Fotonia (Photinia Red Robin)

La Photinia Red Robin es un arbusto que despliega un colorido que encenderá el aspecto del jardín y tiene un sinfín de características que la hacen conveniente, entre las que están su resistencia a diferentes climas y un cultivo fácil. Un arbusto que se cultiva en todo el planeta y tú también lo puedes tener en tu hogar.

Cuando nos referimos a la Photinia, no hablamos solamente de la especie en la que hoy profundizaremos, sino que existen una gran cantidad de especies dentro de su familia. Estas son por lo general arbustos o árboles de poca estatura que se pueden encontrar en diferentes tipos, entre las cueles destacan las de hoja caduca y las de hoja perenne.

Origen y distribución

Los lugares característicos donde crece este arbusto de manera natural es en oriente, más precisamente en Tailandia, India y Japón. Esta especie se desarrolla con mayor éxito en zonas que durante la mayor parte del año haya climas templados, por lo que suelen ser también algunas zonas del norte del continente americano donde se conocen especies nativas de este arbusto.

La facilidad en el cultivo ha hecho que esta planta originaria de otros lugares, llegue a casi todo el mundo, debido además a su fuerte poder ornamental y su colorido singular, siendo un arbusto y árbol de característica pequeña y muy conocida alrededor del mundo, pero su origen es el de Asia.

Características de la Photinia Red Robin

Pertenece al grupo de las rosáceas, pero a diferencia de estas, no alcanza una altura muy considerable, aunque sí demuestra sus mismas características. Entre los aspectos más importantes que reúne, se puede destacar la resistencia que tienen frente a diferentes inclemencias del clima, demostrando una robustez que las hace una de las más elegidas en el mundo de los arbustos ornamentales.

Esta crecerá en tu jardín de manera redondeada y demostrando una gran cantidad de hojas y flores que la hacen muy compacta. Otra de las características primordiales es su veloz crecimiento, logrando en pocos meses desde su plantación, conseguir un diámetro y una altura de aproximadamente 1,5 metros y en las especies que más grandes se vuelven, llegar incluso a los 3 metros, tanto de diámetro como de estatura.

Una de las características principales de sus hojas es que, a diferencia de las flores, estas se mantienen en la planta durante todo el año mostrando siempre un color verdoso, que se vuelve más brillante en los meses cálidos y se opaca un poco en inviernos o temporadas de baja temperatura.

En sus bordes, las se presentan dentadas y el verde no es el único tono que aparece en ellas, sino que además le verás hojas de color rojo intenso, algo que las hace también muy ornamentales, formando una composición magnífica con las flores y todo el arbusto.

Estos tonos rojos de sus hojas se consiguen en la parte superior de la planta, mientras que hacia abajo, el tono de las mismas se pone mucho más oscuro, formando un degradé que le da un aspecto decorativo que resalta en todo tipo de jardines.

Durante los meses de otoño e invierno, solo le veremos las hojas, pero su florecimiento comienza en la primavera, cuando comenzarán a crecer unas pequeñas inflorescencias cuya forma es básicamente circular y presenta cinco pétalos, que además de ofrecerle otra paleta de color a la planta, también le otorgan un aroma particular.

Estas flores aparecerán durante los meses de abril y mayo y se demuestran muy pequeñas, en contraste con el crecimiento general de la planta. Estas flores también darán lugar a pequeños frutos, cuando ya se estén yendo los calores del verano y comience el otoño.

Estos demuestran en su crecimiento un color azul que contrasta en la amplia composición de colores que presenta y a medida que madura, se irán oscureciendo. Ese será el momento en el que los pájaros comiencen a alimentarse de ellas. Este fruto no es considerado comestible para los seres humanos, pero las aves lo utilizan a menudo como comida.

Reproducción

Es una planta cuya reproducción se consigue de manera muy fácil, tanto por esquejes como por semillas. Los esquejes incluso se pueden obtener desde los restos que se hayan sacado en una poda y crecerán de manera rápida y efectiva.

Las semillas son dispersadas por el excremento de los pájaros, que se han servido de sus frutos, y sus plantas suelen crecer siempre sanas, resistiendo a cualquier tipo de enfermedades o plagas. Esta es la Photinia Red Robin, una planta de las más elegidas alrededor del mundo por sus colores, dándole un aspecto ornamental sin igual.

Cuidados

Seguramente, la Photinia Red Robin crecerá mejor en un jardín en el que hay mucho tiempo de buena iluminación directa por parte del sol, pero no es la única forma en la que esta crece. También lo hará en lugares  donde la iluminación es parcial y hasta puede llegar a crecer, pero de manera un poco menos robusta, en lugares donde solo hay iluminación natural y plena sombra.

Es una planta que crece con gran potencia en tierra fértil y lo que necesitará es que esta tenga una buena capacidad de drenaje, por lo que un compuesto entre tierra y arena será la mejor forma de que esta se desarrolle. Aunque es notorio su mejor crecimiento en suelos de jardín, también la puedes cultivar en macetas, para tenerla en balcones de apartamentos o terrazas.

En los jardines particularmente, forma una composición muy bonita si alrededor de ella tienes cultivadas plantas de flores de colores bien claros o muy oscuros, que en ambas situaciones contrastará con el rojo de sus hojas, dándole a tu jardín un colorido especial.

Será diferente el riego si tienes este arbusto en una maceta o si la tienes en la tierra de tu jardín. En tu maceta, la planta necesitará riegos más regulares, así como también en los meses de mayores temperaturas. En la tierra, las plantas pueden alcanzar con sus raíces zonas más húmedas y cuanta más profundidad alcancen, por lo que no deberán ser tan seguidos los momentos en los que otorgarles agua.