Los jardines silvestres tienen el encanto de la naturaleza salvaje. Nos gusta mucho porque son espacios donde se promueve la biodiversidad y podemos construir en él un acogedor refugio para albergar a muchas especies silvestres que acuden atraídos por la variedad de plantas. Se diferencian de otros tipos de jardines en que el silvestre está imitando lo que encontraría en un entorno natural, es decir, no está tan estudiado su diseño y las especies cultivadas, al menos, aparentemente. ¿Te gustaría tener uno privado en tu propiedad? Si amas la naturaleza, te encantará. Y estas son las plantas perfectas para un jardín silvestre donde te gustará perderte durante horas y horas.
Construyendo un jardín silvestre no solamente estarás decorando maravillosamente tu espacio, sino que además estarás aportando un pequeño pero importante granito de arena a la naturaleza, porque estarás contribuyendo a preservar muchas especies vegetales y animales, que van desde pájaros hasta insectos. Incluso no sería raro, según donde te encuentres, que acudieran hasta tu jardín pequeños mamíferos. ¿Amas a los animales? Si me respondes que sí, no puedes perderte esta experiencia.
Estas son las plantas perfectas para ese jardín silvestre
Plantas hay muchas y una gran variedad la puedes sembrar en tu jardín silvestre. No obstante, hay dos clasificaciones a las que podemos recurrir y, de hecho, debemos hacerlo para poder tener un auténtico jardín silvestre. Por un lado, las plantas nativas, pero también son importantes las plantas que atraen a los polinizadores. Vamos a verlas con más detalle.
Plantas nativas: qué son y cuáles son
Las plantas nativas son aquellas que son originales del lugar, es decir, las que mejor adaptadas están al clima de la zona donde vives porque son originarias de ahí. Decirte cuáles son concretamente las plantas nativas perfectas para tu jardín es complicado, porque no sabemos desde dónde nos estás leyendo, pero, investigando un poco por tu cuenta seguro que descubres fácilmente cuáles son según el país o región donde vivas, porque estas pueden variar incluso dentro de una misma provincia, dependiendo de las condiciones climatológicas concretas.
Las plantas nativas favorecen tu jardín y es una buena idea apostar por ellas porque están habituadas al clima y son mucho más resistentes que si introduces una especie foránea con respecto a la cual tendrás que tener mayor vigilancia y cuidados e incluso hacer modificaciones en el suelo o en el ambiente de tu jardín para adaptar el hábitat a sus necesidades.
Por otro lado, la flora silvestre nativa es la que va a atraer y favorecer a la fauna de tu zona, porque en tu jardín, si les dejas acceder a él, encontrarán una buena fuente de alimentos. ¡Ojo y cuidado con esto, si no quieres llevarte algún que otro susto con un visitante inesperado!
Por darte una pista, entre estas plantas nativas se encuentran la Campanilla, el Narciso trompón, el Brezo blanco, diferentes Jaras o árboles como la encina.
Plantas para polinizadores
Los animales polinizadores van buscando alimentarse del polen y néctar de ciertas plantas y flores. Pueden ofrecerte un espectáculo maravilloso con su presencia, especialmente en el caso de las mariposas y los colibríes. Si quieres tenerlos en tu jardín, la mejor fórmula es plantar plantas para polinizadores. Aquí se incluyen especies como:
- Lavanda
- Romero
- Tomillo
- Aciano
- Salvia
- Siempreviva
- Hinojo
- Viborera
- Arbusto de las mariposas
- Dedalera
Cómo crear tu jardín silvestre
Ya sabes las especies que puedes plantar porque son plantas perfectas para un jardín silvestre. Pero también te ayudará a crear ese espacio silvestre en toda regla que las plantas estén a distinta altura y tengan diferentes estructuras. Así quedará más bonito y, además, constituirá un mejor refugio para la fauna silvestre.
Por ejemplo, puedes conseguir esta forma plantando especies como la milenrama, que aportarán a tu jardín silvestre esa altura media tan propia; o la verbena bonariensis, con ramas largas y esbeltas que le dan una buena altura y, además, añade movimiento.
También es una buena alternativa plantar juncia. Quedarán muy bien en los bordes del jardín. Son gramíneas que crecen en zonas con humedad y que le darán la textura de la que estamos hablando.
Aparte de escoger plantas y colocarlas pensando en crear alturas diferentes y texturas, hay otros elementos que te ayudarán a crear una estética espectacular en tu jardín silvestre. Es el caso de los elementos naturales como las piedras, troncos o incluso, si en tu jardín hay espacio para ello, fuentes de agua. Darán un valor añadido a tu decoración, te ayudarán a relajarte y, de paso, proporcionará a las aves un lugar para beber y refrescarse.
Otra propuesta muy interesante es crear un sendero. Es tan fácil y económico como adquirir grava o madera. Conseguirán darle esa apariencia rústica tan atractiva que se potenciará si delineas los bordes de los senderos con plantas de bajo crecimiento.
Consejos para un buen mantenimiento de tu jardín silvestre
Si no quieres demasiadas complicaciones, un buen consejo es escoger especies que sean resistentes a la sequía, porque así podremos estar más relajados en cuanto al riego y, además, estas especies suelen ser también más resistentes a las plagas.
Las plantas que te hemos indicado en este artículo lo son, de modo que seguir nuestra recomendación será fácil si escoges estas plantas.
Ojo que esto no quiere decir que no debas regar o que puedas despreocuparte por calmar la sed de tu jardín. Deberás regar, pero en vez de hacerlo con frecuencia, es preferible hacer un riego esporádico y profundo. Te irá añadir al suelo una capa de mantillo orgánico, porque así estarás ayudando al cultivo a mantener la humedad necesaria.
Finalmente, el jardín silvestre no necesita poda, lo cual lo diferencia también de otros jardines. Pero sí será importante que retires las hojas muertas o plantas enfermas, con el fin de evitar plagas y enfermedades en tus plantas que destrocen tu bonito y cuidado jardín.
Estas que hemos citado con plantas perfectas para un jardín silvestre y te harán vivir bonitas experiencias sin necesidad de salir de tu hogar. Es, sin duda, una buena manera de conectarse con la naturaleza.