Picea glauca

Hoy vamos a hablar de una planta originaria del norte de Estados Unidos y Canadá. Es una conífera conocida como picea blanca. Su nombre científico es Picea glauca y es una conífera con una forma de pirámide. Tiene un crecimiento lento pero es muy útil para la decoración de jardines, dando un porte más boscoso y denso.

En este artículo vamos a centrarnos en explicar todo lo relacionado con la Picea glauca.

Características principales

Si los cuidados y las condiciones ambientales son las adecuadas, esta planta puede llegar a medir tres metros de altura. Las hojas que tiene son persistentes y de una buena duración. Poseen un color verde cuando son jóvenes y se van oscureciendo conforme se desarrollan y acaban en la etapa adulta.

Las hojas son de tipo perenne, por lo que se mantienen todas las hojas a lo largo del año. Este aspecto es bastante bueno para crear materia orgánica en el suelo donde es plantada y, además, ayuda a evitar la erosión. Las hojas, aunque estén todo el año perennes, se van cayendo y regenerando. Cuando las hojas se van descomponiendo, desprenden sus minerales y nutrientes al suelo de nuevo para ser incorporados por la planta.

El follaje es del mismo color todo el año, incluso en otoño. No es una planta que necesite poda, por lo que los cuidados y mantenimiento son mucho más fáciles. Las semillas de esta planta no atraen para nada a los pájaros, por lo que no es bueno para atraer a fauna a tu jardín. Por un lado, esto tiene ventajas de no atraer a demasiados pájaros ansiosos por comer las semillas.

En cuanto a sus raíces, son bastante pequeñas y ello hace que sea bastante sencillo cambiar el sustrato y sustituirla por otra planta en cualquier momento. No presenta raíces abundante y mucho menos profundas. Es una buena opción si eres de los que le gusta reorganizar el jardín cada 5 o 10 años. Obviamente, al ser un árbol- arbusto de unos 3 metros de altura, no se puede tener en interiores.

Requisitos de la Picea glauca

Temperaturas

Esta planta es resistente a las temperaturas bajas y las heladas por el hecho de habitar en Canadá y el norte de Estados Unidos. En estas zonas, los inviernos son bastante fríos dado que están situados al norte. La picea blanca es capaz de soportar temperaturas de hasta -18 grados, lo cual es perfecto para climas cuyas temperaturas suelan rondar a la baja.

Al igual que resiste bien a las temperaturas bajas, también lo hace a las plagas y enfermedades. Por ello, si tienes esta planta en tu jardín, es poco probable que sea atacada por las plagas más conocidas y típicas de jardines.

Suelo

En cuanto al suelo, no es apta para algunos de los suelos más comunes. Se necesitan suelos con características más seleccionadas para que se pueda desarrollar correctamente. La Picea glauca necesita de suelos arenosos para poder crecer. Los suelos arenosos, como su propio nombre indica, suelen tener gran proporción de arena en su composición. Por ello, no suelen conservar el agua, dado que se drena y evapora con facilidad.

El hecho de que el suelo que necesita esta conífera no pueda retener bien el agua, dificulta algunos de sus cuidados. Se requiere de una precaución y atención mucho mayor para incorporar el agua de una forma continua. Por otro lado, también se necesita un buen drenaje porque la planta no tolera nada de agua almacenada. Esta es la razón por la que no puede crecer en otros suelos. Porque, aunque tenga un buen drenaje el suelo, una textura franca, por ejemplo, no es capaz de drenar el agua a la misma velocidad que un suelo con textura arenosa, como  es en este caso

Fertilidad del suelo y pH

La picea blanca necesita también de suelos fértiles. Un sustrato fértil necesita estar abonado para contar con una gran cantidad de nutrientes esenciales que necesita la planta para poder crecer en buenas condiciones. Este tipo de suelos suele ser el de mejor calidad para la mayoría de las plantas. Sin embargo, aunque no entre en el caso, también hay miles de plantas adaptadas a suelos pobres que no necesitan gran cantidad de nutrientes para crecer adecuadamente.

Otro aspecto del suelo es que debe cultivarse en suelo ácidos. Los sustratos ácidos son todos aquellos donde el suelo tiene un pH menor de 5,5. Normalmente, los suelos ácidos son más complicados para cultivar otras plantas y no suelen resistir dichas condiciones. En el caso de la Picea glauca, necesita de un suelo ácido para crecer. En esta clase de suelos suele escasear algunos nutrientes como el magnesio. Por ello, se hace necesario el abonado para aportarle los nutrientes que le falta y que no tengan ninguna deficiencia.

Suelo más indicado

El suelo más indicado para que la picea blanca crezca en buenas condiciones es el suelo húmico. En este tipo de suelos se encuentran minerales que vienen del carbón. Esto permite que se incremente la retención de agua y nutrientes en el subsuelo y que las raíces puedan aprovecharlos. La permeabilidad del sustrato es alta, por lo que el drenaje y la aireación está garantizados.

La cantidad de riego es algo con lo que hay que tener precaución. Un exceso de riego, aunque se encuentre en suelos húmicos, puede ser amenazante para el desarrollo. Lo que se aconseja es que el agua sea dada en dosis inteligentes. Es decir, si recientemente ha llovido, es mejor asegurarse y esperar a que el suelo termine de filtrar todo el agua y no hagamos que se agolpe el agua de riego.

Ubicación

Por último, pero no menos importante, tenemos la ubicación. Para cuidar de esta conífera tenemos que saber que no soporta el sol directo. Esto lo limita bastante a tener que crecer en sombra y no tener temperaturas muy altas. Lo más aconsejable es que el sol no le dé directo y mucho menos en épocas más calurosas.

Espero que con estos consejos puedas cuidar bien de la Picea glauca aunque tenga requisitos tan exigentes.