Es uno de los árboles más hermosos del planeta y también uno de los más curiosos, con sus grandes hojas acorazonadas y sus excepcionales flores de color blanco, que lo convierten en una pequeña maravilla de la naturaleza.
El Árbol de los Pañuelos es una de las especies más originales y espectaculares del mundo, una especie de características únicas que despierta la atención de quien se encuentre cerca de su órbita. Es un árbol ornamental digno de disfrute y admiración, originario de China y muy especial, por cierto.
Árbol de ensueño
Ideal para disfrutar durante el mes de mayo y a lo largo del verano, el Árbol de los Pañuelos, también es conocido como Árbol de las Palomas, nombres que remiten a las características flores blancas que cuelgan durante la época de floración.
Es originario del sur de China y su nombre científico es Davidia Involucrata. Es un árbol de tamaño generoso que puede alcanzar una copa de hasta 25 metros, muy amplia además, aunque su tronco es corto.
Las hojas son similares a las de los Tilos pues son largas, simétricas, ovaldas y acorazonadas, pudiendo alcanzar hasta 20 cm de largo y 7 cm de ancho. Presentan nervaduras muy marcadas y largos pecíolos además de una pelocidad blanquecina en la parte posterior de las mismas.
Sin embargo, lo más llamativo sin dudas son sus flores que, a diferencia de la gran mayoría, se presentan en grupos compactos, presentan un centro rojizo y dos brácteas, hojas o pétalos totalmente blancas de entre 12 y 25 cm de largo que se asemejan pañuelos o alas de paloma. Una de las brácteas es más grande que la otra y si bien cuando está en floración el árbol es un espectáculo visual hay que ser pacientes pues demora entre ocho y diez años en tener su primera floración.
Cuidados del árbol
El Árbol de los Pañuelos también presenta unos frutos comestibles de forma ovalada que van cambiando de color de acuerdo a la temporada, primero son verdes, luego morados para finalmente virar hacia un marrón oscuro llegado el otoño.
La Árbol de los Pañuelos pertenece a la familia Cornaceae y fue descubierto por un misionero franciscano llamado Padre Armand David. Fue a partir de su apellido que nació su nombre en latín.
Es un árbol de crecimiento rápido que no es común encontrar en las ciudades dado que es muy sensible a la polución. La especie necesita vivir en lugares amplios y con aire limpio.
En cuanto a sus necesidades, necesita la exposición al sol y prefiere no tolera los suelos calcáreos o muy húmedos. Por eso mismo el riego debe ser moderado. Es un árbol resistente y realmente hermoso que soporta bien las bajas temperaturas y no presenta mayores contradicciones fuera de las ante mencionadas.
Si viajas al sur de China levanta la vista y observa a este maravilloso árbol que tiene una originalidad única y una belleza muy particular.