Plantas exóticas de interior

Si eres un amante de las plantas exóticas, es posible que suelas ir a los viveros en busca de aquellas más raras, es decir, de aquellas que no se ven todos los días. Algunas, dependiendo de su resistencia al frío, son para tener en el jardín, pero hay otras muchas que se pueden tener dentro de casa.

Y de estas últimas voy a hablarte a continuación, porque las plantas exóticas de interior son tan bonitas, que, no sé a ti, pero a mí me cuesta mucho no detenerme a mirarlas, y aún más no adquirir alguna.

Aglaonema ‘Red Zircon’

La Aglaonema ‘Red Zircon’ es un cultivar muy, muy bonito, que alcanza una altura de unos 30-40 centímetros y cuyas hojas van cambiando de color a medida que va creciendo. Estas al principio son rosas, pero cuando el ejemplar es adulto, son rojas. Es increíble lo mucho que cambia con el paso de los años.

Pero eso sí, si tienes animales en casa, debes de tenerla lejos de ellos, ya que es tóxica. Por lo demás, no dudes en colocarla en la habitación en la que haya más luz para que pueda verse preciosa.

Anthurium clarinervium

El anturio es una planta arbustiva tropical muy bonita. En los viveros es bastante fácil encontrar la especie más común: Anthurium andreanum, que tiene la flor roja y las hojas verdes, pero si estás buscando algo más exótico, te recomendamos el A. clarinervium. Como su nombre indica, tiene los nervios de un color claro; de hecho, los tiene blanquecinos, y sus flores también blancas.

Crece hasta los 50 centímetros de altura, pero debes tener en cuenta que es una planta ácida. Esto es muy importante saberlo, pues si lo riegas con un agua alcalina y/o si lo plantas en una tierra con un pH alto, va a tener problemas serios debido a la carencia de hierro. Además, es tóxica si se ingiere.

Caladium

Todos los Caladium son maravillosos. Me resulta muy difícil recomendarte solo uno, porque… en fin, ¡estoy enamorada de ellos! Como su nombre común indica, paleta de pintor, parece que ciertamente han sido pintadas por alguien. Pero no, son naturales. Y hay tantos cultivares que, repito, lo difícil es elegir uno, así que te nombraré unos cuantos:

• Caladium ‘Candidum’: sus hojas son casi blancas con los nervios verdes.
• Caladium ‘Fiesta’: sus hojas son de color verde amarillento con los nervios de un intenso color rosa.
• Caladium ‘Frannie Munson’: las hojas son rosas, con los nervios de un rosa más oscuro.
• Caladium ‘Miss Muffet’: las hojas son verde amarillentas y tienen manchitas rosas/rojizas por toda su superficie.
• Caladium ‘Pearl Blush’: sus hojas son casi blanquecinas, con el borde verde y los nervios de color rosa.

Estas son plantas rizomatosas, que alcanzan una altura de unos 40 centímetros. Les encanta el calor (no extremo), así que son ideales para disfrutar en casa.

Calathea ornata

Si bien existen más de 200 especies de calateas, siendo todas ellas adecuadas para tener en interior, la Calathea ornata es especial. Sus hojas son de color verde oscuro con los nervios rojizos, y la planta puede medir unos 40 centímetros de altura.

Asimismo, es importante saber que es pet friendly, de modo que si a tu gato o perro le da por mordisquearla, no le pasará nada (pero recomiendo mantenerla en un lugar inaccesible para ellos para que no la estropeen).

Codiaeum ‘Red Banana’

O crotón ‘Red Banana’, como también se le llama. Es un cultivar muy atractivo, con hojas delgadas que miden unos diez centímetros y cuyos colores son el verde, el amarillo y el rojo. Llega a medir aproximadamente 50 centímetros de altura, si bien le lleva tiempo, así que puede estar en una misma maceta varios años.

Ahora, es un arbusto que debes de poner en la habitación más luminosa que tengas, pues lo pasa mal en condiciones de poca luz.

Ctenanthe pilosa ‘Golden Mosaic’

Esta es una planta rizomatosa que podría confundirse con las calatea, pero tiene las hojas más anchas y algo más cortas, de diferentes tonalidades de verde. Llega a medir unos 70 centímetros de altura por más o menos 80 centímetros de ancho, así que es una planta grande, que queda muy bien en el salón o en otra habitación amplia.

¿Qué necesita para estar sana? Pues mucha luz (indirecta), algún que otro riego, y temperaturas suaves. De esta manera, la podrás mantener por muchos años.

Macodes petola

La Macodes petola es una orquídea terrestre conocida por el nombre de orquídea joya. Es una planta de interior exótica que tiene las hojas verdes con los nervios de un verde mucho más claro de tacto muy suave, aterciopelado. Sus flores brotan a partir de un tallo floral y son blanquecinas.

Es una especie muy rara, que necesita cuidados especiales para sobrevivir, tales como estar en un lugar con mucha luz pero no directa, con una humedad del aire alta y temperaturas cálidas.

Philodendron hederaceum ‘Brasil’

También llamado potus limón, es un cultivar de Philodendron hederaceum que tiene hojas con forma de corazón, y de color verde oscuro y amarillo. Es una bonita trepadora de interior que puedes plantar en una maceta colgante, o bien enganchar por ejemplo en el marco de una puerta.

Crece unos 4-5 metros de altura, pero como tolera muy bien la poda, solo has de coger las tijeras y recortar sus tallos si consideras que están creciendo en exceso.

Pilea peperomioides

Esta es una planta de lo más curiosa: tiene largos pecíolos de los cuales brotan hojas prácticamente redondas de color verde que miden unos diez centímetros de diámetro cuando el ejemplar es adulto. La altura máxima de la planta es de unos 20-25 centímetros, y mide más o menos lo mismo de ancho, así que es perfecta para tener sobre un mueble estrecho por ejemplo. Pero eso sí: no puede faltarle luz (indirecta), pues de lo contrario no se verá bonita.

Como dato curioso, añadir que en lenguaje popular recibe estos nombres: planta china del dinero, planta OVNI o planta misionera. ¿Los motivos? Los desconozco, pero de lo que no cabe duda es de que es una especie que llama mucho la atención.

Zamioculca zamiifolia ‘Black Raven’

La zamioculca negra. ¿Qué decir de ella? A diferencia de su hermana de hoja verde, esta es de un color verde oscuro, que no llega a ser negro, pero poco le falta. Crece hasta alcanzar una altura de unos 50 centímetros, con tallos carnosos de 1 centímetro de grosor.

Aunque genéticamente está capacitada para florecer, en interior es difícil que lo haga. Ahora bien, si ves que un día le brota una inflorescencia blanquecina o amarillenta en forma de tubo, no te asustes: eso es la flor, y es un indicador claro de que la planta recibe los mejores cuidados.

Hay muchas más plantas exóticas de interior, pero estas diez son, de todas las más raras, las que se pueden conseguir más fácilmente.