Agave attenuata
Las plantas crasas o las suculentas no cactáceas son un tipo de vegetales que se cultiva en las regiones templadas y cálidas del mundo, e incluso en las frías dentro de invernaderos. Su mantenimiento es muy bajo, y como adoptan formas muy diversas, al ser además muy decorativas a menudo se tienen en macetas decorando el hogar, o en el exterior ocupando el espacio de una o varias mesas.
Hay muchísimas especies, y todas ellas son preciosas no, lo siguiente. Así que si quieres adentrarte en este fascinante mundo, en Jardinería On te vamos a mostrar algunas de las crasas más curiosas. Y si aún quieres saber más, tras leer sabrás qué cuidados requieren para verse y estar bonitas todo el año.
Índice
¿Qué son las plantas crasas?
Lithops
Nuestras protagonistas, conocidas como crasas o suculentas no cactáceas, son aquellas que tienen alguna parte que se ha convertido en un almacén de agua. Generalmente, son las hojas, pero pueden ser los tallos y, a veces, ambos. Gracias a esta adaptación, pueden sobrevivir en entornos áridos y secos, donde otras plantas no pueden.
Una de las formas que han desarrollado para absorber el agua procedente del rocío ha sido la producción de unos pelillos que se encuentran en las hojas que lo retienen, que es por lo que algunas tienen un tacto suave, como la Echeveria setosa por ejemplo.
Sin embargo, hay otras que han optado por no crecer demasiado. Cuando un cuerpo es pequeño, necesita menos agua que cuando es grande, por lo que hay especies que son tan pequeñas, como los Lithops, que sobreviven durante días y semanas a la sequía.
¿Cuáles son?
Las plantas consideradas como crasas son aquellas que pertenecen a estas familias:
- Agavaceae: está compuesto por unas 300 especies de crasas cuyo órgano suculento son las hojas.
- Aizoaceae: está compuesto por unas 2000 especies de crasas cuyo órgano suculento son las hojas.
- Apocynaceae: está compuesto por unas 500 especies de crasas, cuyo órgano suculento es el tallo.
- Asphodelaceae: está compuesto por unas 500 especies de crasas cuyo órgano suculento son las hojas.
- Crassulaceae: está compuesto por unas 1300 especies de crasas cuyo órgano suculento son las hojas.
- Didieraceae: está compuesto por unas 11 especies de crasas cuyo órgano suculento es el tallo.
- Euphorbiaceae: está compuesto por más de 1000 especies de crasas cuyo órgano suculento es el tallo.
- Portulacaceae: está compuesto por 26 géneros botánicos a los que pertenecen especies cuyo órgano suculento son el tallo y las hojas.
¿Cómo se multiplican?
Aquí te dejamos un vídeo en el que lo explicamos:
Tipos de crasas
Como ves, hay una gran variedad de plantas crasas. A continuación te hablamos de unos cuantos géneros:
Aeonium
Imagen – Wikimedia/H. Zell // Aeonium canriense
Los Aeonium son unas de las crasas más cultivadas. El género comprende unas 70 especies, siendo la mayoría autóctonas de las Islas Canarias y de Madeira. Crecen formando una roseta de hojas más o menos carnosas de color verde o marronáceo dependiendo de la variedad. Suelen desarrollar un tallo de unos 30 centímetros, aunque hay algunos que pueden superar esa altura, como el Aeonium arboreum.
Aloe
Imagen – Wikimedia/Bernard DUPONT // Aloe striata
Los áloe o sábila son plantas que pertenecen a un género, Aloe, compuesto por unas 525 especies, como el Aloe vera. La mayoría son originarias de África, aunque hay algunas de Madagascar y de Oriente Próximo. Alcanzan una altura de entre los 30 y los 50 centímetros. Sus hojas son casi triangulares y gruesas, y crecen formando una roseta la cual brota, casi siempre de un tallo más o menos corto. Sus flores son tubulares y forman inflorescencias en espigas de color rojo o amarillo.
Argyroderma
Imagen – Lithops Rescue // Argyroderma fissum
Las Argyroderma son un género de 12 especies endémicas de Sudáfrica que alcanzan una altura de 2-3 centímetros. Presentan cuatro hojas verdes muy carnosas: las dos viejas y otras dos que brotan del centro. Sus flores son normalmente de color rosa.
