¿Cuáles son las plantas que no necesitan luz, o no mucha? Cuando tenemos por ejemplo un jardín que ha madurado, y en el que ya solo quedan rincones de sombra, hay que pensar muy bien cuáles serán las especies que usaremos para llenar esas áreas, ya que no hay muchas que puedan vivir en esas condiciones.
Y es que todas las plantas, en mayor o menor medida, necesitan luz solar. Algunas requieren estar expuestas de forma directa al astro rey, otras en cambio prefieren que les llegue de manera filtrada, y otras en cambio precisan protección contra el sol. Pero incluso estas últimas tendrían serios problemas si se colocasen en zonas oscuras. La luz es clave para que puedan hacer la fotosíntesis y crecer. Así pues, veamos cuáles son las plantas que no necesitan luz (directa).
Aecmea (Aechmea fasciata)
Imagen – Wikimedia/Yercaud-elango
La aecmea, en especial al Aechmea fasciata, es una bromelia que pese a su origen tropical no es tan delicada como se puede pensar. Forma una roseta de hojas acintadas de color verde con franjas blanquecinas, y de su centro brota una inflorescencia rosa. Crece hasta los 30-35 centímetros de altura, y sus hojas miden 40-45 centímetros de largo. Vive estupendamente bajo la sombra de los árboles, así como en interiores. No soporta las temperaturas bajo cero, pero si está muy resguardada sí que puede aguantar heladas puntuales y débiles de hasta los -1,5ºC.
Aspidistra (Aspidistra elatior)
Imagen – Flickr/Phillip Merritt
La aspidistra es una herbácea que alcanza una altura de 40-50 centímetros de altura como máximo. Desarrolla tallos con hojas verdes, aunque según el cultivar puede tener los bordes blancos. Se trata de una especie ideal para rincones de sombra o para interiores con poca luz, ya que además soporta la sequía y las heladas de hasta los -7ºC.
Begonia (Begonia maculata)
Imagen – Wikimedia/GCornelis
La Begonia maculata es una hierba tropical que alcanza una altura de 40 centímetros. Las hojas miden aproximadamente 20 centímetros de longitud por 4-5 centímetros de ancho, y tienen el haz verdes con manchitas blancas y el envés rojo. Es una planta que requiere poca luz para crecer, pero sí una humedad ambiental alta y protección contra el frío.
Cinta (Chlorophytum comosum)
La cinta es una planta herbácea que alcanza los 30 centímetros de altura, pero sus hojas no crecen rectas, sino que se curvan hacia abajo. Llegan a medir unos 35-40 centímetros de largo, y son de color verde o variegado (verde con los bordes blancos). Muy querida tanto en interiores como en los jardines, donde rápidamente formará grupos de cintas, a medida que vaya produciendo estolones. Soporta el frío y las heladas débiles de hasta los -2ºC.
Helecho espada (Nephrolepis exaltata)
Imagen – Wikimedia/Mokkie
El helecho espada o nephrolepis es una variedad de helecho muy adaptable. Desarrolla frondes (hojas) verdes que llegan a medir 1 metro de largo. Al igual que todas las gimnospermas, carece de flores, pero eso no importa: crece rápido, y es muy adaptable. Es una planta que no necesita luz directa ni tampoco muchas atenciones. Soporta heladas débiles de hasta los -2ºC.
Hipoestes (Hypoestes phyllostachya)
Imagen – Wikimediia/Sanjay Acharya
La hipoestes es una pequeña planta que no necesita luz directa que alcanza los 10 centímetros de altura como mucho, y que tiene hojas de colores muy bonitos, como el rojo o el blanco. Es interesante ya que no necesita mucha luz, pero debes saber que es delicada: hay que tener cuidado con los riegos pues no soporta el encharcamiento, y con el frío, ya que solo soporta hasta los 10ºC.
Lengua de suegra (Sansevieria trifasciata)
Imagen – Wikimedia/Mokkie
La lengua de suegra o sanseviera es una planta con hojas anchas y alargadas, carnosas y de color verde, a veces con el margen amarillo. Dependiendo de la variedad llega a medir entre los 30 y los 50 centímetros. Sus flores surgen de un tallo floral, y son de color blanco. Eso sí, necesita un suelo o un sustrato con buen drenaje, ya que sus raíces no soportan el encharcamiento. Soporta hasta los -2ºC.
Oreja de elefante (Alocasia macrorrhizos)
Imagen – Flickr/International Institute of Tropical Agriculture
La planta conocida como oreja de elefante o alocasia es una planta que no necesita luz directa que alcanza una altura de hasta 1 metro. Tiene hojas grandes, de unos 50 centímetros de largo por 15-20 centímetros de ancho, y de color verde. Su ritmo de crecimiento es rápido, siempre que la humedad ambiental sea alta y el clima cálido. Puede soportar hasta los -2ºC.
Palmera de salón (Chamaedorea elegans)
Imagen – Wikimedia/David J. Stang
La palmera de salón es una planta herbácea (una megaforbia, para ser más exactos) que puede medir unos 2 metros de altura. Desarrolla un único tronco de apenas 2 centímetros de grosor, y una corona de hojas pinnadas de color verde que miden 1-1,5 metros de largo. Es una especie de planta pequeña, que se cultiva tanto en macetas como en los jardines. Necesita sombra, así como protección si la temperatura baja de los -2ºC.
Potos (Epipremnum aureum)
El potos es una trepadora de hoja perenne que puede llegar a medir diez metros si tiene soporte. Es muy resistente, de hecho, tanto se puede tener como planta de interior de poco riego, como en un jardín en sombra. Crece rápido, y no necesita que estés muy pendiente de él. Pero tienes que tener en cuenta que no resiste las heladas.
¿Conoces otras plantas que no necesiten luz directa para crecer?