Peperomia prostrata: características y cuidados necesarios

Peperomia prostrata

Si estás buscando una planta de interior que tenga un toque exótico y al mismo tiempo que no sea demasiado difícil de cuidar, entonces la Peperomia prostrata es lo que estabas buscando.

Se trata de una de las suculentas más atractivas que hay y llama mucho la atención por su forma (y los cuidados). ¿Quieres saber más de ella? Entonces sigue leyendo.

Cómo es la Peperomia prostrata

detalle de las hojas

La Peperomia prostata es una planta que se considera rastrera. Su hábitat natural no está muy relacionada con la de las suculentas, sobre todo porque, aunque proviene de Centroamérica y de Sudamérica, vive en los bosques húmedos y le encanta la humedad. De hecho, suele crecer apoyándose en los troncos de los árboles, de ahí que se diga que es una planta epífita.

Físicamente tenemos una planta que saca largos tallos de color verde o crema de los que salen las hojas, estas redondas y de distintos tamaños. Pero lo más bonito de la planta es, sin duda, el patrón de estas, ya que tiene varias tonalidades de verde (o verde y blanco) que llaman muchísimo la atención.

Es bastante frondosa, y de ahí que, cuando se tiene en una maceta, sea habitual que esta acabe cubierta por esos tallitos que caerán en cascada con las «moneditas» de hojas similares a la piel de una sandía.

Otro de los nombres por los que se conoce la planta es «cadena de tortugas», debido a que se dice que el dibujo de las hojas parece el caparazón de estas.

Y sí, si te lo estás preguntando, la Peperomia prostrata florece. Aunque las flores son bonitas, lo cierto es que las hojas lo son más. Aun así, estas flores son de color rojizo (más tirando al marrón).

Cuidados de la Peperomia prostrata

esta planta necesita humedad para mantenerse saludable

¿Ya te ha enamorado la Peperomia prostrata? Sin duda es una planta que, cuando la ves, la quieres tener en casa. Y siendo como una suculenta, es fácil de mantener, si bien tiene algunos cuidados que debes proporcionarle para que salga adelante.

Aquí te resumimos los más importantes de todos.

Ubicación y temperatura

La ubicación ideal de la Peperomia prostrata es, sin duda, el exterior, siempre que vivas en una zona donde el clima en invierno sea templado y en verano cálido. ¡Le encanta el sol! Eso sí, no lo pongas donde le dé el sol directo o donde el ambiente esté muy seco porque entonces no sobrevivirá.

Lo mejor es colocarla en un lugar con semisombra y mucha luz indirecta.

También puedes colocarla dentro de casa, aunque en ese caso busca el mejor lugar donde haya humedad (una cocina, un baño…) para que obtenga el hábitat que necesita.

En cuanto a la temperatura, lo ideal para esta planta estaría entre los 18 y los 25ºC. Dentro de casa no es difícil ofrecerle esa temperatura, pero fuera sí puede serlo, sobre todo en verano, por lo que requerirá de humidificador o similar para controlar la humedad ambiental.

Sustrato

Como la Peperomia prostrata es una planta que necesita humedad, y mantener la tierra así, vas a necesitar plantarla en una tierra con buena materia orgánica. Apuesta por una mezcla de turba con fibra de coco, siendo la proporción 70-80 / 20-30% respectivamente. Así conseguirás que tenga un sustrato ligero.

Como consejo, asegúrate de que la turba sea algo ácida, le encantará.

Riego

Tal y como te hemos dicho antes, la Peperomia prostrata es una planta que adora la humedad. Así que mantenérsela en el sustrato es algo imprescindible. Ahora bien, hay una fina línea entre la humedad y el exceso. Y si no mantienes el equilibrio lo único que consigues con ello es que se pudra (notarás que las hojas empiezan a volverse transparentes, como si estuvieran empapadas y empiezan a caerse todas hasta que la planta muere).

De hecho, cuando pensamos en humedad tendemos a pensar que la Peperomia prostrata necesita el sustrato siempre mojado y lo cierto es que no es así. Lo que necesita es humedad ambiental.

Por eso, si la tienes en el exterior, puedes regarla 2-3 veces a la semana en primavera y verano; mientras que en invierno con uno a la semana es suficiente.

Dentro de casa quizá haya que espaciar un poco más el riego.

Abonado

Peperomia_rotundifolia muy parecida

De vez en cuando, sobre todo si la planta ya tiene tiempo con el mismo sustrato, puedes echarle algo de fertilizante para darle más nutrientes. Uno muy enriquecedor para esta planta es el humus líquido, que puedes echarlo en el agua de riego y aplicarlo.

Eso sí, úsalo solo en primavera o verano.

Ahora bien, si ves que la planta tiene las hojas amarillentas y que lleva tiempo sin crecer, entonces recurre a un abono que sea rico en nitrógeno porque lo está demandando.

Poda

Realmente la Peperomia prostrata no es una planta que haya que podar. Pero, para mantener los tallos a la misma altura todos sí que muchos los cortan para conseguir que esté todo parejo. Eso sí, ten en cuenta que esos cortes te pueden servir para sacar nuevas plantas.

Plagas y enfermedades

Como planta exótica que es, además de suculenta, la Peperomia prostrata es una planta susceptible de las plagas. Concretamente la que más daño puede causarle son las cochinillas. Si las ves, te recomendamos que pulverices la planta con aceite de Neem y jabón potásico, y que lo hagas una vez al mes por lo menos como prevención para que no se acerquen.

Otra opción que también funciona muy bien es usar tierra de diatomeas que puedes mezclar en una pequeña proporción con el sustrato de la planta (o colocarla como capa superior).

Multiplicación

Finalmente, en cuanto a la propagación, debemos decirte que es algo que te recomendamos hacer nada más compres tu planta (si está grande, claro). Y es que, al ser tan exigente, te puedes quedar sin ella fácilmente.

Primero, corta unos esquejes de tallos con hojitas. Resérvalos y busca un recipiente que sea hermético. En él pon el sustrato como base y encima un poco de piedras finas. Rocía para mojarlo todo y, a continuación, pon los esquejes sobre las piedras. No hace falta que los plantes, solo con ponerlos es suficiente.

Vuelve a pulverizar y cierra para que no se escape la humedad.

Has de ponerlo en un lugar que le dé luz, pero sin que se caliente en demasía. En cuestión de semanas deberían haber enraizado y estar listos para trasplantarlos en macetas.

¿Te queda alguna duda sobre la Peperomia prostrata?


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