Conophytum
Imagen – Wikimedia/C T Johansson // Conophytum obcordellum
Las más de 400 especies de Conophytum que existen, son plantas muy pequeñas, originarias de Sudáfrica que alcanzan una altura de 2-3 centímetros. Tienen dos hojas casi esféricas y soldadas, hasta el punto de que parece que en realidad solo tienen una si no fuera por el hueco que hay en medio de la planta. Por ese hueco brotan las dos nuevas hojas y las flores, las cuales son amarillas o púrpuras.
Crassula
Imagen – Flickr/Giacomo // Crassula ovata
Las Crassula son un género de 620 especies de crasas originarias de Sudáfrica. Algunas tienen porte arbustivo, como la Crassula arborescens, pero hay otras que son más herbáceas como la Crassula perfoliata. Su altura, pues, oscila entre los 10 centímetros y los 3-4 metros. Tienen hojas con formas y colores muy variados: redondeadas, triangulares, verdes, azuladas, con puntitos,… en definitiva, que son plantas muy, muy interesantes.
Echeveria
Echeveria setosa
La Echeveria es un género de 393 especies originarias de las Américas, en concreto crecen desde el suroeste de los Estados Unidos hasta el norte de Sudamérica. Son plantas generalmente pequeñas, con una altura de unos 30 centímetros como máximo, y que presentan tallos que, a menudo, ramifican. Las flores son carnosas, pequeñas y de colores muy vivos.
Haworthia
Imagen – Wikimedia/Earth100 // Haworthia bolusii
El género de las Haworthia se compone de unas 70 especies la mayoría endémicas de Sudáfrica. Crecen formando rosetas de hojas carnosas, con una altura de hasta 10 centímetros y un ancho de hasta 30 centímetros. Su color es el verde, en sus distintas tonalidades, y cuando florecen producen un tallo floral con flores blanquecinas que supera la altura de la planta.
Lithops
Imagen – Wikimedia/Abu Shawka
Los Lithops son un género de 38 especies de plantas conocidas como piedras vivas o planta piedra que crecen en África austral. Al igual que los Conophytum, presentan dos hojas, aunque ellos las tienen más separadas. De su centro brotan flores blancas o amarillas por lo general. Su altura no suele sobrepasar los 4 centímetros.
Pachyphytum
Imagen – Wikimedia/Sabina Bajracharya // Pachyphytum fittkaui
Los Pachyphytum son un género compuesto por 17 especies oriundas, la mayoría, de México. Desarrollan hojas carnosas, redondeadas o alargadas, las cuales forman una roseta que brota de un tallo delgado y más o menos alto. No suelen superar los 20 centímetros de altura, y florecen produciendo flores de pequeño tamaño de color verde a rosado.
Pleiospilos
Imagen – Wikimedia/Alan Rockefeller
El género de los Pleiospilos comprende entre 20 y 40 especies originarias de Sudáfrica. Crecen unos 3 centímetros de altura, y tienen hojas semiesféricas, opuestas, y muy carnosas de color verde blanquecino o lila dependiendo de la variedad. Las flores brotan del centro de la planta y son amarillas o moradas.
Sempervivum
Sempervivum tectorum
Las 30 especies de Sempervivum que se han descrito son plantas que encontramos en España (en concreto en las Islas Canarias y en las montañas de la península ibérica), así como en Armenia, el Cáucaso, Turquía, los Alpes y los Balcanes. Crecen formando una roseta de hojas más o menos triangulares, con una altura que rara vez supera los 3 centímetros de altura. Producen numerosos estolones, así que terminan formando grupos más o menos amplios.
¿Cómo se cuidan?
Si tienes dudas sobre cómo cuidar de estas bellas plantas, sigue nuestros consejos:
Ubicación
La mayoría de las crasas se tienen que colocar en una exposición soleada, pero hay algunas, como las Haworthia, que es mejor protegerlos del sol durante las horas centrales el día.
