, se deberá plantar el griego, puesto que esta planta posee muchas variaciones y el pionero de todos es el anteriormente mencionado. Las hojas que da el mismo al germinar son de color verde grisáceo, posee flores pequeñas de color púrpura o blanca.
¿Cómo se cultiva el orégano?
Pasemos directamente al cultivo del mismo que es el encargado de reproducirse por semillas o de vez en cuando por estacas, aunque cabe destacar que las plantas obtenidas por las semillas no serán en particular idénticas a las semillas madres, es por eso que se sugiere claramente que se cultive por estacas, debido a que las misma siempre son extraídas de plantas con un sabor bastante fuerte y de alta calidad.
Si es por semillas, se debe colocar en la parte superior de la parte media del cultivo, después se debe aplastar sobre la superficie pero sin hundirlas demasiado, puesto que las semillas necesitan el contacto directo con el sol para poder germinar, además de estar húmedas para completar su proceso, si llega la etapa de invierno en donde interviene el clima frio, es recomendable utilizar un ramo de paja o de agujas de siempreverde y colocarlo encima de las semillas para que puedan sobrevivir al frio, cuando la planta retome su crecimiento normal se puede acceder a quitar la cubierta.
¿Cuándo recoger el orégano?
Ahora hablemos de la cosecha de esta planta, la cual puede iniciar sin ningún problema alguno justo después de que la planta haya florecido y para poder cosechar se debe cortar de manera cuidadosa los extremos de los tallos, dejando siempre un promedio de cuatro y seis pares de hojas para que la planta pueda producir sus brotes laterales de nuevo, con este consejo la planta optará por ser más compacta.
Después de esto empieza un proceso cuidadoso donde los tallos cortados se deben colocar en un lugar fresco, seco, oscuro y bien ventilado, esto se aplica para que las hojas puedan secarse y ahí es donde se concentrará el sabor máximo del orégano, después se debe colocar en un recipiente hermético.
El orégano se utiliza en una extensa gama de variedades de comidas tanto rápidas como bien preparadas, el mismo se ha convertido en uno de los condimentos para los alimentos más puros y que llenan de sabor a la comida, sus usos más básicos son en las salsas, platos a base de tomate, pizza, comida mexicana, ensaladas y sopas. Además que si hablamos por la parte de la salud, el orégano contiene vitaminas A, C, E y K, como también posee fibra, folato, hierro, calcio, potasio, magnesio y vitamina B6.
Se sabe que al colocar el orégano en las carnes antes de prepararlas podría ayudar directamente a reducir su cantidad de compuestos tóxicos creados por el proceso de cocción, también el aceite esencial del orégano podría funcionar adecuadamente para tratar enfermedades respiratorias como gripe resfriado y uno de los beneficios más importantes es que posee efectos que combaten contra el cáncer.
Esto es todo lo que tienes que saber con respecto al orégano griego, que es el pionero de varias clases y las cuales cada una posee sus características y sabores diferentes.