Aunque en Europa todavía no es muy conocido, el nance o nanche es un fruto que se consume mucho en México, donde los principales estados productores son Guerrero, Nayarit y Michoacán.
Vamos a aprender un poco más sobre él y sobre el árbol que da estos frutos de sabor agridulce que destacan también por su fuerte aroma.
Nance, un fruto con muchos beneficios nutricionales
El nance es un fruto tropical que tiene su origen en América Central y del Sur, especialmente en México. Como decíamos antes, se caracteriza por su sabor agridulce y su aroma intenso.
Se trata de una drupa muy similar a una pequeña ciruela, con forma redondeada y piel lisa. Una vez que ha madurado su color oscila entre el amarillo y el naranja. En su interior nos encontramos un hueso grande y duro, por lo que hay que tener cuidado al morderlo.
Tiene un sabor que combina lo dulce y lo ácido, con un toque ligeramente resinoso y una textura carnosa.
Al ser un fruto de temporada solo se puede disfrutar de él entre los meses de abril y finales de mayo o principios de junio.
Está ganando una gran popularidad fuera de su lugar de origen porque es muy rico en propiedades nutricionales. Le aporta al organismo:
- Vitaminas C, E y algunas del complejo B.
- Minerales como el hierro, el fósforo, el potasio y el magnesio.
- Fibra que contribuye a mejorar las digestiones y el tránsito intestinal.
- Antioxidantes que protegen las células del daño causado por los radicales libres.
¿Qué usos se le dan al nance?
Este es un fruto muy versátil que puede estar presente en diversas preparaciones culinarias.
Se puede consumir directamente como una fruta fresca, pero también es apto para añadirlo a licuados en combinación con otras frutas o verduras.
En México es bastante común emplearlo en la preparación de mermeladas o compotas para aumentar su conservación. Además, es un ingrediente común en la elaboración de tepache, una bebida fermentada tradicional mexicana.
Al margen de por sus propiedades nutricionales, el nance es popular también porque se le atribuyen propiedades medicinales por su efecto diurético y su poder antiinflamatorio.
¿Cómo se cultiva el nance?
Este fruto nace en un árbol tropical llamado Byrsonima crassifolia, que puede medir entre nueve y 20 metros de altura.
Es un árbol de hojas simples, alternas y de forma elíptica, con un color verde bastante intenso. Sus flores, de color amarillo, no son demasiado vistosas de por sí, porque son de pequeño tamaño, pero sea agrupan en racimos y esto hace que resulten más visibles.
Una de sus características más destacables es que en este caso la polinización se produce a través del proceso de cleistogamia. Esto significa que la flor se fecunda a sí misma antes de abrirse. El polen se transfiere de la antera al estigma dentro del mismo botón floral, así que no requiere de agentes externos como el viento o los polinizaciones.
Esta es una adaptación evolutiva de gran valor, porque ha permitido al árbol del nance colonizar diversos hábitats y garantiza que su producción de frutos será elevada.
De hecho, un Byrsonima crassifolia es capaz de producir entre dos mil y cuatro mil frutos por cosecha. Estos se recogen a mano y se depositan en canastos con cuidado de que no se estropeen por recibir golpes.
El árbol de nance crece de forma silvestre en zonas tropicales de América, especialmente en bosques secos, sabanas y áreas perturbadas. Debido a su gran capacidad de adaptación, puede crecer en diferentes tipos de suelos y condiciones climáticas.
Además de por su fruto, este árbol resulta interesante porque su madera es dura y resistente, lo que la hace perfecta para la construcción de muebles y herramientas. Por otro lado, su atractivo follaje lo convierte en una buena elección para jardines y parques.
Cuidados del Byrsonima crassifolia
Dentro de los diferentes árboles frutales exóticos que podemos tener en el jardín, este es una buena elección, porque es relativamente sencillo de cuidar y lo podemos propagar tanto a través de semillas como de esquejes.
Si quieres hacerle un hueco en tu casa, esto es lo que necesitas saber sobre él:
Ubicación
El nance es un árbol que necesita mucho sol, como mínimo de seis a ocho horas cada día. Porque cuanto más sol directo recibe más florece y más frutos produce.
Lo mejor que puedes hacer es plantarlo en un lugar abierto y soleado, y él te recompensará con miles de sus frutos.
Suelo
Necesita un suelo entre ligeramente ácido y neutro, que tenga una buena capacidad de drenaje y que sea rico en materia orgánica para disponer del alimento que necesita para poder crecer.
Riego
La frecuencia de riego va a depender tanto del clima como del tipo de suelo, pero lo que te aconsejamos es que siempre le des agua con moderación. Es preferible que riegues más a menudo antes de que encharques el suelo.
Temperatura
Este es un árbol tropical, así que lo va a pasar mal si en tu zona los inviernos son duros, porque no resiste las heladas.
El Byrsonima crassifolia es una opción para tu jardín si vives en una región con inviernos cálidos y, aún así, puede ser buena idea cubrirlo durante esos días que son especialmente fríos.
Poda
Crece muy rápidamente si está expuesto a unas buenas condiciones ambientales, así que además de las podas sanitarias tienes que realizar podas para darle forma.
Lo prioritario es que la poda esté dirigida a favorecer la entrada de luz al interior de la copa, porque así estimulas una mayor floración y fructificación.
Cosecha
Este árbol da muchos frutos, pero la maduración es escalonada y no puedes recoger la cosecha de una sola vez. Cuando veas que los nances están maduros al tacto y su color amarillo sea intenso, entonces los puedes retirar.
El nance es un fruto que te va a sorprender tanto como la belleza del árbol del que procede. Ya has visto que no es nada exigente en cuanto a cuidados, así que puede ser una buena elección para tu jardín si en tu zona no hace demasiado frío.