Riego
Poco frecuente. Lo ideal es siempre comprobar la humedad del sustrato antes de regar. Para ello puedes introducir un palo delgado de madera y ver cuánta tierra se ha adherido a él: si ha sido mucha, no será necesario regar.
Otras opciones son utilizar un medidor de humedad digital, o pesar la maceta antes de regar y de nuevo después.
Caso especial: invierno con heladas
Si vives en una zona donde en invierno se producen heladas, el riego en dicha estación tiene que ser muy escaso. De hecho, no se debe regar si se esperan temperaturas bajo cero ya que de lo contrario las raíces se podrían congelar.
Teniendo esto en cuenta, si se producen heladas muy seguidas lo mejor es regar una vez al mes.
Sustrato o tierra
Imagen – Pomice per Bonsai
Tiene que tener muy buen drenaje. Por experiencia propia te recomiendo usar pómice (en venta aquí), o bien mezclarlo con un poco -menos del 30%- de sustrato de cultivo universal (en venta aquí).
De todas formas, si las tienes en maceta también puedes usar mantillo (en venta aquí) mezclado con perlita (en venta aquí) al 50%.
Abonado
Durante la primavera y el verano se deben de abonar con abonos minerales. Puedes usar un fertilizante para cactus y crasas líquido (en venta aquí), o bien puedes echar una cucharada pequeña de Nitrofoska cada 15 días.
Época de plantación o trasplante
Tanto si las quieres plantar en el jardín como cambiar de maceta, algo que tienes que hacer cada 2 años, el momento ideal es en primavera.
Multiplicación
Para conseguir nuevos ejemplares puedes sembrar sus semillas en semillero con vermiculita durante la primavera o el verano; o sacar esquejes de tallo y plantarlos en macetas con sustrato arenoso, como el pómice, durante la primavera.
Plagas
Las plagas que pueden afectar a nuestras plantas favoritas son las siguientes:
- Ácaros: como la araña roja. Son animales que se alimentan de la savia de las hojas, dejándoles manchitas decoloradas. Por suerte, se eliminan con facilidad limpiando la planta con agua y jabón neutro, o con un acaricida (en venta aquí).
- Caracoles y babosas: se comen todas las partes de las crasas, hasta el punto de que si los dejamos podemos acabar perdiéndolas en menos de lo que creemos. ¿Qué hacer? Tratar las plantas con molusquicida o bien usar algún remedio que repela a los moluscos, como los que te decimos en este otro artículo.
- Cochinillas: son, con diferencia, la plaga más molesta, la que cada año aparece. También se alimentan de la savia, especialmente de los brotes más jóvenes. Aunque puedes quitarlas con un insecticida anti-cochinillas (en venta aquí) o con tierra de diatomeas (en venta aquí).
- Gusanos de suelo: son larvas de distintos insectos que se alimentan de las raíces de las plantas. Para evitarlo, si se cultivan las crasas en macetas hay que utilizar sustratos nuevos; y si están en el suelo puede ser de ayuda plantar Tagetes patula cerca, ya que los repele.
- Orugas: las orugas se alimentan de las hojas y a veces también de los tallos. Para evitarlo, o minimizar sus ataques, es aconsejable tratar con Diazinón.
- Roedores: pueden volverse adictos a ciertas especies, como los Sedum. Para evitarlo, lo más recomendable es apostar por los repelentes por ultrasonido.
Enfermedades de las plantas crasas
Básicamente, son las siguientes:
- Hongos parásitos: roya, fusariosis, podredumbre, botritis. Sabremos que tiene si vemos manchas marrones, rojizas, blanquecinas o grisáceas en alguna parte. El tratamiento consiste en aplicar fungicidas (en venta aquí).
- Bacterias y virus: en crasas son muy raros, pero pueden causar mosaicos de colores en las hojas. El tratamiento consiste en eliminar las partes afectadas.
Problemas
Los problemas más frecuentes que tienen son los siguientes:
Exceso de riego
El exceso de riego es un problema bastante serio que pueden afectar a las crasas. Por eso, si vemos que se vuelven blandas y si el sustrato está muy húmedo, tenemos que cambiarle la tierra por una como el pómice con un 30% de turba, y tratar con fungicida. Además, reduciremos la frecuencia de riego, regando únicamente cuando la tierra esté seca del todo.
Podredumbre
Puede ser de las hojas, tallos y/o raíces. Ocurre cuando nos excedemos con el riego, si la humedad ambiental es muy alta, o si las cultivamos en una maceta con un plato debajo el cual está siempre con agua.
¿Qué hacer? Quitar las partes afectadas, cambiar el sustrato por uno que tenga un mejor drenaje, y regar menos.
Etiolación
Ocurre cuando no tienen suficiente luz. Las hojas y tallos se desarrollan más de la cuenta para poder captar más luz, creciendo hacia esa fuente más potente. Al hacerlo, se debilitan mucho, y no tardan en doblarse al no poder aguantar su propio peso.
¿Qué hacer? Poner la planta en un lugar más luminoso, pero sin sol directo, al menos por el momento, ya que si se hiciera, se quemaría. Hay que ir acostumbrándola poco a poco. Además, si se trata de una Haworthia, Gasteria o Sempervivum, se tienen que tener siempre en semisombra.
Quemaduras
Las quemaduras aparecen cuando a una planta no aclimatada le da el sol de manera directa, o cuando se tiene en interior junto a una ventana. Se dan casi de la noche a la mañana, así que si tu crasa tiene, has de llevarla a un sitio protegido. Eso sí, ten en cuenta que esas manchas no desaparecerán; se curarán, sí, pero la planta siempre tendrá una manchita marrón.
Rusticidad
Dependerá de la especie, pero la gran mayoría soportan heladas débiles y puntuales de hasta los -2ºC, siempre que sean de corta duración. Eso sí, todas necesita protección contra el granizo.
Diseño con plantas suculentas no cactáceas
Ahora que has conocido muchas plantas crasas y sus cuidados, quizás te interese saber cómo decorar tu hogar o jardín con ellas, ¿verdad? Así que antes de empezar, déjame darte unos consejos:
- Elección de las especies: es importante que se tenga en cuenta el tamaño adulto que llegan a tener cada una de las plantas que quieres utilizar para decorar, ya que de lo contrario a medio o largo plazo tendrás que cambiar el diseño.
- Ten en cuenta el clima: si vas a tenerlas en el exterior, piensa que son plantas a las que no les gusta mucho el frío, de modo que si en tu zona hay heladas tendrás que protegerlas con tela antiheladas por ejemplo.
- Que no les falte luz: pueden estar en lo que a mí me gusta llamar »sombra luminosa», es decir, en una zona donde haya mucha claridad. Ahora bien, si cultivas Lithops, Pleiospilos, u otras plantas que quieren sol, es mejor que estén expuestas a él de manera directa (piensa a aclimatarlas antes para que no se quemen).
Terrarios
¿No te parece una idea maravillosa la de tener un pequeño jardín en tu casa? Son muchas las crasas que se adaptan muy bien a los pequeños espacios, como un acuario o terrario reciclado. Incluso si controlas mucho los riegos, procurando que el sustrato se seque bien antes de volver a regarlo, es posible tenerlos en recipientes de cristal.
Imagen – Wikimedia/christopher
Imagen – Flickr/Sonny Abesamis
Decorar el exterior
Por ejemplo, en una rocalla o jardín de suculentas las crasas quedan muy bonitas, siempre que el clima sea el adecuado y la tierra tenga muy buen drenaje. También puedes hacer estupendas composiciones en macetas y jardineras. Echa un vistazo a estas imágenes:
Imagen – Flickr/FarOutFlora
Imagen – Flickr/Patrick Standish
Jardines verticales de suculentas
Se han vuelto muy populares, y la verdad es que quedan genial en casi cualquier parte. Puedes hacerlos con madera, o comprar uno y simplemente plantar las plantas que mejor se adapten (en general, son las pequeñas como Echeveria, Sempervivum, Pleiospilos, etc.).
Estas tres imágenes proceden de Flickr, usuario FarOutFlora.
Más ideas para decorar
Si necesitas más ideas, aquí tienes. Disfrútalas:
Imagen – Flickr/Michael Coghlan
¿Qué te han parecido estas plantas? ¿Tienes algunas?
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